"Odio a la gente de derechas": cambia su ideología política para gustarle a su cita de 'First Dates'

Manuel es un jubilado de Donosti (País Vasco) que ya estuvo en First Dates hace años. En aquel momento, fue rechazado por no saber bailar. Por lo que anoche, el vasco le dio una segunda oportunidad al dating show de Mediaset y regresó en busca de una mujer que le rompiese los esquemas. Ante esto, el programa le concertó una cita con Isabel, una pensionista de Zaragoza que siempre ha sido muy ligona.

Sin embargo, la soltera no sintió un "flechazo" al ver a Manuel: "A mí siempre me han gustado los hombres altos. Pero, cuando lo he visto, parecía un tapón para mí", confesó Isabel al equipo de Cuatro sobre su cita. Tras una breve presentación, los solteros pasaron a una mesa para conocerse mejor. Durante la cena, el donostiarra reveló que trabajó para Francisco Franco, una información que no le gustó nada a la zaragozana.

Sin embargo, Manuel puntualizó que él nunca fue franquista: "Menos mal, porque a mí me caen fatal los franquistas. Mis abuelos eran republicanos. Mi padre fue comunista y luego socialista", declaró Isabel, al conocer el pasado laboral del donostiarra. Aprovechando el tema, la zaragozana no dudó en lanzarle una punzante pregunta a su cita: "¿No serás de derechas? Porque yo odio a la gente de derechas".

Ante esto, y para contentar a Isabel, Manuel respondió que toda su familia era del PSOE. Sin embargo, a solas con el equipo de First Dates, el vasco matizó su respuesta: "Yo no fui socialista nunca, fue mi familia. A mi abuelo lo mataron porque era socialista, concejal y maestro", reveló el soltero. Sin embargo, esta mentira tampoco consiguió que Isabel viese con mejores ojos a su cita.

La zaragozana consideró que Manuel era muy mayor para ella: "Lo veo muy viejo para mí, me gustan más jóvenes", sentenció la soltera. En cuanto al terreno sexual, el jubilado aseguró que era un experto del sexo y que se sabía "todo el abecedario del porno". Pero Isabel no era capaz de imaginarse a Manuel en la cama. Para colmo, al final de la cita, el soltero volvió a demostrar que no sabía bailar.

Cuando llegó el momento de la decisión final, Isabel respondió que no tendría una segunda cita con el vasco, ya que no era su tipo: "No he sentido absolutamente nada", declaró la zaragozana. Ante esto, a Manuel no le quedó otra que rechazar también a Isabel.