Manuel, dispuesto a desenmascarar a Abel en 'La Promesa': ¿qué oculta el doctor?

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Tras su vuelta, Jana es advertida por Pía de que le espera un severo rapapolvo de los señores. En el nuevo capítulo de La Promesa de este martes, la doncella se encuentra con los marqueses para explicar su ausencia. Pero las excusas no son suficientes. La joven, que se marchó del palacio tras enterarse de que Alonso es el padre de Curro, ha intentado justificarse, alegando que se encontraba indispuesta tras pasar varios días encerrada. Pero los marqueses se han mostrado implacables ante sus argumentos que de poco han servido.

Jana se ha librado del despido, aunque ya no será doncella y pasará al puesto de criada. Esto significa que se encargará de los trabajos más duros. Desde primera hora de la mañana tendrá que hacer las tareas más arduas. De momento, no han dicho si el castigo es temporal o quedará relegada de forma permanente. Pía le ha asegurado que debe considerarse afortunada, porque si hubiera sido por Cruz estaría ya en la calle.

Jana y Manuel, cada vez más cerca

Jana ya se encuentra trabajando como criada, mientras Manuel y Curro intentan mediar para que le apliquen un castigo menos severo. Manuel le sugiere a su madre que quizás se les ha ido un poco la mano y que la falta no era para tanto.

El hijo de la marquesa sigue pendiente de la nueva situación de Jana. Más aún cuando confirma que no se ha olvidado de él al encontrarse un caramelo de la ahora criada en su abrigo. Los amantes están cada vez más cerca.

Manuel le ayuda en sus nuevas ocupaciones y así pasan más tiempo juntos. Y Jana le sigue dando calabazas a Abel confirmando que sigue queriendo a su amigo. Tampoco desiste en sus planes para encontrarse con Curro. Le pide a Manuel que haga posible su deseo y él no puede negarse.

En la mente de Manuel, además de Jana, también revolotea la idea de que el doctor no fue del todo sincero sobre su actuación en el incendio de la fábrica de aceites de Córdoba. Le pide a Rómulo que le entregue los ejemplares de periódicos para buscar alguna noticia que haga referencia al suceso y continuar su investigación para desenmascararlo.

El conde busca más pistas sobre la cacería

El Conde de Ayala está dispuesto a descubrir qué pasó en la cacería y quién acabó con la vida de su hijo. Para avanzar en su investigación precisa de la ayuda de Petra y le pide a Cruz los servicios de su mano derecha. Aunque Petra se muestra reticente a trabajar para su antiguo amigo, acepta sus nuevas labores. Un nuevo puesto que la marquesa de Luján quiere aprovechar para saber con quién se está carteando.

Petra también se tiene que enfrentar a las peticiones de Cruz para que le cuente la verdad sobre su embarazo. Y la doncella se inventa que Feliciano es fruto de una relación pasajera con un hombre casado del pueblo. La marquesa le reprocha que haya actuado así y no se lo haya contado antes, pero le muestra su apoyo a cambio de que esto no trascienda.

La visita sorpresa que trastoca la escapada romántica

La escapada romántica da rienda suelta al amor entre Catalina y Pelayo. Pero su viaje al balneario se ve trastocado con la aparición sorpresa de Mr. Cavendish. Su presencia lo deja descolocado y no cree que el inglés esté ahí para disfrutar de las aguas medicinales. En una conversación sin Catalina ni Vera presentes le explica que lo ha perseguido para demostrarle que no se puede huir de él tan fácilmente. Pelayo le pide tiempo para encontrar una solución al incidente con Jerónimo y las armas del almacén.