Itinerario de viaje por San Miguel, la isla más grande de las Azores

Cuando viajas, algo dentro de ti se activa. "Se tiene que viajar para aprender", dijo Mark Twain alguna vez. Son muchas las frases que a lo largo de la historia escritores, historiadores y viajeros han pronunciado sobre lo maravilloso y enriquecedor que es conocer mundo.

A 1.910 kilómetros de España se encuentran las islas Azores, un archipiélago compuesto por nueve islas volcánicas ubicadas en el Océano Atlántico. La de San Miguel, en portugués São Miguel, es la más grande de las nueve, tiene 746,82 kilómetros cuadrados de superficie y su población es de, aproximadamente, 130.000 habitantes.

San Miguel, también conocida como la Isla Verde, es la isla más poblada del archipiélago y también una de las que más turistas acoge cada año. Aprovechar la impresionante naturaleza de la isla es de obligado cumplimiento si volamos hasta allí porque es espectacular. El color verde es sin duda el predominante en San Miguel, pero también el azul, ya que en el centro de la isla, dentro del cráter de un volcán inactivo, se encuentra la Laguna de las Siete Ciudades.

Si estás pensando en viajar al archipiélago y no tienes muchos días para descubrir San Miguel, te recomendamos que sigas el siguiente itinerario para conocer todos los rincones imprescindibles de la isla en 48 horas.

Primer día en la parte este

Aterrizarás cerca de Ponta Delgada, allí se encuentra el aeropuerto y, si te alojas en la ciudad, sal temprano, para aprovechar al máximo el día, en coche hacia Furnas, una freguesia que no te puedes perder. De camino, desde la carretera, podrás ver el islote de Vilafranca do Campo.

En este viaje, llegarás a la Laguna de Furnas, donde están tanto el Parque de Grená como las fumarolas, una mezcla de gases y vapores que emergen por las grietas exteriores de un volcán a temperaturas muy altas.

Tras esta parada, el siguiente destino será el pueblo de Furnas, donde también hay una gran cantidad de fumarolas y el Parque Terra Nostra con baños termales. Además, allí podrías probar su cocido típico cocinado directamente en las fumarolas.

Después de comer, para hacer la digestión con unas vistas impresionantes, te recomendamos subir al mirador del Pico de Hierro.

Ya por la tarde, dirígete a Ribeira Quente, una freguesia portuguesa perteneciente al municipio de Povoação. Asegúrate pasar con el coche (porque es muy importante para poder disfrutar en tan poco tiempo de la isla, visitarla en coche) por un túnel en el que se encuentra la cascada de Ribeira Quente.

Cuando llegues a la freguesia, aprovecha para visitarla y ve a la playa do Fogo a merendar o tomar un café.

El mirador de Ponta da Madrugada es el mejor lugar de la isla para ver el amanecer

Y continúa la ruta, ahora, hacia Nordeste, una ciudad en la parte noreste de la isla, cuya población es de 5.291 habitantes. De camino, haz una parada en el mirador de Ponta da Madrugada, que tiene este nombre porque es considerado el mejor lugar de la isla para contemplar el amanecer.

Por supuesto, visita también la ciudad y el centro del priolo, un ave endémica que solo existe en esa parte de la isla. Por último, vuelve a Ponta Delgada a descansar.

Domingo, parte oeste

En el segundo día descubriendo San Miguel, dirígete hacia el pueblo de Siete Ciudades o, en portugués, Sete Cidades. Y, de camino, haz una parada en el espectacular mirador de Vigia das Baleias das Feteiras.

Lleva ropa cómoda y haz la ruta da Grota do Inferno y visita también el mirador de Vista do Rei antes de bajar al pueblo de Sete Cidades para comer a la orilla del Lago. Tras haber comido y descansado mirando al que es sin duda uno de los emblemas de San Miguel, la Laguna de las Siete Ciudades, desvíate hacia las piscinas naturales termales de Ferraria.

Ahora ya, para terminar el segundo día, dirígete hacia Mosteiros, una freguesia portuguesa que pertenece al municipio de Ponta Delgada. Antes de llegar hasta allí, haz una parada en el mirador de Ponta do Escalvado y, por último, ve a la playa de Mosteiros para ver el atardecer.

Si te sobra tiempo...

Si has seguido este itinerario y te sobra algo de tiempo en la isla, ya sea porque vas a estar allí más de 48 horas o porque lo has hecho más rápido de lo previsto, puedes aprovechar que estás en San Miguel para hacer una salida de whale watching para ver ballenas o una inmersión de buceo en el Dori, donde visitarás un Liberty-Ship que fue construido durante la Segunda Guerra Mundial en Estados Unidos y que naufragó el 16 de enero de 1964. Hoy, es un parque arqueológico subacuático en el que se pueden ver auténticas nubes de pequeños peces.

En cuanto a la gastronomía, es imprescindible probar las lapas, el peixe porco, el queso de Sao Jorge, el bolo lêvedo y las queijadas.