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El prostíbulo que parió el teatro off madrileño
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El prostíbulo que parió el teatro off madrileño

Microteatro por Dinero cumple cinco años y lo celebra programando 52 de las obras que han pasado por sus salas. Entre ellas, cinco de las 13 que se vieron en ese burdel que fue la génesis del proyecto

Foto: 'Ahí dentro' en Microteatro por Dinero
'Ahí dentro' en Microteatro por Dinero

Noviembre de 2009. Un antiguo prostíbulo de la madrileña calle de Ballesta cambia látex y mamadas por teatro. Sus 10 habitaciones, los dos baños y la cocina acogen el proyecto 'Por Dinero': 13 obras de teatro de unos 10 minutos de duración que hablan de la prostitución. Enmarcado dentro de las primeras actuaciones para recuperar Triball de las asociaciones de comerciantes y vecinos, la idea de hacer microteatro de Miguel Alcantud fue un éxito. Colas de más de 200 personas y obras que llegaron a verse hasta a 20 veces al día.

21 de octubre de 2010. Del burdel a una vieja carnicería de la calle de Loreto y Chicote. Nace Microteatro por Dinero (de ahí la coletilla) con un concepto claro: 15 metros cuadrados, 15 espectadores y 15 minutos de duración para las obras de teatro. El primer mes sólo pasaban por allí familiares y amigos pero en diciembre el público empieza a responder y, aunque ya existían algunas salas alternativas de teatro en la capital, eclosiona la escena off madrileña.

En estos cinco años por sus cinco salas han pasado 915 obras, 772 actores, 433 autores y 342 directores. De sus paredes y su talento han salido 15 obras de teatro de duración convencional, un largometraje e infinidad de cortos y por allí han pasado montajes escritos, protagonizados o dirigidos por David Trueba, Elvira Lindo, Tristán Ulloa, Secun de la Rosa, Daniel Sánchez-Arévalo, Álvaro Tato, Eva Isanta, Mariam Hernández o Nancho Novo. Pero, sobre todo, Microteatro por Dinero se ha convertido en un punto de encuentro para la profesión en tiempos de crisis y la demostración de que las pequeñas salas de teatro tenían un público y funcionaban.

"Hemos sobrevivido cinco años. Era un milagro", cuenta Alcantud, director y creador del proyecto junto a otros 21 socios que se dieron cuenta de que no se podía quedar en los diez días que estuvieron en Ballesta. Para celebrarlo este mes tendrá una programación especial. Como aperitivo esta semana se vuelven a representar cinco de aquellas 13 obras que fueron la génesis de Microteatro por Dinero. Y durante octubre, en total, se verán 52 obras (en sesión de tarde, golfa y matinal familiar) de las que ya han pasado este lustro por sus salas.

"No fue un formato de crisis, después lo fue por el precio [4 euros por obra] y la versatilidad, pero realmente fue un formato de autoempleo de gente que teníamos muchas ganas de contar historias", explica. "Empezamos por necesidad creativa. No fue una respuesta a la crisis económica sino a una crisis artística", cuenta la actriz Verónica Larios, también impulsora del proyecto.

"Creamos un nuevo género"

"Nos juntamos un grupo de amigos que queríamos tener un lugar para expresarnos. No nació con una idea de negocio sino como un lugar de encuentro", rememora la actriz y socia Ana Risueño, al igual que cómo fueron a pedir el sofá y los focos que iban a tirar en los antiguos cines Luna o cómo iba recolectando espectadores por Malasaña. Otro recuerdo: al principio ellos mismos escribían los textos, ahora reciben 150 propuestas al mes (la programación se renueva mensualmente).

'La hipoteca', con Lola BaldrichJunto al semillero creativo que inició Microteatro por Dinero, Lola Baldrich destaca que "creamos un nuevo género" y "un refuerzo a la vida teatral de esta ciudad". "No era nuestra pretensión, pero el término microteatro o hacer un 'micro' se expandió e hizo común, y es un orgullo", destaca. Igualmente "a partir del 'micro' la escena empieza a llamarse el off. Ese concepto se creó aquí".

Larios insiste en la misma idea: "Esto hacía falta". "Creo que dimos el pistoletazo de salida para demostrar que había un público y que podíamos hacerlo nosotros solos". Tanto es así que este proyecto que nació capturando la esencia del teatro en un burdel y se mudó a una carnicería ahora tiene réplicas por 13 ciudades como Barcelona, Valencia o Málaga, además de en Estados Unidos, Costa Rica, Perú y México.

Baldrich también destaca lo especial de la experiencia del microteatro para el actor y el público. "Sentimos el mismo pudor que el espectador", cuenta sobre esa intimidad que se genera en estos micromontajes. "Aquí me atrevo a hacer cualquier cosa porque la que decide lo que hago soy yo. Estoy más expuesta al público pero más protegida, es mi sitio. De hecho, si me tengo que desnudar sólo lo hago aquí porque es mi apuesta, mi orgullo y donde me siento más libre y más off", garantiza.

Noviembre de 2009. Un antiguo prostíbulo de la madrileña calle de Ballesta cambia látex y mamadas por teatro. Sus 10 habitaciones, los dos baños y la cocina acogen el proyecto 'Por Dinero': 13 obras de teatro de unos 10 minutos de duración que hablan de la prostitución. Enmarcado dentro de las primeras actuaciones para recuperar Triball de las asociaciones de comerciantes y vecinos, la idea de hacer microteatro de Miguel Alcantud fue un éxito. Colas de más de 200 personas y obras que llegaron a verse hasta a 20 veces al día.

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