"En Ferrari, Fernando Alonso es el tipo de persona a la que la gente quiere apoyar"

Pese a llevar sólo un par de meses como piloto oficial, a Jules Bianchi (3 de agosto de 1989, Niza) se le ve cómodo en la vorágine de la Fórmula 1, tanto en la pista como fuera de ella, donde escasean los minutos para uno mismo entre actos de promoción y la atención a la prensa. Pilotando un Marussia, el francés está siendo uno de los más destacados del año y en la actualidad vive uno de los momentos más dulces de su carrera deportiva y eso que hace tres meses parecía encallar.

Repasemos su historia. Tras su triunfo en la Fórmula 3 Euroseries en 2009, fue captado por la Scuderia como líder de la Ferrari Driver Academy, cantera del equipo italiano. Dos temporadas sin grandes éxitos en GP2 dieron paso a un proyecto muy optimista el pasado año: gran favorito en las World Series y tercer piloto de Force India... al final nada salió como se esperaba. Bianchi perdió el título en la última carrera cuando fue echado de la pista por Robert Frinjs, debutante que se llevó la victoria final. Para colmo, se le escurrió el puesto en Force India en un mano a mano invernal con Adrian Sutil. Cuando todo parecía perdido, su manager, Nicolas Todt, logró un acuerdo de última hora con Marussia. Contra todo pronóstico, Bianchi ha conseguido llevar al monoplaza británico donde nadie esperaba, revalorizando su posición a un nivel inesperado pocos meses atrás. En Malasia, por ejemplo, terminó decimotercero, por delante de los dos Caterham, al igual que en China, donde fue decimoquinto. El Confidencial ha charlado con el francés sobre el presente, su futuro, y su experiencia con Ferrari.

Pierde el título porque le echan de la pista en las World Series, no consigue el volante en Force India tras ser tercer piloto en 2012 y, de repente, su caché sube en un par de meses con sus resultados en Marussia, ¿cómo lo lleva?

Han sido varios meses de subidas y bajadas para mí. El año pasado no pudimos ganar el campeonato, quedamos fuera y todo el mundo pudo ver en televisión qué pasó y cómo fue, así que no vale la pena hablar de ello. El invierno fue muy difícil para mí porque esperaba una respuesta de Force India... y cuando llegó no fue ni la mejor, ni la que esperaba. Sin embargo, salió el tema de Marussia y gracias a ellos estoy aquí. Pero no han sido tiempos fáciles.

¿Qué ha aprendido de todo este proceso y en la Fórmula 1 hasta ahora?

Pues que tienes que ser perfecto. Para ser piloto has de trabajar muchísimo, no es un mundo fácil en el que estar, hay que ser muy cuidadoso con lo que haces. Pero hasta ahora estoy contento por cómo van las cosas.

Nadie esperaba mucho de usted al debutar con un Marussia. ¿Cómo explica el éxito que está teniendo?

El equipo ha hecho un gran trabajo con el coche, no es tan malo como la gente puede pensar. Ahora es muy bueno. Si tuviéramos un poco más de apoyo aerodinámico podríamos alcanzar la mitad de parrilla. El coche además favorece mi estilo de pilotaje -esto es importante-, y por ello puedo atacar y buscar el límite. Tenemos que seguir en esta línea. Ha sido un comienzo muy positivo, pero queda todavía mucho que mejorar si queremos llegar hasta esa mitad  de parrilla, tenemos que recortar más de un segundo y medio, que todavía es mucho, y ver qué podemos hacer al final de año.

Marussia no está en una posición económica desahogada, necesita resultados que se traducen en recursos económicos, entrar entre los diez primeros a final de año. ¿Siente el piloto este tipo de presión?

En el pasado ha sido tercer piloto, sin competir el domingo, ¿es similar la dinámica de una carrera de Fórmula 1 a lo que esperaba?

Sí, es similar a lo que hice en GP2, Fórmula 3 o World Series, son carreras, aunque un poco más largas.

Red Bull tiene alrededor toda esta mítica sobre la gran presión y exigencia con la que somete a sus jóvenes pilotos del Junior Team. ¿Es igual en la Ferrari Driver Academy, o es más relajada su vida en este sentido?

No tengo ni idea de cómo puede ser en Red Bull, no puedo comparar porque nunca he trabajado con ellos, pero lo que sí puedo decirte es que en la Ferrari Driver Academy quieren que logres grandes resultados y lo hagas bien, desde luego, pero no te someten a una presión extra, es muy bueno trabajar para ellos, en el día a día intentan reforzarte, notas que quieren que triunfes, y esto es importante para tu confianza

¿Algún piloto le ha llamado la atención por lo que ha visto en la pista?

El que me gusta, y con el que me gustaría correr algún día en Ferrari es con Fernando Alonso, es muy rápido, es alguien que me ha impresionado... es impresionante.

Si, por ejemplo Massa no siguiera el año que viene, ¿siente que este año, 2013, tiene una gran oportunidad para que se valore su posición y dar el salto  si sigue manteniendo el nivel que ha mostrado hasta ahora? ¿Se lo toma así?

No lo sé, no tengo ni idea, en este mundo nunca sabes por dónde salen las cosas, yo no soy quien decido. Simplemente intento hacer lo mejor posible y si deciden llamarme no diré que no, por supuesto, pero estoy lejos de ello todavía.

Por lo que vemos en Twitter, parece que tiene vida social con los pilotos de Ferrari. ¿Cómo es Fernando Alonso de cerca?

No estamos constantemente juntos, pero si le veo sí, claro que le saludo. Es muy agradable conmigo, y Felipe también, le conozco muy bien por Nicolas (Todt, su manager, también de Massa), nos vemos mucho y por ello nos llevamos muy bien. A Fernando le conozco bien, tenemos una muy buena relación, pero normalmente está muy ocupado (en Maranello) y tampoco quiero molestarle.

Todo el mundo habla de su liderazgo en Maranello ¿Cómo lo lleva a cabo, en el día a día?

Sí, es cierto, es el tipo de persona a la que la gente quiere apoyar, y esto es muy importante para un equipo como Ferrari.