Es noticia
Por qué he buscado una posible pieza de nave alienígena en el fondo del Pacífico
  1. Tecnología
  2. Novaceno
CONSEJO A LOS JÓVENES CIENTÍFICOS

Por qué he buscado una posible pieza de nave alienígena en el fondo del Pacífico

Avi Loeb explica en su columna de hoy por qué una visión más generalista de la ciencia es capaz de traernos hallazgos extraordinarios que no son posibles con la hiperespecialización

Foto: Un meteoro ilumina el cielo nocturno en la provincia turca de Gumushane. (X - @HABIP785)
Un meteoro ilumina el cielo nocturno en la provincia turca de Gumushane. (X - @HABIP785)

El Yom Kippur de este año fue sobrio. Decidí perdonar a algunos científicos que decidieron no leer nuestro reciente artículo sobre la expedición, pero que sin embargo lo criticaron públicamente. Dos días después, me preguntaron en una extensa entrevista para Die Welt: "Usted es posiblemente el científico en ejercicio más famoso del mundo. ¿Cómo afronta las críticas injustas?", a lo que respondí: "Esto viene con el estar expuesto a la atención pública. Recibo críticas de creyentes y escépticos sobre asuntos extraterrestres y sus presiones opuestas se equilibran. Mis tácticas de supervivencia son sencillas: Evito las redes sociales; evito las luchas en el barro porque te ensucian; persigo la ciencia lo mejor que puedo trabajando sin descanso en la recogida de pruebas en el Océano Pacífico y en el observatorio del Proyecto Galileo de la Universidad de Harvard; y mantengo el mensaje a pesar de las distorsiones del mensaje por parte de periodistas y comentaristas. El sentido común no es común. Los que carecen de creatividad sustituyen su curiosidad infantil por la intimidación infantil. Se resisten a la innovación porque carecen de imaginación".

A medida que ampliemos la isla del conocimiento en el océano de la ignorancia, descubriremos nuevos enigmas que habrá que resolver

Dentro de unos días tengo previsto representar el monólogo titulado "A Piece of Sky", sobre mi investigación actual, escrito por el consumado dramaturgo Josh Ravetch. Está previsto que la obra se represente en el circuito alternativo de teatro en Nueva York, dentro de un año. Resuena entre el público, independientemente del ruido de fondo. Anticipándose a la obra, un joven miembro de mi equipo de investigación me deseó: "¡Mucha mierda!"

Foto: La nave SSPO Esperanta no es una mera fantasía, sino un ejercicio de ficción anclado en la ciencia real. (Erik Wernquist)

Ayer me invitaron a dar una conferencia en Meta (Facebook) sobre mi ensayo en Scientific American, titulado: "Consejos a los jóvenes científicos: Sé generalista". De joven me interesó la filosofía, pero acabé en la ciencia por las circunstancias. Mi primer mentor en astrofísica me aconsejó centrarme en un nicho estrecho y convertirme en un experto mundial. Por mi naturaleza, no podía seguir este consejo debido a mi interés por el panorama general. Dominé un amplio conocimiento en todos los aspectos de la astrofísica que me permitió abrir nuevas fronteras, como las primeras estrellas, la cartografía del hidrógeno cósmico en tres dimensiones utilizando la línea de 21 cm, la obtención de imágenes de agujeros negros y, más recientemente: los objetos interestelares y la búsqueda de paquetes con una dirección postal de civilizaciones tecnológicas extraterrestres.

placeholder El trineo magnético de la Expedición Intergaláctica. De derecha a izquierda: J.J. Siler, Amir Siraj, Ryan Weed, Peter Smith y Avi Loeb en primer plano. (Avi Loeb)
El trineo magnético de la Expedición Intergaláctica. De derecha a izquierda: J.J. Siler, Amir Siraj, Ryan Weed, Peter Smith y Avi Loeb en primer plano. (Avi Loeb)

Imaginar la posibilidad de que algunos objetos interestelares puedan parecerse a Voyager 1 y 2, Pioneer 10 y 11 y New Horizons, lanzados por nosotros al espacio interestelar, es un rasgo de generalista. Josh Ravetch me envió un correo electrónico esta mañana:

"Querido Avi: ¡Me ganaste con 'Oumuamua! ... Tu talento está en la página, te permites el lujo de ser simplemente tú mismo... En Hollywood, la gente posa, embellece, exagera, miente, pero las personas que conozco y que resultan estar en la cima de sus profesiones no tienen nada que demostrar y en su mayor parte son auténticos seres humanos".

placeholder El astrofísico Avi Loeb en su despacho de Harvard. (Santiago Saldivar - Harvard Crimson))
El astrofísico Avi Loeb en su despacho de Harvard. (Santiago Saldivar - Harvard Crimson))

Me formé como físico teórico, pero como generalista, hace poco elegí dirigir un proyecto experimental en el Océano Pacífico. Los generalistas nunca se aburren porque siempre imaginan nuevos territorios que explorar y nunca se quedan atascados en el lecho de roca de un área de investigación estrecha que no permite seguir excavando. El distinguido escritor y empresario suizo Rolf Dobelli me preguntó si el proceso científico terminará alguna vez, y yo le contesté: "Nunca terminará, porque a medida que ampliemos la isla del conocimiento en el océano de la ignorancia, descubriremos nuevos enigmas que habrá que resolver". El físico Albert Michelson dijo en su discurso de 1894 en la inauguración del Laboratorio Ryerson de la Universidad de Chicago: "Las leyes y los hechos fundamentales más importantes de la ciencia física ya han sido descubiertos, y están tan firmemente establecidos que la posibilidad de que sean suplantados por nuevos descubrimientos es extremadamente remota. .... Nuestros futuros descubrimientos deben buscarse en el sexto lugar de los decimales". Esto fue una década antes de la Relatividad Especial, dos décadas antes de la Relatividad General y tres décadas antes de la Mecánica cuántica. La vida de un generalista nunca es tan aburrida como la imaginó Michelson. Los que profundizan en un nicho estrecho acaban creando cámaras de eco sin chispa creativa y su mensaje se vuelve aburrido.

Al final de la sesión Meta, me preguntaron cómo fomentar el trabajo de los generalistas. Advertí que ser generalista es una habilidad poco común y poco apreciada. Durante mi carrera científica, admiré a algunos polímatas como Freeman Dyson, Richard Feynman o Yaacov Zel'dovich. Polinizaron su entorno académico con ideas que otros profundizaron. Se les echó mucho de menos tras su muerte, cuando sus colaboradores dejaron de hacer aportaciones apasionantes. La mejor forma de apoyar a los grandes pensadores es asignarles fondos de investigación sin condiciones, en lugar del procedimiento habitual controlado por comités reacios al riesgo que prefieren dictar el resultado probable de la investigación para "no malgastar el dinero de los contribuyentes". Estos comités se sorprenderían si consultaran a los contribuyentes sobre si se debe gastar dinero en la pregunta "¿Estamos solos?", que recibe casi cero fondos federales, o en "¿Cuál es la naturaleza de la materia oscura?", que hasta ahora ha recibido miles de millones de dólares.

Más tarde, me entrevistó un joven podcaster de Alemania que me pidió un consejo para los jóvenes. Mi recomendación fue sencilla: "Mantén siempre la curiosidad y nunca pretendas ser el adulto de la sala".

Pulsa aquí para ver todas las columnas de Avi Loeb en Novaceno. Ya puedes comprar aquí el nuevo libro del profesor Loeb, Interstellar.

El Yom Kippur de este año fue sobrio. Decidí perdonar a algunos científicos que decidieron no leer nuestro reciente artículo sobre la expedición, pero que sin embargo lo criticaron públicamente. Dos días después, me preguntaron en una extensa entrevista para Die Welt: "Usted es posiblemente el científico en ejercicio más famoso del mundo. ¿Cómo afronta las críticas injustas?", a lo que respondí: "Esto viene con el estar expuesto a la atención pública. Recibo críticas de creyentes y escépticos sobre asuntos extraterrestres y sus presiones opuestas se equilibran. Mis tácticas de supervivencia son sencillas: Evito las redes sociales; evito las luchas en el barro porque te ensucian; persigo la ciencia lo mejor que puedo trabajando sin descanso en la recogida de pruebas en el Océano Pacífico y en el observatorio del Proyecto Galileo de la Universidad de Harvard; y mantengo el mensaje a pesar de las distorsiones del mensaje por parte de periodistas y comentaristas. El sentido común no es común. Los que carecen de creatividad sustituyen su curiosidad infantil por la intimidación infantil. Se resisten a la innovación porque carecen de imaginación".

Espacio Investigación
El redactor recomienda