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El cambio de bando de 'Petisa' Luca de Tena deja en el aire el futuro del 'ABC'
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ya se planteó en su dia segregarlo de vocento

El cambio de bando de 'Petisa' Luca de Tena deja en el aire el futuro del 'ABC'

La tormenta entre las familias históricas de Vocento amenaza con tener importantes impactos colaterales a medio plazo en la casa. Con el 'ABC' en el foco

Foto: Soledad Luca de Tena, segunda fila a la derecha. (EFE)
Soledad Luca de Tena, segunda fila a la derecha. (EFE)

La tormenta entre las familias históricas de Vocento amenaza con tener importantes impactos colaterales en la casa a medio plazo. Y es que el vuelco en el Consejo de Administración provocado por el cambio del voto de Valjarafe, la sociedad que canaliza la participación en la sociedad de las Luca de Tena, vuelve a poner sobre la mesa el futuro del ABC, el rotativo fundado por su bisabuelo. Hasta ahora, la adhesión de las hermanas a la saga Ybarra había garantizado la plácida permanencia de la cabecera dentro del grupo. Sus nuevos amigos, sin embargo, podrían tener ideas diferentes y abrir un melón de consecuencias difíciles de anticipar.

Como publicó ayer El Confidencial, el todavía presidente, Enrique Ybarra, anunciará su salida de la compañía en la junta del próximo día 30. Lo hará después de que el consejo ya haya dictado sentencia. Los cinco votos a favor de su continuidad –los de Santiago Ybarra, Álvaro de Ybarra, Gonzalo Soto, Miguel Antoñanzas y el suyo propio– empataban con los de Juan Ramón Urrutia, Santiago Bergareche, Jaime Castellanos, Fernando Azaola Arteche y Rodrigo Echenique. La bisagra, Soledad ‘Petisa’ Luca de Tena, dejaba a los Ybarra en favor del denominado bloque rebelde y le entregaba la presidencia. El consejero delegado, Luis Enríquez, no podía sino abstenerse.

Según explican fuentes internas de la compañía, la decisión de Petisa llama la atención teniendo en cuenta que une sus fuerzas con los Bergareche o Urrutia, que no han dudado en apostar en el pasado por volver a los orígenes y segregar el ABC de Vocento. Claro que un plan de ese calado no sería la peor opción para las descendientes del fundador, después de que el bloque opositor ya promoviese hace apenas dos años una integración con El Mundo, lo que pondría directamente en peligro la subsistencia de la cabecera. El propio Enrique Ybarra ya se reunió hace meses, con esta posibilidad sobre la mesa, con Borja Prado, presidente para España de Mediobanca, a la sazón accionista de RCS Mediagroup, el dueño de Unidad Editorial. Por ahora, esa salida no se contempla.

El presidente de Vocento, Enrique Ybarra.Descartado el planteamiento, no sería la primera vez que el frente Bergareche-Urrutia-Castellanos trata de deslumbrar a las Luca de Tena con el caramelo de entregarles en bandeja la cabecera, a fin de cuentas la niña de sus ojos. Claro que estas fuentes explican que la opción es inviable por la deuda que acumula el diario –una parte sustancial del agujero de Vocento–, que sería inasumible para ellas en el citado escenario. También dejan claro que no ha habido en este caso ningún pacto entre bambalinas en esa dirección. “Sí se habló en la anterior crisis, pero no hay ningún pacto de secesión esta vez”, aseguran sin ambages.

Fríamente, con motivos personales

Entonces y sin hoja de ruta a la vista, ¿por qué han movido ficha las hermanas? Fuentes de la casa insisten en que es imposible explicar los movimientos en el grupo sin entender los delicados hilos que mueven las relaciones personales entre los actores. Para empezar, no dudan en apuntar a la difícil relación de todo el consejo con una personalidad tan peculiar como la de Enrique Ybarra. Petisa no es una excepción. Por otra parte, esta siempre puede escudarse en que sigue conservando la capacidad de decidir en un cónclave dividido y cambiar de nuevo el tercio. Con la opción de una junta de accionistas en la recámara. Eso sí, siempre y cuando los Ybarra no se apunten esta última traición en su lista de vendettas pendientes.

De hecho y según confirman diversas fuentes de la casa, tampoco nada de lo sucedido en los últimos días se explicaría sin la propia división que recorre la familia Ybarra, que suma en conjunto más del 30% de la compañía pero sufre su particular via crucis, inmersa en un auténtico marasmo judicial. Sólo así se entiende que el tsunami se produzca en un momento en que los opositores se encuentran también bajo mínimos, después de que la propia familia Bergareche liquidara a principios de año la sociedad a través de la cual canaliza su participación en Vocento, lo que le obliga a afrontar el proceso sin la anterior sindicación. En suma, una compañía incapaz de armar un proyecto común.

A ese tren se subirá Rodrigo Echenique, próximo presidente del grupo. Ejecutivo de primera, arranca su mandato con dos estigmas. El primero, su filiación con el Santander, una relación tal vez demasiado peligrosa para liderar un medio de comunicación. La segunda, la falta de consenso para llegar al cargo. Lo hace por la mínima y con el consejo a jirones. Todo un reto. Por el camino, necesita forjar una buena relación con el actual consejero delegado, Luis Enríquez, que hasta ahora no ha tenido contrapeso alguno en su gestión. Echenique, acostumbrado a mandar, podría no ser un compañero de viaje fácil. O sí. Si el ticket funciona, ganará la compañía. Hora es.

La tormenta entre las familias históricas de Vocento amenaza con tener importantes impactos colaterales en la casa a medio plazo. Y es que el vuelco en el Consejo de Administración provocado por el cambio del voto de Valjarafe, la sociedad que canaliza la participación en la sociedad de las Luca de Tena, vuelve a poner sobre la mesa el futuro del ABC, el rotativo fundado por su bisabuelo. Hasta ahora, la adhesión de las hermanas a la saga Ybarra había garantizado la plácida permanencia de la cabecera dentro del grupo. Sus nuevos amigos, sin embargo, podrían tener ideas diferentes y abrir un melón de consecuencias difíciles de anticipar.

RTVE Convenio colectivo Leopoldo González-Echenique CNMC Cristóbal Montoro
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