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El rey del ligoteo científico tiene un nuevo método para conseguir pareja. Y funciona
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AUGE Y CAÍDA DE NEIL STRAUSS

El rey del ligoteo científico tiene un nuevo método para conseguir pareja. Y funciona

En su nuevo libro, el autor superventas explica su descenso a los infiernos de la adicción sexual y explica cómo pudo volver a relacionarse de manera normal con las mujeres

Foto: Neil Strauss ha despachado millones de copias de su popular libro 'El método'. (Corbis/Brant Ward/San Francisco Chronicle)
Neil Strauss ha despachado millones de copias de su popular libro 'El método'. (Corbis/Brant Ward/San Francisco Chronicle)

En 2005 se publicó 'El método', el popular libro de Neil Strauss que en teoría enseñaba el método infalible para ligar gracias a las enseñanzas de los maestros de la seducción y que dio el pistoletazo a una larga lista de imitadores que se han englobado en la polémica categoría del “ligoteo científico”. Una década más tarde, lo que en su día pudo verse como una simpática y tontorrona guía para hacer el ridículo, ha terminado convirtiéndose en objeto de una gran controversia, principalmente por los métodos utilizados.

Entre ellos se encontraba, por ejemplo, el 'nagging' (“agobio”), que se basa en ver al hombre como un depredador y a la mujer una víctima, por lo que está permitido acercarse mucho e incluso tocar al objeto del deseo masculino, así como faltarle al respeto. Un principio que lindaba con el acoso, como ocurrió con el caso de Julien Blanc, uno de esos 'pickup artists' (maestros del ligoteo) al que se le negó el acceso a Gran Bretaña por sus métodos, entre los que se encontraba agarrar por el cuello a sus víctimas. No hace falta encontrar ejemplos tan extremos para darse cuenta de que la moda había llegado demasiado lejos.

Esta misma semana se ha publicado en EEUU 'The Truth: an Uncomfortable Book About Relationships' (Dey Street Books), es decir, “La verdad: un libro incómodo sobre las relaciones”, que más que un complemento de 'El método', es una revisión de su vida pasada. “Este libro contiene una de las palabras más terroríficas y obscenas del inglés: compromiso”, escribe en la presentación del libro el hombre que despachó millones de copias de sus anteriores obras. “En concreto, la clase de compromiso que a menudo precede o sigue al amor y el sexo”. En resumidas cuentas, 'The Truth' es un libro de autoayuda sobre el descenso a los infiernos de Strauss en lo que califica como “una crisis vital que se impuso por las consecuencias de mi comportamiento”.

El ligón infiel y adicto al sexo

“Mi persecución del sexo no acabó con mi vida, sino que se convirtió en mi carrera”, escribe Strauss en el libro. “Cuán frustrante fue, entonces, verme en rehabilitación cinco años más tarde, intentando desaprender todo aquello en lo que había gastado tanto tiempo y energía aprendiendo”. Neil estaba tan obsesionado por el sexo (los tríos, las comunas sexuales y los harenes eran destinos habituales) que terminó engañando a su novia Ingrid con una de sus mejores amigas, algo que lo obligó a buscar ayuda profesional. “Conocí a una gran mujer, y estábamos en una relación fantástica. Y la engañé. Me pilló. Me sentí fatal. De verdad pensaba que era un buen tío, ¿sabes? Y entonces me di cuenta: ¿cómo puedo hacer daño a la persona que me ama y ser tan egoísta?”, ha explicado en una entrevista con 'The Atlantic'.

Estaba enamorado, pero cuando las cosas se ponían serias me sentía superado y les echaba la culpa por hacerme sentir atrapado. Entonces las engañaba

La solución se encontraba en la terapia de desintoxicación sexual a la que recurrió, y que resultó muy dura. Todas las respuestas que buscaba se encontraban en su familia. Concretamente, en la relación con su madre, controladora y narcisista, como le explicó la terapeuta que lo trató. Hoy en día, Strauss está seguro de que todos los fans de 'El método' tienen muchas cosas en común con su pasado. Como explicó durante la presentación del libro en un bar de Brooklyn, recogida por 'The New Republic', “pensé que debía estar contando alguna clase de verdad. Lo que descubrí es que quizá simplemente estaba hablándole a la gente con mi mismo trauma. ¿Sabéis qué, tíos? ¡Estamos todos jodidos!” Jodidos significa, concretamente, tener un miedo irracional a las relaciones convencionales con mujeres por haber mantenido una relación traumática con sus madres.

A pesar de la terapia, Strauss siguió teniendo problemas con su pareja. Semanas después de acabar con el tratamiento, volvió a sentir ganas de acostarse con otra. “Es el patrón de todas mis relaciones”, ha señalado a 'The Daily Beast'. “Estaba realmente enamorado y tan pronto como las cosas se ponían serias me sentía superado y les echaba la culpa por hacerme sentir atrapado. Así que me empezaba a distanciar y ellas se acercaban aún más, entonces las culpaba y empezaba a ver a otras personas antes de acabar con la relación”. Una vez más, estaba buscando la libertad que no tuvo en su infancia, Tras su fracaso, decidió que la monogamia no era para él, y una visita a un psiquiatra le confirmó lo que sospechaba: que “había dedicado tanta energía intelectual y emocional a seducir mujeres que aún estaba programado para ser un depredador”.

'El método', una década después

Si complicado resulta para Strauss hacer frente a su comportamiento hacia las mujeres, aún más lo es conciliar esta nueva vertiente de psicoanálisis sexual con su antiguo rol como ligón imparable. Por ello ha explicado en la presentación del libro que “'El método' se trataba de reforzar tu autoestima desde el exterior, a partir de la aprobación de los demás. Y 'La verdad', para mí, se trata de obtener la autoestima de donde debería salir, del interior”. En la misma intervención, admite que la mayor parte de sus tácticas “no engañan a nadie” hoy en día.

Entre los nuevos compromisos de Strauss se encuentra reformar de arriba abajo la Stylelife Academy, que fundó en 2006 y en la que por 2.000 dólares aprendes a ligar con mujeres estupendas. Ahora que ha conseguido recuperar el control de la misma, planea cambiar los métodos: “Es bueno tener confianza en ti mismo y en tus habilidades para interactuar socialmente, pero la manipulación no tiene por qué ser parte de eso”. El autor se muestra genuinamente arrepentido de haber defendido esa clase de estrategias: “Si me preguntas hoy en día, te diré que cualquier cosa que implique manipulación o que te obligue a obtener resultados como sea no es definitivamente nada sano”.

Una de las técnicas más polémicas es el 'nagging', que implica humillar a la mujer para hacerla bajar la guardia. Por eso, Strauss divide los artistas del ligoteo entre los buenos (“los empollones vergonzosos”) y los malos (“los que vemos en las noticias, que son misóginos, llenos de odio, realmente dañados”). Un ejemplo de ello es, precisamente, Blanc: “Es lo malo del mundo en el que vivimos”, explica el periodista. “Antes de internet esa gente era filtrada, y hora todas las opiniones tienen una plataforma”, explica, aunque prefiere no hablar de él para no darle más relevancia.

En 'El método' os daba lo que queríais escuchar. Aquí podréis descubrir que lo que queréis no siempre os lleva donde necesitáis ir

La historia, no obstante, tiene un final feliz: Strauss, que ahora tiene 46 años, consiguió reconciliarse con Ingrid, con la que se casó en 2013 y ahora tienen un hijo llamado Tenn. Durante la ceremonia de boda, Style, el personaje que Strauss inventó para sí mismo, fue simbólicamente enterrado para siempre. “En 'El método' os daba lo que queríais escuchar. Aquí podréis descubrir que lo que queréis no siempre os lleva donde necesitáis ir”, le dijo a la audiencia neoyorquina que acudió a la presentación del libro. Ese es el nuevo método de Strauss: conocer a una chica que te guste, confiar en ella, tratarla bien, ser feliz.

En 2005 se publicó 'El método', el popular libro de Neil Strauss que en teoría enseñaba el método infalible para ligar gracias a las enseñanzas de los maestros de la seducción y que dio el pistoletazo a una larga lista de imitadores que se han englobado en la polémica categoría del “ligoteo científico”. Una década más tarde, lo que en su día pudo verse como una simpática y tontorrona guía para hacer el ridículo, ha terminado convirtiéndose en objeto de una gran controversia, principalmente por los métodos utilizados.

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