El gigantesco laberinto subterráneo construido en secreto por el Pentágono
DARPA construye una gigantesco laberinto subterráneo para que robots autónomos demuestren cómo pueden ayudar en caso de combate y emergencias en sitios desconocidos
El brazo de investigaciones tecnológicas avanzadas del Pentágono ha construido en el más absoluto de los secretos un gigantesco laberinto lleno de túneles, cavernas, estaciones falsas de metro y búnkeres en el estado de Kentucky.
Según apunta la revista oficial de la asociación de ingeniería norteamericana IEEE Spectrum — que fue invitada al único evento en el que un selecto grupo de investigadores han podido explorarlo — el increíble complejo ha tardado meses en construirse desde cero.
El laberinto de DARPA se ha construido en la Megacaverna de Louisville y ha sido la localización de una de las pruebas más complejas de robótica del planeta, un concurso tecnológico dotado con millones de dólares en premio para aquel equipo que tuviera éxito en explorar el laberinto y sortear todas sus trampas y dificultades.
Por qué han construido este complejo
DARPA es la organización para el desarrollo de tecnología experimental dependiente del Pentágono fundada por el Presidente Eisenhower para garantizar la supremacía tecnológica norteamericana después del lanzamiento del Sputnik ruso.
Entre otras cosas, DARPA es conocida por su agresivo programa de retos tecnológicos, concursos con premios en metálico que buscan solucionar problemas complejos que son vitales para la seguridad nacional. Estos retos y programas experimentales no sólo son para construir máquinas militares, sino que van desde los programas que han dado lugar a los coches autónomos hasta los que hicieron posible la creación rápida de la vacuna del Covid.
El laberinto — que tuvo que ser construido desde cero para que los equipos no pudieran hacer tampas con el mapeado — fue el escenario de las pruebas finales del reto subterráneo, una prueba que, según DARPA, “busca equipar a soldados y equipos de emergencia para explorar entornos subterráneos desconocidos que son demasiado peligrosos, oscuros o profundos para arriesgar vidas humanas”.
La prueba final se celebró a finales de septiembre después de tres eventos en otros tres circuitos y, ahora, por fin podemos ver la locura a la que esta organización sometió a ocho equipos formados por universidades y compañías privadas en busca del primer premio de dos millones de dólares.
La competición — que consiste en la búsqueda de varios objetos sorteando todo tipo de obstáculos y trampas en un laberinto de todo tipo de escenarios subterráneos imaginables — la ganaron el equipo Cerberus — en la modalidad de robot físico, dotada con dos millones de dólares — y el equipo Dynamo en la modalidad de competición virtual, con un precmio de 750.000 dólares.
Cerberus utilizó un sistema combinado de robot andante y robot volador para mapear y explorar el terreno para sortear muchos de las pruebas con éxito.
Exploración para colonias en la Luna y Marte
Según el director del reto, Timothy Chung, “en las misiones en las que el tiempo es un factor determinante, como operaciones de combate o intervención en situaciones catastróficas, los soldados y los equipos de intervención de emergencia se enfrentan a terrenos difíciles, estructuras inestables, condiciones ambientales degradadas, graves limitaciones de comunicación y zonas de operación muy amplias. El desafío ha ayudado a avanzar significativamente las herramientas tecnológicas para hacer frente a estos impedimentos y salvaguardar vidas".
Como siempre es el caso de DARPA, el avance de esta tecnología no sólo afectará a estas situaciones sino que tendrá implicaciones directas e indirectas en otros sectores y escenarios. Uno de ellos será sin duda la fundación de colonias en la Luna y Marte, donde se utilizarán cavernas y túneles de lava para proteger a los astronautas de la radiación solar y cósmica.
Organizaciones como la NASA o SpaceX podrán aprovecharse de lo aprendido por DARPA en implementar soluciones de mapeo que permitan encontrar y planear refugios en estos cuerpos celestes.
El brazo de investigaciones tecnológicas avanzadas del Pentágono ha construido en el más absoluto de los secretos un gigantesco laberinto lleno de túneles, cavernas, estaciones falsas de metro y búnkeres en el estado de Kentucky.