Depura tu cuerpo tras el verano sin pasar hambre: las tres mejores ensaladas

Tras las vacaciones estivales, son muchas las personas que se deciden a comenzar duras dietas, renunciando a disfrutar de muchos alimentos. Habitualmente, y a pesar de la denominada operación bikini, la mayoría de las personas volvemos de las vacaciones con algún kilo de más. Esto está causado por motivos más queevidentes, como la falta de una rutina, tanto de ejercicio como de alimentación, la tendencia acomer fuera de casa y a picar entre horas y el aumento del consumo de refrescos y bebidas alcohólicas en general.

El resultado es que, al final del verano, además de sentirnos relajados, nos encontramos hinchados y pesados, lo que lleva a muchas personas a recurrir a dietas milagro, a interminables horas de gimnasio y a dejar de lado los alimentos más calóricos, descuidando la variedad saludable que caracteriza a la dieta mediterránea. La principal medida que debemos tomar a la vuelta de las vacaciones es regresar al hábito de desayunar, comer y cenar a las horas adecuadas, es decir, volver a nuestra rutina alimenticia.

Renunciar a la comida no es sinónimo de cuidar nuestra línea, ya que una buena alimentación es la base para tener energía y retomar nuestra vida normal. Las dietas extremas nos llevana renunciar a un menú apetecible y nos privan de los grandes beneficios de una alimentación variada y equilibrada. Para demostrarnos que esto es innecesario, Fernando Blázquez, chef del restaurante Pombo 18, nos propone tres ensaladas con las que cuidarnos tras las vacaciones estivales:

“El tomate, además de ser un alimento bajo en calorías, contiene también antioxidantes y betacarotenos que nos ayudarán a cuidar nuestra piel y a prolongar el bronceado”, explica el chef. Además, interviene en la retención de los líquidos, lo que ayudará a que nos quitemos la sensación de hinchazón, al igual que las vitaminas A y C, que ayudan a desintoxicar el organismo. Por su parte, el atún es uno de los alimentos más altos en proteínas y bajos en grasas.

La gran cantidad de yodo que contienen las vieiras ayuda a cuidarnos por dentro, regulando nuestro nivel de energía y nuestro colesterol, que debemos controlar después de todos los excesos del verano. Por otro lado, Blázquez destaca que “los boletus son muy bajos en grasas y están compuestos en su mayoría por agua, lo que los hace perfectos para una dieta hipocalórica sin renunciar a disfrutar de la comida”.

El bogavante es especialmente rico en proteínas y destaca por su bajo contenido en grasas y en calorías. Por ejemplo, 100 gramos de bogavante aportan sólo 1,10 gramos de grasas y84 kilocalorías. Además, el chef afirma que “los canónigos son digestivos y a la vez depurativos, muy recomendables si nuestro objetivo es limpiar el organismo”.