'Supervivientes 2018': Saray vuelve entre lágrimas tras ser expulsada por agresión

Saray Montoya protagonizó uno de los peores momentos de 'Supervivientes 2018', llegando a las manos con Romina Malaspina durante una de sus múltiples broncas. Es por ello que fue expulsada de forma disciplinaria por la organización del reality, una sanción que la que fuera protagonista de 'Los Gipsy Kings' acató sin rechistar.

Durante su viaje de regreso a España la exconcursante ha tenido mucho tiempo para reflexionar sobre lo sucedido, pidiendo así perdón a su llegada al plató: "Solamente quiero pedir perdón, mucho perdón. Soy humana y perdí los papeles. Lo siento mucho, de corazón".

Lo peor para mí ha sido la convivencia. He llorado mucho pero, bueno, no pasa nada

Saray trató de explicar que "llegaron hasta mi punto más débil. No sé por qué, porque siempre se había hecho por detrás de cámaras, y se hizo más grande, más a lo bestia", unas palabras que en ningún caso quiso poner como excusa para la agresión, injustificable según sus palabras.

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"Soy una buena persona pero he sido una mala concursante, porque he llegado a un límite que el ser humano no puede llegar. He pasado los límites, desgraciadamente este concurso no expulsa a las personas malas. Las personas malas no se hacen, nacen", dijo con relación a sus compañeras de programas, quienes la han estado minando desde el principio, a su juicio.

Jorge Javier se interesaba por conocer qué había aprendido en el concurso, algo que Montoya tenía claro: "He aprendido a pedir perdón y de los fracasos se aprende mucho como persona".

"Lo primero que una enseña a sus hijos es educación y me he saltado esos protocolos. Estoy mal conmigo misma. No quiero que mis hijas me vean más en esta situación, estoy muy arrepentida por eso", prosiguió Saray emocionándose, aunque tratando de mantener la compostura.

No puede contener las lágrimas

El presentador continuó indagando sobre cómo había vivido en la isla, un tema que hizo que Saray comenzase a llorar: "Yo sé lo que Raquel y yo hemos pasado ahí. Veo perfecta la venganza que se toman, pero ellos por detrás de cámara han machacado mucho. No quiero justificarme, porque asumo lo que hice, y por eso estoy aquí. Pero yo no he sido tan mala. He jugado mi juego. Cuando tenía que discutir lo he hecho, pero a la cara. He tenido buen corazón".

Pido perdón a todos ellos y especialmente a Romina

"Me importa su perdón, de corazón, porque no quiero tener enemigos en la calle", le reconocía a Jorge. "Pido perdón a todos ellos y especialmente a Romina, que es una niña".

En cuanto a lo que llevó peor en estas tres semanas de concurso, Saray también lo tuvo claro: "No he pasado mucha hambre porque yo ya iba con muchas reservas. Lo peor para mí ha sido la convivencia. Me costaba todo porque me tenían aislada. Allí todo se hace un mundo, necesitas el calor de la gente. He llorado mucho pero, bueno, no pasa nada".