"Preguntan cosas absurdas para no dar el bote": Orestes ('El cazador'), sin pelos en la lengua sobre 'Pasapalabra'

Hace ahora seis meses, Rafa Castaño lograba hacerse con el preciado bote de Pasapalabra. Su triunfo en el concurso de Antena 3 llevaba consigo la salida también del programa de Orestes Barbero, veterano participante que decía adiós a su sueño con pesadumbre. Las reglas del formato son así, si un concursante se lleva el bote, su rival debe resultar eliminado.

Sin embargo, esta salida del espacio que presenta Roberto Leal no supuso, ni mucho menos, su desaparición mediática: El cazador estuvo raudo y fichó al burgalés pocos meses después para suplir la baja de David Leo. Sobre este importante cambio se ha mojado ahora el joven, asegurando que le ha venido bien modificar su rutina e incorporarse a un formato que le da más margen para llevar a cabo otras actividades al margen del estudio para el concurso: "Me ha venido bien para recuperar la compostura, recuperar la vida normal y ahora compaginarla con El cazador, que es mucho más fácil que con Pasapalabra", destaca Orestes en declaraciones a El País

Barbero se muestra muy contento por esta nueva oportunidad que le ha brindado la cadena pública, donde se ha estrenado hace cerca de un mes como 'cazador' en sus tardes. Allí, el joven trata de imponerse a los participantes que, cada tarde, pelean por hacerse por la cantidad de dinero que acumulen en las diferentes rondas de juego. Se trata, por tanto, de una posición bien diferente a la que ostentaba en Pasapalabra, una que incluso parece estar disfrutando más, pese al bonito viaje vivido en Atresmedia: "Si me das a firmar entre tener el bote o no tenerlo, yo te diría que por el gustirrinín de la aventura, y por la continuidad tan bonita que tiene esto, te diría que no ganarlo, pero me quedo con venir a El cazador".

Tan bien lleva este nuevo rol televisivo que, por el momento, Orestes Barbero descarta, al menos de momento, regresar a Pasapalabra, donde le dejaron la puerta abierta cuando fue eliminado: "No me lo planteo. Estoy tan bien aquí, que al final me tengo que centrar en esto, que es una oportunidad de oro. Y que además es compatible con otras dedicaciones", subraya nuevamente.

En cualquier caso, no se puede decir "de este agua no beberé", como él mismo agrega acto seguido: "No sé si decir clausurada porque nunca digas de este agua no beberé ni este cura no es mi padre. Pero vamos, queda postergada hasta que en El cazador lo puedan disponer, sí". Cabe recordar que en estos casos suelen existir cláusulas contractuales que impiden que un concursante pueda intervenir en espacios de la competencia, algo a lo que el participante parece hacer alusión con esta respuesta.

Por último, Orestes no duda en abordar la dificultad de ambos concursos, teniendo muy claro cuál de los dos presenta una mayor complejidad y por qué: "En Pasapalabra preguntan cosas para asegurarse de que el bote no caiga todos los días, cosas que ni siquiera son difíciles, son directamente absurdas. En El cazador no, todas son preguntas de conocimiento, todas acaban siendo más o menos asequibles", valora con sinceridad, un pensamiento que muchos espectadores pueden tener, pero que pocos participantes se han atrevido a verbalizar con tanta rotundidad.