La posible solución al 80% de desempleo que traerá la inteligencia artificial

Mustafa Suleyman tiene solo 38 años, pero ya es una de las personas con más experiencia en el campo de la inteligencia artificial. El cofundador de Deepmind —una empresa londinense que revolucionó esta tecnología y que Google adquirió en 2014— está muy preocupado por el impacto que tendrá la IA en el mercado laboral y reclama a los políticos que actúen con urgencia para solucionarlo. La propuesta de Suleyman para conseguirlo es una vieja conocida: la renta básica universal.

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Deepmind saltó a la fama con AlphaGo, una inteligencia artificial que aprendió a jugar sola al GO —un juego similar al ajedrez de origen chino, aunque más complejo al tener muchas más opciones de movimientos— que llegó a ganar al campeón mundial por primera vez en la historia. Deepmind ha copado los titulares de la prensa internacional recientemente con AlphaFold, otra IA capaz de resolver una incógnita que llevaba 50 años atormentando a los biólogos, predecir las estructuras de las proteínas del cuerpo humano. No solo lo logró, sino que lo hizo con una precisión sin precedentes. Deepmind también trabaja en resolver algunos de los problemas que impiden el desarrollo de la fusión nuclear comercial y ha creado un nuevo método con el que poder controlar los flujos de plasma dentro de un reactor tokamak.

Suleyman habló recientemente ante los asistentes al GIC Bridge Forum de San Francisco sobre una de los problemas que más preocupan entre los expertos de esta tecnología, el recorte de empleos inminente que supone la adopción de la IA para la automatización de tareas.

La Renta Basica Universal como solución

"Indiscutiblemente, muchas de las tareas que realizan ahora los oficinistas tendrán un aspecto muy diferente en los próximos cinco a diez años", comentó Suleyman. "Eso necesita una compensación material”. Para el actual fundador de Inflection, la solución al problema está en la implementación de una renta básica que cubra las necesidades económicas de los ciudadanos. Y en su charla animó a los gobiernos a estudiarla con urgencia: ”Es una medida política y económica de la que tenemos que empezar a hablar en serio", explicó.

Sam Altman, director general de OpenIA, compañía que ha creado ChatGPT, está en la misma línea. En un artículo publicado recientemente en su blog pronosticó que la próxima generación de IA sustituirá a los trabajadores humanos en EEUU y dará lugar a una Renta Básica Universal para todos. Según Altman, el dinero generado por la inteligencia artificial será suficiente para financiar pagos de ingresos dirigidos por el gobierno para todas las personas de la Tierra.

“Aunque la gente seguirá teniendo trabajo, muchos de esos empleos no crearán mucho valor económico en la forma en que concebimos el valor hoy en día” escribe Altman. “A medida que la IA produzca la mayoría de los bienes y servicios básicos del mundo, la gente podrá dedicar más tiempo a sus seres queridos, a cuidar de los demás, a apreciar el arte y la naturaleza o a trabajar por el bien social”.

Altman cree que hay que imponer un gravamen a las empresas más ricas. “Podríamos hacer algo llamado Fondo de Equidad Americano. El Fondo de Equidad Americano se capitalizaría gravando a las empresas por encima de una determinada valoración con el 2,5% de su valor de mercado cada año, pagadero en acciones transferidas al fondo y gravando con el 2,5% del valor de todas las tierras de propiedad privada, pagable en dólares”.

El recorte de empleos ya está aquí

Hace poco nos hicimos eco de las palabras de Ben Goertzel, uno de los mayores expertos en inteligencia artificial del mundo, que está convencido de que esta tecnología eliminará el 80% de todos los empleos. Goertzel, quién popularizó el término “inteligencia artificial general”, piensa que esta tecnología no es perjudicial, sino que será beneficiosa para la sociedad en el largo plazo. “La gente puede encontrar mejores cosas que hacer con su vida que trabajar para ganarse la vida... Casi todos los trabajos que impliquen papeleo deberían ser automatizables”, asegura.

Sin embargo, el futuro próximo no le parece tan halagüeño. "El problema que veo es en el período intermedio, cuando las IAs hagan que el empleo humano sea obsoleto... No sé cómo resolver los problemas sociales [que esto va a provocar]".

El pasado marzo, Goldman Sachs afirmó que la inteligencia artificial generativa podría dejar sin empleo a 300 millones de trabajadores a tiempo completo en Estados Unidos y Europa. Y un reciente estudio de OpenIA apunta a que de ese 80% de profesionales afectados por la IA, por lo menos un 10% de su actividad será totalmente reemplazada por inteligencia artificial de forma inminente. Y casi un 20% de todos los trabajadores verán como la IA realizará la mitad de sus tareas.

Las empresas ya están en ello. El primer gigante en hacerlo ha sido IBM, que anunció hace poco uno de los mayores recortes de empleo en favor de la inteligencia artificial que se ha visto hasta la fecha y que podría afectar a unos 7.800 empleos. Arvind Krishna, director general de la compañía, aseguró en una entrevista que se suspenderá la contratación en puestos de trabajo que pueden ser sustituídos por la inteligencia artificial en los próximos años. Estas labores no están cara al público y afectan a unos 26.000 trabajadores, dijo Krishna. "Podría ver fácilmente un 30 por ciento de ellos siendo sustituidos por inteligencias artificiales y automatización en un periodo de cinco años".