Moisés Laguardia se sincera sobre 'Pasapalabra': de la dificultad del 'Rosco' al gran gesto de Orestes con él

Con 23 programas a sus espaldas y 16.800 euros de premio acumulado, Moisés Laguardia se ha convertido en el gran rival a batir en Pasapalabra. Su dilatada experiencia en el concurso, siendo esta su quinta vez en el formato, le ha granjeado la confianza y seguridad necesarias para mantener los nervios a raya y pelear día tras día por el bote, algo que solo tiene sentido tras una profunda preparación previa. En su caso, esta llegó gracias a la pandemia, cuando aprovechó los duros meses de encierro para empaparse de conocimiento, como él mismo ha confesado ahora en una entrevista para la web de Antena 3.

En ella, el joven recalca que vive esta nueva etapa en Pasapalabra con la ilusión del primer día, aunque es consciente del salto que ha experimentado el formato en lo que a dificultad se refiere: "La vivo como si fuese la primera vez, con la ilusión del primer día, pero sobre todo tratando de disfrutar, de pasármelo bien, pero sí es que es cierto que el nivel ha aumentado, cada vez es más difícil durar. El nivel de los roscos es como la inflación, cada va vez subiendo un poquito más. Es cierto que para mí esto es un hobby, pero siempre he tratado de ir mejorando, estudiando poco a poco cada día".

"Si empiezas a ver roscos antiguos, te das cuenta de que las preguntas difíciles son cada vez más difíciles, sobre todo las de cultura general. Pero esto es así, el listón está ahí, no va a bajar por mucho que nos quejemos, así que solo queda trabajar más duro para superarlo", sentencia el participante, sin perder la sonrisa que caracteriza su paso por el concurso.

Como comentan todos los exparticipantes, prepararse para Pasapalabra es casi como una oposición, algo que en su caso le retrotrae a la pandemia: "Me vino muy bien. Fue un momento muy duro para todos, y yo también tuve algún que otro problema personal, pero para mí Pasapalabra fue un refugio. Teníamos muchas horas que no sabíamos qué hacer en casa y yo las invertí en estudiar bastante. Luego ya no he podido mantener tanto el ritmo, pero si he ido haciendo repasitos diarios", reconoce el riojano.

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D. R.

Hablando de antiguos compañeros, dos son los que tiene a bien destacar: "Al concursante que más aprecio le tengo es a Nacho Mangut porque nuestra trayectoria es similar, aunque él empezó un año antes, más o menos, en el concurso. Incluso hemos entrenado juntos a veces, me llevo muy bien con él", enfatiza Laguardia.

Por otro lado, Moisés no quiere dejar pasar la oportunidad de tener un especial recuerdo a Orestes debido a un bonito gesto que tuvo con él hace solo unos meses: "Quiero destacar a Orestes, que es un tío genial, ha tenido muy buenos detalles conmigo, sobre todo antes de que me llamarais. Unos meses antes de recibir la llamada del programa estaba muy desanimado, y él la verdad es que me animó mucho a seguir estudiando, a no perder la esperanza. Le mando un saludo porque es un tío muy grande", concluye.