La preocupación crece entre los dirigentes del Real Madrid tras la derrota en Alemania

Preocupación en la zona noble del Santiago Bernabéu. Florentino Pérez y el resto de directivos blancos esperaban más del partido en Alemania, algo parecido a lo que sucedió en el Camp Nou. La inquietud no llega de manera directa por la derrota en sí ante el Borussia Dortmund y sí porque el equipo dirigido por José Mourinho siga tropezando año tras año en la misma piedra una y otra vez. En la memoria todavía está fresca la eliminación de la pasada Champions ante el Bayern y los fantasmas vuelven a aparecer.

Son ya diez los años en los que el Real Madrid se le escapa un triunfo europeo importante lejos de su estadio ante uno de los considerados grandes. Su última victoria lejos del Bernabéu en un partido trascendente hay que buscarla en la final de Glasgow, ante el Bayer Leverkusen. Desde ese momento, el poder blanco en la que todo el mundo considera como su competición, ha desaparecido. Cierto es que José Mourinho ha sido capaz de llevar al equipo a dos semifinales, pero el equipo es otro, se vuelve vulnerable, tal y como quedó demostrado en el Westfalenstadion de Dortmund.

Borussia, Bayern (dos ocasiones), Barcelona, Juventus (dos ocasiones), Liverpool, Lyon o Roma han sido equipos que se han mostrado superiores a los madridistas en los últimos años. El último triunfo ante uno de los grandes hay que encontrarlo en diciembre de 2004 en el Olímpico de Roma. Contundente victoria por cero goles a tres, pero en fase de grupos. Esa misma temporada fue otro equipo italiano, la Juve en este caso, el que dejó al Real Madrid fuera de la competición en los octavos de final. La derrota ante el campeón alemán ha llevado a muchos a recordar fantasmas del pasado reciente en la historia del club blanco.

Las lesiones han lastrado al equipo de Mourinho en su visita a Dortmund, pero la derrota deja entrever algo más. La insistencia y la reiteración en la renuncia a la cantera no ha gustado entre los dirigentes blancos. Pocos entendieron que Essien fuera el elegido para tener que enfrentarse a Reus, uno de los principales peligros alemanes, cuando es un jugador que físicamente no está a tope como para rendir en dos partidos consecutivos y más fuera de sitio. 

Además, se mantiene la creencia de que al equipo le falta algo arriba, que para ganar al Celta y a otros muchos rivales de la Liga hay potencial más que sobrado, pero que la sensación no es la misma cuando se pasa la frontera. Una vez más, cuando llegan los partidos importantes todo el acierto realizador recae sobre Cristiano Ronaldo, autor de siete de los últimos diez goles logrados por el equipo blanco. Benzema parece haber renunciado a mirar a puerta e Higuaín no salió de la sequía que siempre le acompaña en Champions. Sus 7 goles en 39 partidos en la Champions lo dice todo.