La CNMV reclama la potestad que tiene Luis de Guindos en materia de sanciones

La presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Elvira Rodríguez, está ultimando una propuesta de reforma normativa al Gobierno que incluye una reclamación en toda regla para que el organismo regulador asuma la capacidad de imponer las sanciones muy graves en bolsa. Dicha potestad es conferida tradicionalmente al ministro de Economía, de acuerdo con lo dispuesto en la Ley del Mercado de Valores.

El artículo 97 de la actual regulación, que data del año 1988, concede en este caso a Luis de Guindos la decisión final sobre las sanciones que corresponden a las infracciones definidas como “muy graves” y que, a la postre, son las que pueden establecerse en los supuestos que ahora están de ‘rabiosa’ actualidad en España. Expedientes como los que la CNMV mantiene abiertos acerca de la conducta de los antiguos administradores de Pescanova o en el más multitudinario asunto de las participaciones preferentes de los bancos nacionalizados están abocados a terminar sobre la mesa del titular de Economía.

La CNMV estimaque la responsabilidad derivada de su actuación supervisora debiera traducirse en una consecuente capacidad sancionadora, equivalente por otro lado a la que ostenta el Banco de España en su ámbito de circunscripción financiera. El organismo encargado de velar por el correcto funcionamiento del mercado bursátil considera que las lecciones de la crisis son suficientes para otorgar mayoría de edad a una institución condenada hasta la fecha a servir como ‘el hermano pequeño’ de la más solemne y mejor reconocida autoridad monetaria.

Levantar el velo de las auditorías en bolsa

La nueva presidenta de la Comisión de Valores tiene también otra reivindicación de profundo calado que puede resultar definitiva para reforzar los poderes del organismo regulador. Este segundo capítulo afecta a todas las relaciones con las firmas de auditoría y las que estas puedan mantener con sus clientes. El escándalo de Pescanova ha abierto los ojos de la CNMV, que va a solicitar un mayor control sobre los auditores de las sociedades cotizadas.

El plan de la CNMV se orienta de modo especial a las sociedades no financieras y tiene por objeto levantar el velo del secreto en las auditorías que se efectúan sobre los estados contables de las empresas cotizadas. En sus últimas consecuencias, la propuesta de la Comisión de Valores implicaría directamente al Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), organismo autónomo adscrito al Ministerio de Economía y cuyo futuro podría vincularse más estrechamente a la entidad presidida por Elvira Rodríguez.

La titular de la CNMV encabeza también la comisión de expertos encargada de presentar también al Gobierno el plan de actuación en materia de gobierno corporativo. La primera tareade este ‘grupo de sabios’, con representantes del sector privado y la Administración Pública, consiste en definir las recomendaciones de buen gobierno que, en un próximo futuro, serán reguladas como ‘normas duras’ de obligado cumplimiento.

Entre las nuevas obligaciones legales figura la creación de una comisión de retribuciones y nombramientosque funcionará como entidad delegada del consejo de administración con la misión de fijar la política salarial de las sociedades cotizadas. La mayor parte de las empresas del Ibex35 incluyen en sus estatutos dicho comité de gestión, por lo que es de prever que los inversores institucionales reclamen gestos adicionales por parte del Gobierno. La regeneración empresarial y su celebración en la plaza pública requieren algo más que un mero brindis al sol.