Mas confirma ante Lara que no hay marcha atrás en su proyecto independentista

“Hay cosas en la vida que se han de intentar, incluso aunque no tengas la garantía de que vayan a salir bien”. Así de tajante se mostró ayer el presidente de la Generalitat, Artur Mas, ante el empresario que más ha mostrado su oposición al proyecto independentista: José Manuel Lara, presidente de Planeta. Lo podía decir más alto pero no más claro. Los planes del president para una Cataluña fuera de España siguen adelante por muchas dudas que tengan los grandes empresarios catalanes.

Ambos coincidieron en un acto de la Fundación Aula, en la Escuela Aula, de la que ambos son exalumnos y donde estudian sus hijos (en el caso del presidente de Planeta, incluso sus nietos). El líder de la Generalitat era el ponente y lo presentaba Lara, como presidente de la Fundación. Mas ya advirtió que el hombre de Planeta le había pedido que hablase “como exalumno, no como presidente del país”. Sin embargo, el acto estuvo salpicado de alusiones políticas, eso sí, en un clima distendido, lejos de la tensión que esperaba el abarrotado auditorio, especialmente después de que Lara hubiese amenazado con llevarse la sede de Planeta fuera de Cataluña si ésta obtenía la independencia.

Mas se reafirmó en su proyecto secesionista en todo momento. Se mostró cordial, pero firme. Así, por ejemplo, explicó que esa misma noche iba a coger el AVE para acudir a la reunión de hoy de presidentes autonómicos en Madrid, por lo que no podría quedarse al cóctel posterior. “Ese tren no me esperará. Yo no puedo perder el tren, ya me entienden”, añadió el president, despertando el aplauso de un público que estaba entregado. Cuando entró, cerca de 400 personas le recibieron en pie y aplaudiendo.

Todos los mensajes de Mas fueron en el mismo sentido: no hay marca atrás en el proyecto de secesión que el actual Gobierno de la Generalitat ha iniciado. Como, por ejemplo, cuando señaló que “hay algunas responsabilidades que no se pueden delegar”

Elogio a Lara

El presidente catalán incluso se permitió elogiar a Lara. La Escuela Aula es muy exigente. Se calcula que un 30% de sus alumnos no llegan a cursar tercero de ESO. El propio Mas reconoció en el acto que alguno de sus hijos había tenido que dejar el centro por no llegar al nivel exigido y añadió “los Mas no somos tan espabilados como los Lara”, a lo que éste respondió con risas.

Pero también hubo reproches. Artur Mas, en el tono jocoso de todo el acto, le echó en cara a Lara que nunca le dijese que si aceptaba la vicepresidencia de la Fundación Aula era para sucederle a la cabeza de la institución, algo que finalmente no pasó porque Artur Mas entró en los gobiernos de Jordi Pujol como consejero de Obras Públicas. “Bueno, Pujol tampoco te advirtió que si te ibas con él ibas a acabar presidiendo la Generalitat”, le replicó Lara, despertando las risas del respetable.

Escuela de élite

Escola Aula, ubicada en el barrio de Pedralbes, es una escuela de élite. Las mensualidades cuestan 600 euros por niño incluyendo el comedor. Y sin sumar otros gastos, como las actividades extraescolares o las cinco rutas de autocares que llevan a los estudiantes al centro.

Además de Lara o Mas, otras personalidades catalanas como el propio Jordi Pujol han llevado a sus hijos a esta escuela. El jefe de la Generalitat destacó que, a pesar de que alguno de sus hijos no había podido terminar, él seguía recomendando el centro. Y subrayó que imprimía carácter y “una determinada estructura mental”.