Montoro logra que Rajoy vete a Soledad Núñez como subgobernadora del BdE

Cristóbal Montoro sigue haciendo valer su poder dentro del equipo ministerial. El titular de Hacienda ha sido el responsable de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, terminara vetando el nombramiento de Soledad Núñez como subgobernadora del Banco de España, según han confirmado a este diario fuentes del Ejecutivo. Esta decisión ha supuesto la ruptura del visto bueno alcanzado días antes por el ministro de Economía, Luis de Guindos, con el PSOE para decidir el puesto de número dos del organismo supervisor, además de mostrar la existencia de serias desavenencias entre los dos hombres del Ejecutivo que se reparten las competencias sobre materia económica.

La comparecencia del ministro Luis de Guindos el pasado jueves ante la Comisión de Economía del Congreso, en la que informó sobre el nombre de Luis Linde como nuevo gobernador del Banco de España, abrió las carnes de algunos compañeros del equipo de Gobierno. Desde el Ministerio de Hacienda y desde el Grupo Popular no se entendía cómo se aceptaba a Soledad Núñez como candidata para número dos y se pasaba por alto que se trataba de una persona que formó parte del anterior Gobierno del PSOE, con el que ocupó puestos muy relevantes en la Oficina Económica de La Moncloa y como directora general del Tesoro.  

Tras los pertinentes cruces de llamadas, a última hora del jueves por la noche, el Ministerio de Economía tuvo que retractarse y deshacer el visto bueno que, públicamente, había confirmado su titular y que el exministro Valeriano Gómez, ahora portavoz económico del PSOE, también se había encargado de celebrar tras la comparecencia del propio Guindos. Todo estaba cerrado hasta que dejó de estarlo, para sonrojo de unos y satisfacción de otros, que lograban convencer al mismísimo presidente del Gobierno del desacierto que suponía colocar como número dos del Banco de España a una persona “de carnet”.

Una vez tomada la decisión, el propio Mariano Rajoy se encargó personalmente de comunicar al líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, la decisión de no dar por buena la candidatura de Soledad Núñez, esposa de Javier Vallés, el último responsable de la Oficina Económica de La Moncloa, y compañera universitaria y amiga personal de Miguel Sebastián, su introductor dentro del equipo económico que se articuló en torno a José Luis Rodríguez Zapatero durante sus ocho años de mandato. A pesar de no formar parte de las filas socialistas, la exdirectora general del Tesoro estaba demasiado marcada.

El argumento esgrimido por Montoro resultó inapelable para Rajoy. De esta manera, el presidente ha preferido apoyarse ahora en el responsable de Hacienda, que también cuenta con la complicidad de Álvaro Nadal, el responsable de la Oficina Económica de La Moncloa, en lugar de Guindos, a quien ya ha dejado, en este pulso en concreto, proponer al candidato para dirigir el Banco de España. De alguna manera, el líder del PP ha querido repartir poderes entre los dos ministros, que durante los seis meses en el Gobierno ya han tenido más una discrepancia seria por imponer sus tesis.

Tras informarle de su decisión, la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, fue la encargada de informar en la rueda de prensa de los viernes que el Gobierno había comenzado a negociar el nombre del subgobernador, dando por tanto por eliminada la candidatura de Soledad Núñez. Un veto calificado por los socialistas como “inaceptable". La vicepresidenta se limitó a explicar que se mantiene "un diálogo" con el PSOE para alcanzar "una solución consensuada". En cualquier caso, un borrón más en el bochornoso espectáculo ofrecido a lo largo del proceso ejecutado para relevar al gobernador saliente Miguel Ángel Fernández Ordóñez.