Jose Antonio reacciona tras 'Pasapalabra': "No entiendo la necesidad de insultar"

"¿Cómo se canaliza el odio generado por un mamarracho que ha concursado en 'Pasapalabra', al que no conoces de nada, pero que genera esa rabia a muchos tuiteros e instagramers?". Esta fue una de las preguntas que hace tan solo unos días lanzó Jose Antonio Valdés en su cuenta de Twitter, después de sufrir en primera persona los insultos de un gran número de personas anónimas. "¿Qué le pasa a este siglo XXI que hace que nos surjan estos odios?".

Jose Antonio Valdés fue uno de los dos concursantes que debutaron en 'Pasapalabra' después de que Sofía Álvarez de Eulate lograse completar correctamente el rosco y llevarse los 466.000 euros del bote. Aunque su estancia en el programa fue breve, no pasó desapercibido en las redes sociales. "Soy una persona que caigo fácilmente mal", nos reconoce sin ningún tipo de problema, sin embargo, no logra comprender la necesidad de insultar que llegan a tener algunas personas, "sobre todo la necesidad de que el insultado lo reciba".

"Hemos confundido la libertad de expresión con el interés de opinión"

"Después de generar tanto odio como para necesitar escribirlo en un tuit, más o menos agresivo, ¿qué hace el autor del tuit? ¿Se prepara una infusión? ¿Sale a dar un paseo?". Sobre esta cuestión y sobre su paso por 'Pasapalabra' hemos hablado con Valdés, concursante que tras tres entregas abandonó el concurso con 1.800 euros en el bolsillo.

PREGUNTA. ¿Qué te llevó a presentarte a un concurso como 'Pasapalabra'?

RESPUESTA. 'Pasapalabra' es un concurso me ha gustado de siempre. Hicieron un casting en la Universidad Complutense de Madrid, que es donde yo trabajo, y decidí apuntarme. Era una especie de casting itinerante al que se podía presentar quién quisiese. Pero ¡ojo!, que te estoy hablando de 2017 más o menos.

P. En aquel momento, el concurso formaba todavía parte de la parrilla de Telecinco...

P. Sí, de hecho, fui de suplente. Antes de ir como concursante, fui al programa en varias veces, pero nunca logré entrar. Recuerdo que por entonces el concurso se grababa en un plató lejísimos. Tiempo después, 'Pasapalabra' pasó a Antena 3 y me di por caído, sin embargo, me llamaron para ver si seguía interesado en participar.

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X. Migelez

P. ¿No participaste en ningún otro casting? ¿Entraste al programa automáticamente?

R. Hice un rosco telefónico, porque contactaron conmigo durante el confinamiento. No fue un casting presencial. Me llamaron por teléfono y me hicieron pasar una prueba de un rosco.

P. Tu estancia se ha limitado a solo tres entregas. ¿Se te ha hecho corta o la experiencia ha sido más que suficiente?

R. Ha sido muy corta, qué lástima, pero ha sido algo muy divertido, muy intenso,... tal y como se ve desde casa. La verdad es que ha sido un mes de septiembre bastante complicado, por la mañana en la universidad y por la tarde trabajando en una farmacia de mi familia y con las grabaciones de 'Pasapalabra'.

P. Algunos concursantes llevan años preparándose para asistir a 'Pasapalabra'. ¿Fue tu caso? ¿Te preparaste de alguna manera?

R. La verdad es que de eso me habla mucha gente. Pero ¿cómo te preparas para ir a un concurso en el que el contenido de las preguntas es la globalidad? El contenido de 'Pasapalabra' es el todo, no se puede estudiar nada en concreto.

P. Uno puede estudiarse los roscos viejos, repasar el diccionario...

R. Para eso hay que tener muchísimas ganas [risas]. Lo que sí hacía, porque me parecía entretenido, era utilizar la opción de aleatorizar las palabras que tiene la RAE, que te muestra palabras aleatorias con su correspondiente definición. También repasaba cosas que yo entiendo que son más lógicas y que pueden aparecer con más facilidad, como las capitales de países, los Premios Nobel... Pero hay algunas preguntas que son impredecibles.

"Quieren que sepas lo que opinan de ti, y a mí me trae sin cuidado sus opiniones"

P. Hace unos días, publicaste en Twitter que preferías ser insultado antes que enfrentarte a Orestes. ¿No te parece una provocación?

R. Eso es una guasa que yo hago. No tengo la costumbre de que a mí se me tome en serio. En mi día a día, tengo muchísima tendencia al 'mamarrachismo'. Con el fenómeno 'hater', me he dado cuenta de que la gente se ha tomado mis palabras en la literalidad, pero yo no hablo en el plano de realidad, sino en el de la fantasía. Y si la gente no comparte conmigo el plano de la fantasía, pues para ellos soy un gili***. Esto de los planos es una división que hace del mundo una 'youtuber' extraordinaria que se llama Ter.

P. Pero no puedes pretender que la gente que te acaba de conocer sepa, de primeras, si estás hablando o no en serio...

R. Yo soy una persona que caigo fácilmente mal. Para mí no es ningún problema que pueda caer mal a unos y a otros, me parece muy lógico. Lo que me parece mal es la necesidad de insultar, pero sobre todo la necesidad de que el insultado lo reciba. De escribirme por privado, de citarme en el insulto. No les vale con insultar, quieren además que el insultado sepa lo que opinan sobre él. Y en este caso, a mí me trae sin cuidado sus opiniones. Con las redes sociales, hemos confundido libertad de expresión con interés de opinión. La gente es libre de expresar lo que quiera, pero es que esa opinión tal vez no interese nada y hay mucha gente que eso no lo lleva bien.

P. ¿Es la primera vez que sufres un ataque o una "ola de odio" de esta envergadura?

R. De esta envergadura, nunca. Nunca me había visto con este impacto en redes, pero mi forma de ser acarrea que mucha gente malentienda las cosas. El primer día que salí en 'Pasapalabra' incluso respondí a algunos mensajes. Eran insultos de personas desconocidas que después del insulto seguramente siguieron con su vida como si tal cosa. Ponemos mucha pasión a la red social, pero luego esa pasión no se traduce en nada.

P. En el momento que uno aparece en televisión, los espectadores se sienten con el derecho de opinar y también de criticar.

R. Derecho tienen porque yo me expongo para que la gente diga lo que quiera de mí. No me parece tan mal el insulto, pero sí la ira. A ti te pueden insultar, pero cuando destilan tanto odio... eso genera un sentimiento en quien lo escribe que luego no va a ningún sitio, se queda dentro de esa persona y no se canaliza. Una de esas personas me dijo si sabía pelear e incluso me llamó hasta en cuatro ocasiones por Instagram.

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P. ¿A qué crees que se debe todo este ruido?

R. No la han tomado conmigo, yo les doy completamente igual. Esto es una cuestión de un 'Telediario'. Una de las críticas que me hacía la gente es que no me tomaba en serio el programa, que había acudido a 'Pasapalabra' y que no era un concursante serio. Pues no, no soy una persona seria en mi vida. No me tomo la vida en serio, y soy una persona feliz, porque he sufrido mucho en mi vida. Me han pasado cosas muy serias y por eso sé que todo esto de la tele no es serio. La gente que se toma estas cosas en serio es porque realmente no le ha pasado nada serio en sus vidas.

P. Tras tu denuncia pública, recibiste rápidamente el apoyo de históricos exconcursantes de 'Pasapalabra'. ¿Los conocías previamente?

R. No, pero a Jero sí lo conocía. Coincidí con él cuando fui de suplente a 'Pasapalabra'. En aquella época él era precisamente el concursante titular.

P. En cualquier caso, tras hacerlo público, has intentado restar importancia a los insultos...

R. Sí porque los insultos por orden de aparición se ajustan a la realidad. Me dicen pedante, insoportable, repelente y maricón. Esto me describe fenomenal, pero me gustaría saber si la gente me lo diría luego en la calle, si coincidiéramos.

P. Eres farmacéutico, periodista, actor de musicales, mago... ¿De dónde saca uno el tiempo? ¿De qué ejerces realmente?

R. Trabajo de farmacéutico. Fuera de mi carrera profesional, a lo que le dedico más tiempo es a Broadway Terapia, que es una compañía que tiene montados dos espectáculos musicales y en los dos tengo un personaje. Además, el grupo de teatro municipal del Ayuntamiento de Madrid está montando un musical que precisamente escribí yo durante la pandemia. Se llama 'Calipso'. Es maravilloso, porque recupera canciones de la revista y el cabaret. Se estrenará sobre marzo del año próximo.