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Iglesias reclama a Sánchez un 'Gobierno a la valenciana' con el apoyo de nacionalistas
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DEBATE DE INVESTIDURA

Iglesias reclama a Sánchez un 'Gobierno a la valenciana' con el apoyo de nacionalistas

Las exigencias de Podemos siguen pasando por formar parte de un gobierno de coalición juntos a socialistas, Compromís e IU-UP y porque el PSOE suelte amarres con Ciudadanos

Foto: El líder de Podemos, Pablo Iglesias, durante su intervención previa a la segunda votación de la sesión de investidura. (EFE)
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, durante su intervención previa a la segunda votación de la sesión de investidura. (EFE)

Pablo Iglesias ha abandonado el tono beligerante contra Pedro Sánchez que utilizó en su primer discurso de investidura para reclamar un "Gobierno a la valenciana". Una coalición junto al PSOE que incluya también a Compromís e Izquierda Unida-Unidad Popular y obtenga el apoyo de los grupos nacionalistas. El líder de Podemos ha recriminado a Sánchez que PNV, ERC y DiL "no son mostruos, son representantes de la soberanía popular", por lo que lo animó a dialogar con ellos para alcanzar los votos suficientes de cara a una segunda sesión de investidura.

[Siga en directo la segunda votación de la investidura]

Las exigencias de Podemos siguen pasando por formar parte del gobierno de coalición y porque el PSOE suelte amarres con Ciudadanos. "No se puede mirar a la izquierda para un acuerdo social y a la derecha para un acuerdo económico", ha concluido Iglesias. Anticipando el fracaso de la investidura de Sánchez, como ya viene haciendo desde antes de que comenzase la investidura, Iglesias ha insistido en que sigue con la mano tendida: "Pongamos a trabajar a partir de esta noche", ha emplazado a los socialistas.

Intervención de Pablo Iglesias en la sesión de investidura.

El secretario general de la formación emergente ha iniciado su intervención con un metadiscurso, ironizando sobre el beso en los labios que se dio con el portavoz parlamentario de En Comú, Xavier Domènech. Incluso se atrevió anticipar el nombre de un hipotético acuerdo con los socialistas: "El pacto del beso". Tampoco desaprovechó la ocasión para repasar el impacto mediático de su estreno en el Congreso, mencionando además polémicas televisivas derivadas de unas declaraciones de la diputada popular Andrea Levy, en las que reconocía su atracción por el diputado de Podemos Miguel Vila: "Por si quieren conocerse, pongo a disposición mi despacho", bromeó volviendo a asegurarse la atención mediática de los próximos días. "Fluye el amor en la política española. Pedro, solo quedamos tú y yo", remachó.

PNV, ERC y DiL "no son mostruos, son representantes de la soberanía popular. Dialogue con ellos"

Tras rebajar la tensión con el irónico inicio de su intervención, siguió allanando el terreno para reclamar a los socialistas que retomen las negociaciones a cuarto con las fuerzas de izqueirda. "Atrévase a ser presidente de un Gobierno de coalición", dijo. Recuperando parte de su discurso rupturista del pasado miércoles, y contradiciendo el binomio de Sánchez (o conmigo o con Rajoy) el líder de Podemos argumentó que la verdadera preocupación del presidente en funciones "es que se ponga de acuerdo con nosotros. Eso es lo que le preocupa a las oligarquías de este país".

Volviendo a mencionar el "Gobierno a la valenciana", que surgió con el denominado 'Pacte del Botanic', Iglesias reclamó a Sánchez que "tiene que asumir que las responsabilidades y las decisiones las vamos a tomar conjuntamente" para recabar el apoyo de sus 65 diputados. Una condición que, sin embargo, no ponen sobre la mesa, al menos de momento, ni Compromís ni la coalición de izquierdas liderada por Alberto Garzón.

Lejos han quedado las acusaciones contra un partido que, según afirmó Iglesias en su dúplica de la segunda jornada de investidura "fue el del crimen de Estado", por lo que animó a Sánchez a deconfiar "de los que tienen su pasado manchado de cal viva". En cambio, y por la vía propositiva, Iglesias recordó que tanto Podemos, como Compromís, IU, las confluencias, los grupos catalanes y vascos "señalaron otra vía posible: la del Gobierno progresista que contaría con más votos a favor que en contra". La pelota vuelve a estar en el tejado de Ferraz.

Pablo Iglesias ha abandonado el tono beligerante contra Pedro Sánchez que utilizó en su primer discurso de investidura para reclamar un "Gobierno a la valenciana". Una coalición junto al PSOE que incluya también a Compromís e Izquierda Unida-Unidad Popular y obtenga el apoyo de los grupos nacionalistas. El líder de Podemos ha recriminado a Sánchez que PNV, ERC y DiL "no son mostruos, son representantes de la soberanía popular", por lo que lo animó a dialogar con ellos para alcanzar los votos suficientes de cara a una segunda sesión de investidura.

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