Una psicóloga, arma de Scolari para vencer el miedo al Maracanazo

El viernes tendrá lugar el primer gran acto del Mundial 2014, cuando en la brasileña región de Costa do Sauípe (Bahía) se sortee la configuración de los ocho grupos. En el país de los cinco títulos mundiales, el nerviosismo por la cita del próximo verano empieza a ser más que palpable. Y para saber encauzar todo el torbellino emocional que se le viene encima a la selección de Brasil, su entrenador, Luiz Felipe Scolari, se apoya con fuerza en una profesional de la psicología llamada Regina Brandao.

Esta psicoterapeuta deportiva no es nueva en su staff técnico. De hecho, lleva desde finales de los 90 trabajando con ‘Felipao’ y, por ejemplo, ya ayudó con su labor a ganar el Mundial de 2002 o a que Portugal alcanzara el subcampeonato de Europa de 2004 y las semifinales mundialistas de 2006. Al ser presentado en su actual cargo hace justo un año, Scolari hizo una mención especial a Brandao, sabedor desde el primer momento de la importancia que jugará el aspecto psicológico en su equipo nacional.

Brasil es más favorita que nunca por su calidad de anfitrión. El único precedente data de 1950, y se saldó con el archiconocido Maracanazo: la derrota en el encuentro final ante la inferior Uruguay, en un Maracaná abarrotado por 200.000 espectadores que enmudecieron ante una desgracia futbolística que convulsionó a todo el país. La ‘canarinha’ tiene ahí el lunar más doloroso de su historia. Y el temor a que una tragedia así vuelva a repetirse condiciona todo el trabajo de Scolari, quien sabe que no se espera otra cosa de su Selección que la victoria.

El periódico estadounidense The New York Times tuvo acceso a uno de los cuestionarios que Brandao les hace a los futbolistas. Tal y como recoge el reportaje, el estudio de la psicóloga es profundo y pormenorizado, y se centra en los sentimientos que produce en cada jugador determinadas situaciones del deporte y de la vida pública que deben soportar. La terapeuta guarda resultados de todos los equipos donde ha estado con Scolari, y las conclusiones a las que llega es que hay factores culturales que marcan claras diferencias, como que una tarjeta amarilla es aceptada con naturalidad por los portugueses pero vista como algo doloroso por un brasileño, por ejemplo.

"Mi trabajo es elaborar un perfil psicológico de cada jugador para ayudar a Scolari en lo individual y en lo colectivo.Se trata de entender cómo se siente cada jugador y cómo eso afecta a su forma de jugar", explicó Brandao hace tiempo en una entrevista. Lo más importante es que Scolari confía ciegamente en los métodos de su psicóloga, como ha reconocido públicamente más de una vez: "Nuestros jugadores son muy habilidosos, de los mejores del mundo, pero lo que realmente importa es qué tipo de personas son.Unos son más melancólicos, otros más agresivos.Esta es la parte científica. Y esasí como ganamos".

La victoria a España sirvió de ensayo motivador

Regina Brandao acostumbra a reunirse en privado con los futbolistas, y da veredictos que acaban influyendo directamente en las decisiones del seleccionador brasileño. Scolari destacó su labor cuando en 2002 ayudó al grupo a superar la repentina e “irreparable pérdida”, en palabras del propio técnico, del capitán Emerson a pocas horas del comienzo de aquel Mundial. Y la vinculó a su decisión de que el brazalete de Portugal lo portara Nuno Gomes secundado por un jovencísimo Cristiano Ronaldo.

Ahora, la experta en estrés deportivo licenciada en Cubatiene horas extras por delante en los seis meses que quedan para el comienzo de Brasil 2014. Dijo Scolari que tiene un grupo de unos 25 jugadores de donde saldrá la lista definitiva de 23. Seguramente, la confección de ese colectivo está también muy condicionada por la opinión profesional de Brandao. Y que reconozca la pasada semana que veteranos en la parte final de su carrera como Kaká o Ronaldinho siguen teniendo opciones, quizá responda precisamente a que si bien sus piernas ya no son las de antes, sí crea que sus cabezas están ampliamente preparadas para soportar un Mundial en casa.

Se destaca del entrenador ‘gaúcho’ su gran capacidad motivadora y de liderazgo, y Fred, actual delantero de la ‘canarinha’, afirmó de él que es quien “nos ayuda a manejar la sensación de que la gente va a morir si no ganamos”. Esas premisas son las que transmitió a todos sus futbolistas mediante cartas personalizadas pasadas por debajo de la puerta de las habitaciones en la víspera de la final de la Copa Confederaciones donde se ‘comieron’ a España desde los himnos hasta el pitido final.

Como entonces, a cada uno le motivará según su carácter, pero todos ellos son conscientes de lo mismo: la dificultad emocional que conllevará ponerse la camiseta amarilla el próximo verano para representar a un país enloquecido por el fútbol. Scolari sólo se ve capaz de liderar el intento de tal hazaña con ayuda de profesionales. Superar el Maracanazo, tras el que la leyenda dice que hubo incluso suicidios de aficionados, son palabras mayores en Brasil.