Lío en Londres: Industria y Goldman Sachs irritan a los fondos de la City

Londreses un hervidero.El Ministerio de Industriano sólo ha enfadado a las empresas eléctricas por la nueva reforma del sector, que supondrá un coste adicional de entre3.000 y 4.000 millones de euros, sino quetambién ha irritado a los grandes gestores de cartera internacionales, a muchos de los cuales ha dejado fuera de una reunión que hoy mantendrá en la capital británica con un grupo restringido de bancos.

La cartera que dirigeJosé Manuel Soriaha convocado a las 16:30 h un encuentro en elHotel Meliá White Housede Londres con el objetivo de explicar los efectos de la nueva regulación eléctrica aprobada hace diez días. Para coordinar la reunión, Alberto Nadal, hombre de confianza de Soria, se ha puesto en manos deGoldman Sachs, banco de inversión que ya ayudó al Gobierno en la nacionalización de Bankia.Al acto se espera que acudan el propio ministro de Industria yel de Economía, Luis de Guindos.

Pero la iniciativa, lejos de ser un puente para recuperar la confianza perdida de los inversores en el Ministerio de Industria por la inseguridad jurídica, ha provocado un enfrentamiento con un gran número de gestores con miles de millones invertidos en las eléctricas españolas. Y es que Goldman Sachs sólo ha invitado a firmas comoJP Morgan, Banco Santander, Deutsche Bank, UBS, Macquerie y Fidentiis,un bróker español con grandes clientes institucionales.

Sin embargo, Goldman ha dejado fuera de este encuentro a bancos comoCiti, Morgan Stanley y BBVA, así como a gestoras del tamaño deFidelity, con más de 180.000 millones bajo gestión;BlackRock, el mayor inversor extranjero de la Bolsa española;Citadel(12.500 millones) oAmber, entre otras instituciones. Varias de estas entidades han presentado sus quejas formales al Ministerio de Industria por lo que consideran una “discriminación” sin ninguna justificación.

Otras firmas han cursado también sus respectivas quejas a laEmbajada españolaen Londres por estimar que se les ha marginado de una presentación oficial de gran importancia, ya que muchas gestoras tienen depositadas grandes sumas de dinero en las compañías eléctricas y en plantas fotovoltaicas y termosolares, así como en parques eólicos. Asimismo, algunos brókeres han requerido a Goldman Sachs una explicación para saber el motivo por el que la reunión se ha organizado de forma restringida.

Sea como fuera, el enfado entre las gestoras es monumental, según reconocieron varias de las que se han quedado fuera del evento. “¿Temen que les vaya a echar en cara la inseguridad jurídica? Esto no lo hace un país serio que quiere atraer capital extranjero. Supongo que no tendrán ninguna sorpresa adicional”, asegura un inversor que pide el anonimato.

"Medidas difíciles... pero necesarias"

Mientras el revuelo en Londres no dejaba de crecer durante la tarde de ayer, el ministro de Industria, Energía y Turismo explicó que la reforma energética aprobada por el Gobiernoevita la"quiebra" del sistema eléctricoy resuelve la "maraña legislativa a la carta". Durante su participación en unas jornadas sobre el sector eléctrico organizadas por Unidad Editorial, Soria indicó que, "de no hacerse nada", los costes regulados habrían alcanzado 30.000 millones de euros en 2020, mientras que los ingresos se situarían en 20.000 millones, lo que generaría un déficit de tarifa de 10.000 millones.

"Habiendo terminado el Fade (fondo para la titulización de la deuda eléctrica), se produciría la quiebra del sector", sostuvo el ministro para defender la necesidad de actuar y adoptar medidas como las anunciadas, que calificó de "necesarias" pese a la "incomodidad" que generan en un sector "con gran capacidad de persuasión en el conjunto de las Administraciones Públicas".

En su discurso, indicó además en varias ocasiones que las medidas adoptadas por el Gobierno el pasado 12 de julio, que incluyen un recorte de 2.700 millones a las empresas y subidas del 3,2% de la luz, son "difíciles de asumir", pero "necesarias"."Sabíamos que no nos iban a generar amigos", dijo. Por lo visto, ni dentro ni fuera de España.