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Bienvenidos al fin del mundo (y no se trata de una película americana)
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Bienvenidos al fin del mundo (y no se trata de una película americana)

Pocos destinos son tan cercanos y lejanos a la vez. Aunque Argentina tiene costumbres similares a las nuestras, sus espectaculares paisajes están llenos de contrastes

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Viajar a Argentina es como entrar en casa. A pesar de la distancia que separa a España de este país, si visitas sus ciudades te encontrarás con unas tradiciones muy similares a las tuyas. Casi no notarás que has volado más de 10.600 kilómetros con tu maleta lista para llegar al fin del mundo… literalmente. Y es que al realizar un circuito por Argentina no hay quien se resista a visitar Ushuaia, la ciudad más al sur del planeta. Podrás subir a un ferry que, durante dos días, navegará por el pasaje de Drake para llevarte a pisar el suelo de la Antártida.

Este destino recomendado por la agencia de viajes PANGEA es el octavo país más grande del mundo y, por eso, en sus 2,78 millones de kilómetros cuadrados podrás disfrutar de una amplia gama de paisajes: desde horizontes desérticos hasta auténticas selvas, pasando por bosques discretos, vestigios glaciares o incluso zonas casi despobladas. En este último caso destaca la Patagonia, tan lejos de todo que su planicie solitaria contrasta con las abruptas lomas de los Andes.

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Argentina (Pangea)

La Patagonia es una de las zonas menos pobladas del planeta. El fuerte viento que sopla sobre sus tierras y las bajas temperaturas que se registran te harán darte cuenta de lo complicada que puede ser allí la vida. Sin embargo, visitar esta región es obligatorio en tu viaje por Argentina. Allí se encuentra el Calafate, un pueblo que parece sacado del lejano oeste y que se mezcla con un ambiente mochilero. Muy cerca del Parque Nacional de Torres del Paine podrás observar tres glaciares que conforman la tercera reserva de agua dulce más grande de América, bautizada como campos de hielo sur.

En estos campos es donde se encuentra el Spegazzini, el Upsala y, cómo no, el mítico Perito Moreno que puede presumir de ser el glaciar más conocido de Argentina. Con sus 30 kilómetros de longitud y sus 60 metros por encima del agua en su frente, en cuanto contemples su belleza azul entenderás por qué es tan importante frenar el cambio climático y conseguir que espectáculos naturales como este se preserven por los siglos de los siglos.

placeholder  Perito Moreno. (Shutterstock)
Perito Moreno. (Shutterstock)

Caminar por encima del Perito Moreno es posible contratando excusiones guiadas que te ayudarán a conocer más en profundidad este glaciar mientras lo recorres ataviado con crampones. Si no estás en buena forma, también puedes disfrutar de él en una ruta de mini ‘trekking’ o un safari náutico que te lleva a contemplar la pared sur del Perito.

Una excursión por el cruce andino

Si buscas planes diferentes, en Argentina encontrarás un buen número de ellos. Prepárate para protagonizar una auténtica experiencia de lujo para los amantes de los viajes: cruzar la frontera entre Argentina y Chile a través de un paseo por los Andes que nunca olvidarás. El barco y el autobús serán los dos medios de transporte que utilizarás para 'sellar' tu pasaporte mientras visitas el Parque Nacional Nahuel Huapi, el único de Sudamérica que ofrece una ruta por este cruce andino.

En tu trayecto de Puerto Varas, en Chile, hasta Bariloche, en Argentina, te darás cuenta de por qué a esta ciudad de destino se la conoce como la 'Suiza argentina': ante tus ojos aparecerán unos paisajes montañosos de ensueño entre los cuales, desde las alturas de un telesilla, surgirá el Perito Moreno y unos magníficos bosques de falsas hayas, o lengas, que prueban la antiquísima conexión entre Nueva Zelanda, Australia y Sudamérica (solo en estas tres zonas se disfruta de esta especie arbórea).

placeholder Bariloche. (Shutterstock)
Bariloche. (Shutterstock)

El verde de la región te parecerá un sueño cuando conozcas la zona de Salta y Jujuy, en la frontera argentina con Bolivia y Chile. Este es uno de los lugares más áridos del país, pero también uno de los mejores para interactuar con los habitantes locales. Existe mucha tradición vaquera en este rincón al norte de Argentina, así que no dudes en probar su exquisita carne de vacuno.

Tu Buenos Aires querido

Un viaje a Argentina sin visitar Buenos Aires no se entendería. Por eso, durante tu recorrido debes hacer hueco para conocer la cuna de los tangos. La capital bonaerense te recibirá para hacerte partícipe de sus coloridos barrios, de sus edificios más emblemáticos y de las melodías de Carlos Gardel que se escuchan en algunos de los distritos más tradicionales.

Date un paseo por la Recoleta o el barrio de Boca y empápate de la moderna zona de Puerto Madero. Si tienes tiempo, aprovecha para conocer el delta del río Paraná, al norte de la ciudad: allí se ubica el barrio del Tigre, un distrito de Buenos Aires en el que la vida discurre flotando sobre el agua.

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Buenos Aires. (Shutterstock)

Pero si de agua se trata, ni que decir tiene que no puedes volver a España sin conocer las cataratas de Iguazú. Situadas en la triple frontera entre Argentina, Brasil y Paraguay, esta caída de agua de 82 metros resulta completamente impresionante. En total se registran 275 cascadas entre las que te sentirás como en un ‘spa natural gigante’ donde el ruido es ensordecedor.

Viajar a Argentina es como entrar en casa. A pesar de la distancia que separa a España de este país, si visitas sus ciudades te encontrarás con unas tradiciones muy similares a las tuyas. Casi no notarás que has volado más de 10.600 kilómetros con tu maleta lista para llegar al fin del mundo… literalmente. Y es que al realizar un circuito por Argentina no hay quien se resista a visitar Ushuaia, la ciudad más al sur del planeta. Podrás subir a un ferry que, durante dos días, navegará por el pasaje de Drake para llevarte a pisar el suelo de la Antártida.

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