El PSOE andaluz ‘huele’ a derrota en la convención regional de Málaga

Para empezar, un guiño antifranquista. “¡Ponernos cara al sol es una indecencia!”, bromea José Antonio Griñán en la pose de la foto de ¿familia? socialista. Un nutrido grupo de la lista del PSOE al Parlamento de Andalucía se deja retratar junto a Griñán delante del Palacio de Ferias y Congresos de Málaga. “¡Aupa Atleti!”, grita el candidato a la Junta de Andalucía dejando claro que su equipo es el rojiblanco madridí. Se va animando: “Ahora aplaudimos al ritmo rumbita”. Y todos aceptan la orden del jefe Pepe.

“Aquí vienen los afiliados que quieren, no se trata de llenar esto de autobuses de los pueblos”, aclara un veterano socialista malagueño. Se nota. No parece un funeral, pero por momentos casi lo parece. Con un retraso de 20 minutos, llega Alfredo Pérez Rubalcaba al Palacio. Ni aplausos, ni vítores, ni música. Rubalcaba, Griñán, Susana Díaz, Gaspar Zarrías y media docena más de cargos orgánicos se reúnen en una sala antes de aparecer por el auditórium número 1 de este cónclave con olor a derrota para el 25 de marzo.

Imitando a Bibiana Aído con lo de “miembras”, Miguel Ángel Heredia, secretario general del PSOE de Málaga, abre el telón inventándose una palabra: “militantas”. María Gámez, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Málaga, lo recuerda antes de dar la palabra a Rubalcaba, que empieza su discurso apoyando a Griñán, intentando olvidar los graves problemas internos de un PSOE en descomposición. “Aquí estoy y me tenéis para apoyar a mi partido, al presidente de mi partido, al mejor candidato y al mejor presidente de la Junta de Andalucía. Estaremos con vosotros, como siempre, pero más que nunca nos tendréis aquí, como queráis, donde queráis, con los socialistas andaluces”.

El discurso de secretario general del PSOE andaluz es largo, muy largo (más de 40 minutos) y empieza recordando que ya sólo hacen falta cinco semanas para las elecciones. “Para ganar deberemos multiplicar nuestros esfuerzos y transmitir nuestros mensajes para hacer ver que nada es inevitable. El principal problema no es el déficit, es el paro”, resalta el presidente del Ejecutivo andaluz.

“Sensibilidad, gracejo, alegría… También investigación e innovación”

Griñán lanza varios dardos contra las declaraciones de la ahora ministra de Sanidad, Ana Mato, sobre los niños sin pupitre en un colegio de Málaga, del PER, del analfabetismo, “y de esas  ofensas que se mofan del habla andaluz; nos tachan de indolentes y se ríen de nuestras costumbres. Tenemos sensibilidad, gracejo y alegría, pero se olvidan de la investigación, análisis o innovación de Andalucía: son ellos [el PP] os que nos ven a través del estereotipo o tópico”.

Acaba el discurso y el presidente de la Junta toma un refresco en la cafetería del Palacio con políticos del PSOE de Cádiz, entre ellos Francisco Menacho, consejero de Gobernación. Ni rastro de los críticos Luis Pizarro, el antecesor de Menacho en el cargo y Francisco González Cabaña, secretario general del socialismo gaditano.

Un dirigente del PSOE avanza, Cola-Cola mediante, su pronóstico para el 25M. “Va a ocurrir como en 1996. Las encuestas decían que Manuel Chaves [no está en la convención] perdía el Gobierno andaluz y al final mantuvimos el poder. Cuarenta días son muchos y podemos remontar”, señala a El Confidencial este político socialista. Se acerca Paulino Plata, consejero de Cultura de la Junta de Andalucía, y pregunta: “¿Cuándo es la foto fuera?”, “Paulino, a las dos y media”.

José Luis Sánchez Teruel, secretario general del PSOE de Almería, se monta en una de las tres bicicletas horizontales que cuestan 1.200 euros. Cuando se baja este diario le pregunta por no contar en las listas almerienses al Parlamento andaluz con Pilar Navarro, la diputada 10 laminada por Griñán, como destapó el jueves este diario, con 25 matrículas de honor de 25 asignaturas de la Facultad de Derecho de la Universidad de Almería.

“Las razones por las que se incluyen a una y otra persona se dieron en el comité provincial de Tabernas y en la reunión previa. Agradecimos el trabajo de Pilar, que tuvo la suerte y el honor de representar a Almería durante ocho años. Es normal la renovación de cargos”, explica Sánchez Teruel a El Confidencial, que también alardea de currículo. “Mi CV no tiene nada que envidiar al de Pilar, pero no voy a enseñarlo. Tuve muchísimas matrículas de honor, también en Derecho, en mi caso en la Universidad de Murcia”.

Sánchez Teruel continúa con el caso de la parlamentaria vetada: “Tenemos muchísima cantera y unas veces nos toca a unos y luego a otros”. Un alto cargo de la Junta de Andalucía que prefiere guardar el anonimato valora la cualificación de Pilar Navarro, pero señala: “¿Qué ha hecho en la Fundación Alfonso Perales? ¿Cuál es su balance de gestión en la Secretaría de Ideas y Programas?”, se pregunta.

La “hostia” y los “dos cojones” del PP

A las 18 horas comienza un debate entre Griñán y los líderes sindicales andaluces de Comisiones Obreras (Francisco Carbonero) y UGT (Manuel Pastrana). El secretario general ugetista plantea un discurso muy guerrillero y resalta: “El PP utiliza a los parados como rehenes. Ya dicen claro que la reforma laboral no va a crear empleo, ¿entonces para qué querían la puñetera reforma?”. Carbonero también habla “indignado con la señora Cospedal, pero ¿qué hace el PP con los parados? El cambio del PP parecía que iba a ser la hostia. El cambio va a peor”.  Pastrana: “¿Cómo lo hace el PP? Con dos cojones, como lo hace la derecha”.

Griñán enlazó con el discurso bienhablado de los sindicalistas y se refiere no sólo a “la hostia” de Carbonero, sino que explica porqué no han invitado a los empresarios. “Teniendo en cuenta las movilizaciones no estarían muy a gusto en este encuentro. Nuestros aliados son los empresarios que crean empleo. El problema es que las organizaciones empresariales han perdido su condición de tales. La patronal se ha convertido en un lobby. Presionan para obtener unos beneficios que no necesitan”.

La convención acaba sin un gramo de autocrítica y sin rastro de los EREs falsos, el mayor escándalo de corrupción de la comunidad andaluza, según confirmó Rafael Escudero, primer presidente electo de la Junta de Andalucía, en la entrevista concedida a El Confidencial. “Nuestro objetivo”, admite Griñán, “es ganar en Francia. Si no, estamos arruinados. Sólo quedan tres países más pequeños que Andalucía que son socialistas”. Y remata, a la desesperada, matando al mensajero: “A la calle que ya es hora, la prensa no es nuestra, nosotros somos más que la prensa, ni un paso atrás”. El PSOE andaluz huele a derrota.