El Bayern de Guardiola ilusiona: cuelga el cartel de 'no hay billetes' para la temporada 2013-2014

Continúa a ritmo de récord. El Bayern de Múnich está de moda, y eso se nota. El histórico triplete que el equipo de Jupp Heynckes ha conquistado esta temporada no ha pasado desapercibido para los aficionados, que ya han hecho sus 'encargos' para poder ver en directo el próximo proyecto de Pep Guardiola al frente del 'todocampeón' de Alemania y de Europa. Así, a dos meses para que comience la nueva temporada, el club bávaro ha anunciado que ya tiene vendidas prácticamente todas las localidades del Allianz Arena para la próxima edición de la Bundesliga. De los 17 partidos que el Bayern disputará en casa, en 16 ya no hay ni una sola localidad a la venta. Tan sólo para el duelo ante el Hoffenheim cabe la opción de obtener alguna entrada.

No cabe duda que el momento deportivo por el que atraviesa el cuadro muniqués tiene mucho que ver en esta demanda desorbitada (el club habla de entre "80.000 y 140.000 peticiones de entradas para cada partido"), pero también lo es la política de precios que se estila en la Bundesliga y que poco o nada tiene que ver con la de nuestro país. Ver un encuentro del actual campeón continental puede suponer un desembolso a partir de 15 euros, cantidad al alcance de cualquier ciudadano.

Si bien es cierto que Guardiola tendrá el listón muy alto en lo competitivo, lo que no le faltará es el calor de la grada. Al menos en lo que se refiere al campeonato de liga (a buen seguro que también sucederá en Copa y Champions), las 71.000 butacas del majestuoso Allianz Arena serán ocupadas por unos hinchas que viven uno de los mejores momentos en la trayectoria del club. Tras la primera vez en la historia que se hacen con la triple corona, ahora depositan toda la confianza en el libreto del entrenador que hizo del Barça el mejor equipo del mundo. Mimbres no le faltan, y por las cifras que se han hecho oficiales, apoyo popular tampoco.

Muchos pueden pensar que buena parte del aforo del Allianz está ocupado por sus abonados, que pocas entradas quedan a la venta y que por eso se han agotado tan rápido. Nada de eso. De los 71.000 espectadores a los que hacíamos referencia, tan sólo 39.000 son abonados, lo que quiere decir que un 45% de la capacidad del estadio se pone a la venta para que los hinchas puedan ver a su equipo cada encuentro. Y esos 32.000 asientos ya han sido reservados para todos los partidos de la próxima Bundesliga (a excepción del mencionado Hoffenheim).

España empieza a tomar ejemplo

Teniendo en cuenta la situación de nuestro país y la pérdida de poder adquisitivo por parte de los ciudadanos, mantener la política de precios e incrementos de temporadas precedentes no parece el mejor método para atraer a los aficionados a los estadios, resulta prácticamente inviable. El fútbol se ha convertido en un bien de lujo, y eso ha afectado a la asistencia en los campos de la Primera División, que se ha visto reducida en un 5% con respecto a la temporada pasada. Mientras en otras competiciones nacionales en Europa la ocupación ronda el 100% (Inglaterra o Alemania), en España se mueve en torno al 75%.

Por detalles como éste, algunos clubes españoles ya están tomando cartas en el asunto. Así, el Atlético de Madrid por ejemplo ha decidido bajar algunos de sus abonos para la próxima temporada en un 14%. Otros como el Real Madrid y el Málaga han decido mantener los precios. Éste puede ser el comienzo de una normalización en un fútbol que nos está llevando a cotas desorbitadas y que obliga a la gente a realizar un esfuerzo casi sobrehumano o, lo que es más triste, dejar de disfrutar de su hobby preferido. Los clubes deben mostrarse ciertamente solidarios con ellos, que son precisamente los que sustentan lo que antes era sólo un deporte y ahora se mezcla con el 'business'.