PP y PSC ponen en la picota a Mas: sólo pactarán con CiU si cae el ‘president’

Tanto el Partido Popular (PP) como el Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) estarían dispuestos a apoyar al Gobierno catalán si se desmarca de la agenda independentista que ha asumido tras su pacto con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). Sin embargo, diversas fuentes de las cúpulas de estos partidos consultadas por El Confidencial consideran que con Artur Mas al frente del Ejecutivo autonómico cualquier acuerdo es “casi imposible”.

“Sabemos que es muy difícil, porque tendría que dar un giro de 180 grados y hacer un acto de contrición. Y no parece que eso sea posible con el actual presidente de la Generalitat. Por tanto, si Artur Mas sale, ya veremos”, señala un miembro de la cúpula popular a este diario.

El líder del PSC, Pere Navarro, ya lo dejó caer hace unos días, cuando lamentó que ahora el presidente catalán invite a ERC y a PSC a entrar en el Gobierno: los socialistas aceptarían formar parte del Ejecutivo junto a otros partidos, pero con la condición de que no estuviese presidido por Artur Mas. Es una contraoferta envenenada, ya que Navarro no olvida que el pasado mes de diciembre, cuando se reunió con el recién elegido presidente de la Generalitat y le propuso un Gobierno de unidad, la respuesta que recibió es que CiU ya había pactado con ERC.

Navarro se lo recordó a Artur Mas el pasado lunes, tras una reunión de trabajo en la sede del PSC. “La oferta de Mas se hizo a través de los medios de comunicación -se quejó el líder de los socialistas-. Nadie se dirigió a nosotros. Pero tenemos nuestras prioridades: becas comedor, que se pague al tercer sector, que haya políticas de lucha contra el paro. Son nuestras condiciones. Estamos a favor de realizar una consulta, pero que sea legal y acordada. El Gobierno habría de ser de unidad nacional y los partidos nos tendríamos que poner de acuerdo en unos principios básicos. Yo lo propuse pocos días después de las elecciones y mi ofrecimiento fue comentado de manera irónica, de manera poco apropiada, incluso prepotente, por algún miembro del Gobierno. Y no se puede ir diciendo que quieres hacer un Gobierno de coalición cuando no estás por la labor de acordar nada”.

Para los socialistas, “Mas es quien ha alimentado hasta ahora las discrepancias y las divisiones, y pensamos que no es el más adecuado para encabezar un Gobierno de unidad nacional, aunque esa no es una condición indispensable”. 

En brazos de ERC

Estos posicionamientos dejan a Artur Mas en brazos de ERC, puesto que es la única formación que le ofrece su confianza. La incógnita es si podrán mantener su pacto y si los republicanos mantendrán su promesa de apoyar los presupuestos de este año y del próximo. Su condición indispensable es la celebración del referéndum independentista en 2014 o, a poder ser, antes. Pero hay otro problema añadido: los presupuestos incluirán severos recortes sociales, por lo que ERC vivirá fuertes tensiones internas ya que las bases del partido están radicalmente en contra de apoyar estos recortes.

En el PP, vaticinan que “el pacto con ERC es muy difícil. La actividad parlamentaria y gubernativa es mínima, casi simbólica. El Gobierno está paralizado. Mientras duró el pacto con nosotros, sacamos adelante las leyes Ómnibus, hubo pacto en la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) y aprobamos los presupuestos. Ahora, en cambio, hay mucha parafernalia y mucha palabrería, pero nada concreto. Ya con el tema del recorte de las nóminas de los funcionarios, Esquerra tuvo problemas internos. Y habrá que ver si puede asumir los nuevos presupuestos”.

Según el PP, “nuestros mensajes serán sobre financiación y sobre la posibilidad de flexibilización del déficit. Mas ha de comprender que el tema de la financiación es un tema transversal y que, además, interesa a los catalanes, pero si se enroca en la independencia no podremos entendernos”.