15 años de 'Ilustres ignorantes' (Movistar Plus+): "Somos el único programa que no se ha preocupado por renovarse"

El próximo martes, 7 de noviembre, a las 21:30 horas, el especial 15 años de Ilustres ignorantes verá la luz en Movistar Plus+. Javier Coronas, acompañado de sus inseparables Pepe Colubi y Javier Cansado, recibirán a, más que invitados, dos grandes amigos del programa, Andreu Buenafuente y Berto Romero. Todos, en un debate cargado de humor e ingenio, echarán la vista atrás para recordar los mejores momentos de la historia de este veterano show.

EL CONFI TV estuvo presente en la grabación de esta entrega y, poco antes, pudimos intercambiar impresiones con el presentador y sus dos colaboradores. ¿Por qué Buenafuente y Romero para esta ocasión tan señalada? Dos rostros que, por cierto, regresan al plató en el que se desarrolló Late Motiv durante sus 5 años de vida en la plataforma de Telefónica.

Coronas: "Somos como 'La clave', pero mal hecho, con cinco 'pollaviejas' hablando medio en serio, medio en broma"

"La elección de cualquier invitado no obedece a nada más allá de que son gente que queremos, admiramos o nos cae bien. Gente de cuyo talento nos queremos aprovechar", responde Coronas. Por la mesa de los Ilustres han pasado cerca de 1.000 invitados, entre los que el conductor destaca a personalidades como la periodista Mariola Urrea: "Me empeñé en traerla. Ella no es seria, pero trata temas serios. La metimos con Pepín Tré y funcionó de putísima madre el contraste. Eso es lo que mola, invitar a gente dispar y que se forme una especie de nebulosa de la risa".

El equipo señala también "la rapidez de Blas Cantó" o la de Enrique Villarreal, más conocido como El Drogas, así como las reticencias iniciales de Fito Cabrales a acudir, aunque finalmente accediese: "Hay gente que no se ve o que se pone nerviosa. Hay respetarlo". Quienes nunca se han sentado en la tertulia, y no parece que vayan a hacerlo, son políticos.

"No nos interesa que vengan, aquí viene gente a la que tenemos cariño", bromea Coronas, mientras Cansado pone el foco en "el presupuesto" y en el riesgo que entraña acceder a ir a un espacio de humor: "No se van a arriesgar a quedar como unos sosos, o a quedar mal". Según apunta Colubi, nunca lo han intentado porque, simplemente, "no son el target del programa".

Supervivientes al paso del tiempo

"Cuando hicimos la primera temporada, ni siquiera pensábamos que habría una segunda. O un programa siguiente, incluso", reconoce el moderador de la tertulia de Movistar Plus+. Cuando Ilustres ignorantes arrancó su andadura el 1 de noviembre de 2008, entonces en Canal+, lo hizo con carácter mensual: "De un mes para otro, ya se nos olvidaba lo que habíamos hecho. La primera temporada tuvo solo 9 entregas, y era bastante llevadero".

Poco a poco, el formato de entretenimiento fue adquiriendo peso, ampliando públicos, hasta convertirse en lo que es hoy. "Youtube fue fundamental en su momento. También esos fragmentos que va colgando Movistar en redes sociales. Incluso es importante la cuenta de Ilustres, que la llevo yo. Ahí vamos metiendo promociones, hay feedback de nuestros seguidores...", explica Pepe.

Y es que la democratización de las plataformas no ha hecho más que contribuir a su éxito: "Hay una horquilla muy grande de espectadores. Para este especial, estábamos grabando a varios invitados recomendando el programa, y pasó un señor con su hijo. El niño tenía 11 años y el padre nos dijo: 'No me pide ver los dibujos, solo Ilustres'. Que si podía venir a una grabación. También nos encontramos a una pareja de dos personas mayores, de unos 80 y tantos, que veían el programa. E incluso lo entendían [risas]".

"Ilustres morirá con nosotros"

Los Ilustres, además, reflexionan sobre la evolución del humor en estos 15 años. "La prueba de que tenemos sentido del humor en España es que un programa como Ilustres ignorantes haya aguantado, porque tampoco somos una ONG, no nos podríamos sostener con 0 viewers. Yo creo que el humor vive una buena época", considera Colubi.

Cansado observa que, en todo este tiempo, "se ha perdido el sketch": "Por ejemplo, el Saturday Night Live lleva dos temporadas que no está bien. Quizá es porque la gente ya no espera tanto, necesita mucho estímulo, lo quiere todo ya. Esa estructura de planteamiento, nudo y desenlace... Ya no". Asimismo, subraya el aumento del número de cómicos y, sobre todo, de cómicas en nuestro país.

"Hace 30 años, no había ni 400 personas que se dedicasen al humor en España. Ahora, hay miles. Además, cada vez hay más mujeres en el programa. Al principio, era raro, venían sobre todo del ámbito de la cultura, pero no estrictamente del ámbito del humor", aporta la mitad del dúo cómico Faemino y Cansado.

¿Han pensado Coronas, Colubi y Cansado en el final de Ilustres ignorantes? Los tres ironizan sin complejos sobre el tema. "Yo no le quiero pasar el testigo a nadie. Quiero acabar con una sonda en directo, como el camisón abierto por detrás. Si puedo hacerlo así, no esperaría muchos años más", comenta Pepe, y el presentador añade: "Este programa morirá con nosotros. Quemaremos la mesa y sacrificaremos la cebra".

La espontaneidad como clave del éxito

Durante esta charla, no dejamos escapar la oportunidad de indagar en cómo prepara el equipo cada entrega, y lo cierto es que a los Ilustres nos les importa asumir el riesgo de trabajar sin guion, solo con una pequeña idea previa del tema que se tratará ese día. "Hay un peligro ahí, que es que no tengamos gracia, pero somos cinco personas remando a favor de un fin concreto, que es transmitir esa campechanía, por decir una frase antigua. Estamos a gusto y se nota, se transmite", asegura Colubi.

"No modificamos ni planteamos nada, el éxito está en que no hemos cambiado eso desde la primera temporada. Somos quizá el único programa de la tele que no se ha preocupado por renovarse. Si algo funciona, para qué vas a perder el tiempo cambiándolo", afirma el conductor de un formato en el que "no hay ensayos" para que nunca se pierda "la espontaneidad".

Al fin y al cabo, Ilustres ignorantes, como remata Coronas, solo es "como La clave, pero mal hecho, con cinco pollaviejas hablando medio en serio, medio en broma". Y esa es la esencia que esperan seguir manteniendo durante otros 15 años más, si cabe.