'Nevenka' (Netflix): la mujer que hace 20 años gritó y denunció que "no es no"

20 años después de denunciar públicamente que estaba siendo acosada sexualmente por su jefe y alcalde de Ponferrada, Nevenka Fernández rompe su largo silencio y, de nuevo, da la cara. Por primera vez, se pone delante de una cámara de televisión para contar la única verdad y así concienciar y animar a otras mujeres a que hagan lo mismo que hizo ella. Lo hace en el documental 'Nevenka', estrenado este viernes en Netflix. Recuerda el calvario en solitario que atravesó siendo una joven de 26 años. Desde el día que en público dijo "Basta ya" se convirtió, sin saberlo, en la primera mujer en España en gritar "no es no".

Nevenka, desde la tranquilidad, la sabiduría y la serenidad que proporciona el paso de los años, y sin un ápice de rencor en su interior, toma la palabra y relata el infierno al que la sometió Ismael Álvarez, alcalde de la ciudad donde había aterrizado como concejala de Hacienda, tras finalizar la breve relación sentimental que llegaron a mantener. A partir de ese momento, le hizo la vida imposible: la humilló en público, la acosó a mensajes y llamadas, e incluso la amenazó de muerte.

Después de meses de acoso y derribo, Nevenka, machacada física y psicológicamente, decidió denunciarlo. Lo hizo público, dimitió de su cargo y ganó en los tribunales. Durante todo este camino, tuvo que soportar el escarnio público, el sentimiento de culpa y la vergüenza por verse señalada por unos y por otros: "La sociedad española tiene una deuda pendiente con Nevenka Fernández, por dejarla sola, por no apoyarla, por juzgarla antes, durante y después del juicio. Le debemos mucho. Consiguió que se condenara, por primera vez en España, a un cargo público por acoso sexual", cuenta la periodista Ana Pastor, responsable de Newtral, productora que ha llevado a cabo este trabajo.

Muchos se preguntarán la razón por la que decide hablar ahora. "Es Nevenka la que, ante la eclosión del #MeToo en 2017 y las grandes movilizaciones de mujeres durante el 8M, decide que ha llegado el momento de tomar de nuevo la palabra. Con su voz y su relato, pelea porque otras mujeres no se vean obligadas a esconderse cuando denuncian abusos y acoso sexual en los medios de comunicación. Son ellas las víctimas y no las culpables", nos cuenta Pastor.

"Además, lo hace para dar a conocer su historia a nuevas generaciones de chicas y jóvenes que en su vida han oído hablar de este caso. Como mujer y periodista –recuerda Ana Pastor– nunca le estaré lo suficientemente agradecida, por lo que hizo y porque haya decidido contarlo delante de una cámara".

Desde que Nevenka Fernández denunció los hechos en rueda de prensa y presentó su dimisión, el caso se vio envuelto en todo tipo de información adulterada e intoxicada en medios y televisiones. Se abrió la veda para inventar, difamar y atacar a la exconcejala, con sensacionalistas titulares y falsas noticias que incluso llegaron hasta el juicio.

"Partiendo de una única e incontestable verdad, la suya, que respaldaron los tribunales, no nos olvidemos, hemos ordenado una historia que era necesario fuera contada tal y como ocurrió, desde los ojos y la voz de su única protagonista y bajo la interesante mirada y la perspectiva que proporciona el paso del tiempo", relata Maribel Sánchez-Maroto, directora de 'Nevenka'.

El infierno de Nevenka

El 26 de marzo de 2001, la concejala de Hacienda de Ponferrada, Nevenka Fernández, denunció públicamente al alcalde del PP Ismael Álvarez por acoso sexual tras hacerlo en los juzgados. Pronunció unas palabras que, sin ella saberlo, marcarían la historia. "Os he convocado para que conozcáis que en el día de hoy presento mi dimisión como concejala de este ayuntamiento que tanto quiero... porque tengo 26 años y dignidad".

Con semblante triste y voz entrecortada, aclaró que tras meditarlo mucho, y viéndose incapaz de superarlo, había decidido denunciar al alcalde de la ciudad por acoso sexual y laboral; una situación, subrayó, que se había desencadenado después de que ella hubiera decidido poner fin a la relación sentimental que ambos habían mantenido durante un tiempo.

"Es a partir de ese momento cuando para mí comienza un infierno", dijo durante su dimisión. "Este acoso y presión psicológica a los que fui sometida provocaron en mí un estado de ansiedad, tristeza y angustia grande. Me lo debo a mí misma y se lo debo a todas las mujeres que ahora mismo pueden estar viviendo una situación tan terrible como la que yo he vivido", apostilló.

Así arranca el documental de Netflix, recordando aquella histórica rueda de prensa. Fue el comienzo de una infernal batalla en medio de serias amenazas, ataques despiadados hacia su persona y una opinión pública dividida, que acabó meses después en los tribunales. Durante el juicio, fue acusada incluso de ser la culpable de lo ocurrido. "Es lo que vino a insinuar el entonces fiscal jefe de Castilla y León, José Luis García Ancos, apartado del caso cuando afirmó en la sala que ella no era una empleada de Hipercor, que tenía que aguantarse si le tocaban el culo porque era el pan de sus hijos", nos cuenta Maribel Sánchez-Maroto.

Nevenka fue víctima por partida doble: primero por acoso sexual y luego por haber denunciado a su acosador. Ismael Álvarez renunció a la alcaldía tras ser condenado, pero regresó triunfal a su ciudad natal, que seguía confiando en su inocencia. Mientras, Nevenka, convertida sin quererlo en un personaje público, pagaba su propia condena huyendo al extranjero en busca de anonimato y trabajo, dos cosas que no lograba encontrar en nuestro país.

"No es cierto que Nevenka permanezca a día de hoy escondida fuera de España. No se esconde de nada ni de nadie, nunca lo hizo. Tan solo quería ser anónima y lo consiguió. Vive en Inglaterra y disfruta del reconocimiento profesional en una importante empresa, donde ejerce un puesto de responsabilidad. Además, está felizmente casada y es madre de dos hijos", apunta Ana Pastor.