Jubilado, con ahorros y miedo a un corralito, busca piso donde invertir

Compran pisos al contado, con dinero contante y sonante, a tocateja... Son jubilados o las puertas de la jubilación, que llevan prácticamente toda su vida ahorrando y que temen que con la crisis y un posible rescate del sector financiero, sus ahorros ya no estén seguros ni en el banco.

Todavía son la excepción, no la regla, pero cada vez son más quienes han recurrido el ladrillo en busca de refugio a la espera de que la tormenta escampe. “A muchos pequeños ahorradores les ha entrado el tembleque por la crisis y la situación financiera de los bancos y prefieren invertir en una vivienda que en un depósito”, explica Jesús Duque, vicepresidente de Alfa Inmobiliaria.

"El miedo a un posible corralito ha provocado que muchas personas piensen que es más seguro comprar un piso y pagarlo al contado que tenerlo en banco”, añade Carlos Smerdou, consejero delegado de Foro Consultores, consultora especializada en la venta de pisos de los bancos.

Un 30% de ventas al contado

Por las oficinas de Alfa Inmobiliaria han visto cómo lo que hace un par de años era algo aislado y hace cinco, impensable, cada vez es más frecuente. Duque calcula que en torno a tres de cada diez ventas que se cierran en sus oficinas se realizan con dinero a contado.

Esta liquidez les ha permitido ser libres dentro de un mercado inmobiliario en el que la banca controla las reglas del juego al controlar la financiación. Según explican los expertos, sólo quienes necesitan menos del 50% pueden permitirse comprar en el mercado de los particulares. Para operaciones por encima del 70%-80%, sólo existe la posibilidad de acceder a la vivienda de una entidad financiera.

Precisamente por esto y por el hecho de que las viviendas de los particulares son un 20% más baratas que las que están en manos de la banca, según asegura Duque, estos compradores están siendo bastante activos en este mercado, aunque también muestran interés por la obra nueva de las entidades financieras.

¿De dónde procede el dinero? De una herencia, una jubilación o simplemente, los ahorros de toda una vida. Suficientes en muchos casos para adquirir alguno de los cientos de inmuebles que se anuncian en los portales inmobiliarios o en las propias webs de los bancos y que, a pesar de estar en muy malas condiciones se están convirtiendo en objeto de inversión de estos compradores. Los expertos han visto operaciones desde 30.000 hasta 160.000 euros.

Desde 30.000 a 160.000 euros

"Pisos que nunca deberían haber sido viviendas por su mal estado y que los bancos están vendiendo por menos de 50.000 euros, los particulares los están comprado por 30.000. Son inversores de barrio que conocen la zona, a los vecinos porque también viven allí y que, a pesar de que el piso no se encuentra en las mejores condiciones, no les importa comprarlo por esos precios", explica Duque.

"No tratan de especular ni los compran para irse a vivir a ellos. Muchos los rehabilitan y los alquilan. Hay incluso quien los compra simplemente porque su hijo se ha quedado en el paro y quiere que tenga un techo bajo el que dormir", añade Smerdou quien ha visto cerrar operaciones en efectivo por 160.000 euros. Pero los inmuebles de la banca también dentro de su radar. En el último Salón de la Vivienda celebrado hace quince días en Madrid se produjo un incremento de clientes mayores de 45 años que fueron buscando una vivienda de segunda residencia o una inversión de su jubilación.

Según el estudio sobre el perfil del buscador de vivienda en la Comunidad de Madrid, realizado por Básico Homes -empresa especializada en la venta de activos bancarios-, casi el 80% de los encuestados, mayores de 55 años, aseguró no necesitar financiación. Entre quienes sí la necesitaban, ésta se situaba en todos los casos por debajo del 80%. Tres de cada 10 manejaban un presupuesto entre 150.000 y 200.000 euros, mientras que el 40% manejaba un presupuesto entre 50.000 y 125.000 euros. Un aspecto llamativo: la mitad quería cerrar una compra en menos de tres meses.

Los jóvenes, principales demandantes de vivienda

A pesar de este creciente fenómeno, los jóvenes continúan siendo los principales demandantes de vivienda en España. Si bien la crisis, la falta de ahorros y financiación ha dejado a muchos de ellos fuera del mercado inmobiliario.

Para muestra, un botón. El 60% de los visitantes a esta feria tenía edades comprendidas entre los 25 y 35 años. Buscaban una vivienda para vivir y su presupuesto para un inmueble en Madrid oscilaba entre los 100.000 y los 300.0000 euros. El 90%, según el estudio de Básico Homes, necesitaba financiación, pero lo más sorprendente es que menos del 8% necesitaba financiar el 100% y un 45% necesitaba menos del 45%. La mayoría, además, tenía intención de comprar vivienda en los próximos tres a seis meses.