Rosberg dibuja la sombra más "perfecta" de la Fórmula 1

"Todos los años de Nico Rosberg están siendo perfectos". Niki Lauda reconoció este sábado a El Confidencial que el rubio platino de Mercedes está dando en el centro de la diana cada fin de semana durante los últimos cuatro años. Su último gran tiro lo ha conseguido en este GP de España gracias a su segunda 'pole' de la temporada. Con las flechas plateadas, primero doblegó en pista al heptacampeón del mundo Michael Schumacher y ahora, con Lewis Hamilton como compañero, ha logrado dos 'poles' frente a una del británico... y eso que el inglés tiene el cliché de ser el más veloz a una vuelta de toda la parrilla. "Estoy encantado de estar por delante de Lewis, muy contento porque sé que tiene mucho, mucho nivel en términos de conducción. Es uno de los mejores".

Las comparaciones siempre resultan odiosas pero a Nico Rosberg le han servido para avalar su talento frente al 'número 2' perenne que sus compatriotas le han impreso desde que aterrizó en Brackley. En este 2013 mucho han de girar las tornas para que cambie la situación puesto que por circunstancias ajenas a Nico, su compañero ya le distancia en 36 puntos. En Barcelona se verá si esta distancia aumenta por alguna decisión tomada desde el box en beneficio del equipo.

"Disponemos de dos grandes pilotos. Rosberg tiene la velocidad y el talento, pero no ha ganado ninguna carrera y debe superar ese obstáculo primero, aunque no hay razón para que no pueda pelear por el título". Ross Brawn era conciliador en 2010, cuando vendió su escudería Brawn GP a Mercedes y dibujó su pareja de pilotos para aquella temporada con Nico y Schumi. El respeto de Rosberg sobre el 'Kaiser' debía ganárselo en la pista. Y lo hizo durante tres temporadas consecutivas quedando siempre por delante de su compañero en la clasificación final. Sin embargo, no le ha servido para que este 2013 pudiese "pelear por el título" en igualdad de condiciones que su compañero.
 

'Tricampeón' frente a Schumacher

En 2010, Nico prácticamente dobló en puntos al heptacampeón (172 por 72) y se consideró algo relativamente normal ya que Schumacher venía de un importante periodo de inactividad. En 2011, calificó una media de 366 milésimas por delante de su compañero, le batió durante 15 sábados perdiendo sólo 2 y, al final del campeonato sumó 13 puntos más. El año pasado, además de lograr la única victoria de Mercedes desde su regreso, logró 93 puntos frente a los 49 del 'Kaiser'.

En esos años, Rosberg ha visto como determinadas acciones le han perjudicado en beneficio de su compañero. En Spa, durante la campaña de 2011, tuvo que escuchar: “Conserva gasolina, no fuerces”. Y Schumacher, que venía inmediatamente por detrás de él, le adelantó. También ese año en la India sufrió un mal repostaje que permitió al heptacampeón adelantarle poco después.

En la presente temporada ya ha vivido una situación similar a la de Bélgica 2011 cuando se le 'privó' de subir al podio de Malasia. En Malasia Ross Brawn le pidió que no adelantara a Lewis Hamilton cuando era más rápido que él. Para su consuelo quedan las palabras del inglés, reconociendo que era Nico el que debía haber concluido en
tercera posición.

Desde muy pronto supo que debía ir por detrás de Lewis 

Ese movimiento en la segunda carrera del año le colgó, nuevamente, el cartel de 'número 2'. Muy pronto supo que debía luchar por cuarto año consecutivo contra esta circunstancia. De momento, lleva mejores sábados que su compañero pero el domingo, cuando se reparten los puntos, los números dan ventaja a Hamilton con dos podios y dos quintos puestos. Hay que destacar que Rosberg ha sumado 36 puntos menos porque ha sufrido dos fallos técnicos en su monoplaza que le han supuesto irse de vacío en Australia y China.

Pese a este muro que intentará volver a derribar en 2014, nadie se imagina a un Mercedes sin Nico Rosberg. El hijo de Keke ha manifestado como pocos el sentido que da un piloto a la labor de equipo, guardando el ego y mirando por el interés de la estrella plateada. Hacer la guerra por su lado no es su estilo. Esta actitud calmada y reposada le ha servido para que nadie dude de él y para que continúe sentado en una escudería con un gran presupuesto, capaz de optar cada año al título. Es el trabajador ideal, el compañero "perfecto" del que tan orgulloso se sintió este sábado Niki Lauda, accionista de Mercedes.