Revilla al Opus: "No creo que sea tanto problema ser colegio mixto, salvo por una cuestión ideológica rara"

Asegura que su gobierno “ni es sectario ni persigue a la religión", que él mismo no tiene “nada contra el Opus Dei ni contra la formación católica”, pero que “si tienen interés en que haya concierto, acogerse a esta condición que exigimos no creo que sea tanto problema, salvo que sea una cuestión ideológica rara". Son las declaraciones que el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha realizado tras hacerse pública la restricción de la ayuda pública al colegio Torrevelo, vinculado al Opus Dei, por ser exclusivamente masculino.

Un día después de la cancelación del concierto, basado en el no cumplimiento de la Ley Orgánica de Educación, Revilla ha prometido que si el colegio acepta la matriculación de alumnas en sus aulas, recuperará el concierto, pero, mientras el centro siga “discrimando por razón de sexo” y no se adecue a la LOE, no recibirá la ayuda que venía recibiendo desde hace 12 años.

Revilla ha respaldado expresamente la decisión de la Consejería de Educación de no renovar el concierto a este colegio, porque "todo lo que hacen los consejeros del Gobierno" tiene el apoyo de los demás miembros del Ejecutivo y el suyo propio, y ha recordado que la LOE indica "claramente" que "no puede haber discriminación de ningún tipo por razón de sexo, raza o condición social" en la admisión de alumnos y ha añadido que la decisión de retirar el concierto al Torrevelo, que sólo admite a varones, cuenta con el aval de varios informes jurídicos.

Según Revilla, los informes de la Dirección Jurídica del Gobierno y del Servicio de Centros Educativos dicen que no puede haber una financiación pública si no se cumple ese requisito de la LOE, y ha dado al Torrevelo un año de prórroga para que los padres puedan buscar otro centro educativo o para que el colegio "se acomode a esa prescripción legal". En este último caso, el Ejecutivo volvería estudiar la situación y el colegio recuperaría el concierto.

Miguel Ángel Revilla ha insistido en que la ley es "tajante" y en que su Gobierno no discrimina en función de que se enseñe religión o que se imparta formación católica.

El presidente cántabro, que ha argumentado como prueba que su hija estudia en un colegio concertado que regenta una congregación de religiosas, ha reiterado que "no somos sectarios ni perseguimos la región. ¡Faltaría más!", pero la financiación pública de los centros educativos está sujeta "a unas condiciones" y que "no hay ninguna sentencia" que dé la razón a este centro.