Apple pagará 1.000 M por el Mundial de Clubes. Es el precio de una guerra con Netflix y Amazon

Cuando los servicios de streaming empezaron a brotar como setas hace años, a la gente le maravilló la idea de disponer de un amplio catálogo de contenido a la carta para ver cuándo y cómo les viniera en gana. Hoy, los suscriptores de Netflix pasan una media de 18 minutos todos los días decidiendo qué ver, fatigados. Hasta el punto en que las plataformas, para luchar contra esa paradoja de la elección, han comenzado a ofrecer contenido de manera lineal. Emisiones continuas en la que los programas se suceden uno tras otro. Regresar a lo que viene siendo la ‘tele’ tradicional de toda la vida.

Si hubo una época en la que el streaming consistía en ver películas y series, ahora las empresas están abrazando otro tipo de visualización más pasiva, cimentada en las emisiones en directo. Una tendencia que ha llegado a su culmen ahora, con un importante y millonario acuerdo que están cerrando Apple y la FIFA para ceder a la tecnológica los derechos de televisión del Mundial de Clubes, planeado para 2025. Algo que lo cambia todo.

Si el acuerdo se concreta, sería la primera vez que la FIFA zanja un contrato mundial único. Y, aunque de momento se desconocen muchos detalles, abre la puerta a que el evento llegue a estar solo disponible en Apple TV+, la plataforma de los de Cupertino. Eso quiere decir que todos los españoles y españolas que quieran ver los partidos del Mundial más esperado de la década tendrían que contratar este servicio. El dilema ya no sólo será si contratar Netflix para las series, Filmin para las películas o Amazon para los programas, sino que ahora habrá que meter también a Apple en el paquete para disfrutar del fútbol.

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El torneo está previsto para junio y julio de 2025 y juntará a los 32 mejores equipos de fútbol del mundo en Estados Unidos. Estos serán los últimos campeones de la UEFA, la CONMEBOL, la Concacaf, África, Asia, Oceania y EEUU. Entre ellos se encuentran el Real Madrid, el Atlético de Madrid, el Paris Saint-Germain o el Manchester City. La FIFA ha reservado esas fechas porque tienen lugar tras la temporada europea y tradicionalmente han sido meses en el que no se realizan eventos importantes. Claro está, el momento perfecto para arañar audiencia.

Se trata de la última incursión en el fútbol de Apple, pero no la primera. La manzana lleva años con una fijación desmedida por el deporte. Hace dos años firmó un acuerdo de 2.500 millones de dólares para obtener los derechos de la Major League Soccer (MLS). A Tim Cook se le ha metido en la cabeza la idea de ofrecer eventos deportivos con la mejor calidad posible, incluso a través de sus gafas Apple Vision Pro. A principios de este año lanzó la app Apple Sports, que ofrece resultados y estadísticas en tiempo real. Y desde hace unos meses existe el rumor de que también están acercándose a la Premier League, la más famosa de las ligas nacionales europeas.

¿Cómo funcionaría y cuánto podría costar un servicio así? Si tenemos en cuenta lo que han hecho con la liga estadounidense, es probable que Apple nos cobre también una tarifa adicional para ver el Mundial de Clubes. En la actualidad, ofrece un servicio llamado MLS Season Pass, una suscripción adicional que cuenta con varias modalidades de precio. La mensual cuesta 14,99 euros al mes, e incluye todos los partidos de la temporada. Por otro lado, está la propia Apple TV+, que ofrece una variante por 9,99 euros al mes con el MLS Season Pass por 12,99 euros extra.

Reinventarse o morir

El anuncio llega en un momento en el que Apple y la industria del streaming en general está dando algunas señales de agotamiento. Y no sorprende para nada teniendo en cuenta cómo muchas plataformas han perdido millones de suscriptores en los últimos dos años. Ahora, para evitar un colapso aún mayor, sus estrategias han ido dirigidas a capar ese goteo: prohibir las cuentas compartidas o lanzar planes con anuncios. Lo de plantearse emitir deportes en directo no es más que otra estrategia para recuperar la fuerza que han perdido, sobre todo viendo que la competencia ha seguido rutas similares. Hay que subirse al carro.

Todas, desde Apple o Netflix hasta Amazon o Disney+ han intentado posicionarse para rascar suscriptores y levantarle audiencia a las cadenas de televisión tradicionales y no tan tradicionales. Un caso notable es el de empresas como Telefónica, que ha hecho del fútbol un pilar clave de su oferta comercial. Aquí en España, hasta ahora eran Movistar+ y DAZN las que cortaban el bacalao, pero el momento en el que tengan que hacer frente a plataformas como Amazon o Netflix está muy cerca. Básicamente, cuando finalicen los contratos que tienen firmados.

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Amazon Prime Video ya ha comenzado su invasión deportiva, comiendo el terreno que le ha sido posible. En Francia, se hizo con los derechos de emisión de su liga nacional de fútbol. En España, no solo tanteó LaLiga en su momento, sino que se hizo con la emisión de LaLiga SmartBank (segunda división). Y han apostado por muchos otros contenidos en vivo como la edición de Operación Triunfo 2023, el talent show que hasta hace poco se daba sólo por canales en abierto como TVE y Telecinco.

Hacerse con LaLiga es algo con lo que también ha fantaseado Meta, aunque de momento se ha limitado a adquirir derechos de partidos de Primera División para ofrecerlo de forma gratuita a los usuarios en Afganistán, Bangladés, Bután, India, Nepal, Maldivas, Sri Lanka y Pakistán. El problema que han tenido los grandes colosos tech es que la dupla Telefínica-DAZN ya se ha asegurado los derechos hasta la temporada 2027. Ahora mismo quien quiera disfrutar del fútbol no le queda otra que pasar por la caja de la operadora. Pero es solo cuestión de tiempo que eso cambie.

A por la compra de derechos

Fuera de nuestras fronteras, la guerra por el deporte en directo también se está caldeando. Tanto Apple como Amazon se han lanzado a por derechos que hasta ahora estaban en manos de cadenas privadas: La NFL de fútbol americano, la Fórmula 1 o la MBL. Apple anunció que ofrecería dos partidos de béisbol cada viernes. Disney+ está haciendo algo similar con el cricket en el mercado indio, que es un filón de oro por su brutal audiencia.

Y, aunque Netflix se ha centrado más en documentales deportivos, recientemente firmó un acuerdo por valor de nada menos que 5.000 millones de dólares para retransmitir el programa semanal insignia de lucha libre (wrestling), “Raw”. Entre otros movimientos clave, anunció que retransmitiría uno de los combates de boxeo más esperados en el país entre el excampeón de peso pesado Mike Tyson y el influencer Jake Paul en julio; montó un tinglado alucinante con la “Copa Netflix”, donde los pilotos de Fórmula 1 se emparejaron con golfistas de la PGA; y retransmitió un partido de exhibición en Las Vegas entre Rafael Nadal y Carlos Alcaraz.

Esos eventos no llegan por casualidad, sino que combinan de manera inteligente con los documentales que la compañía ya estaba ofreciendo en su catálogo. La Copa Netflix reunió a celebridades de los programas “Drive to Survive” y “Full Swing”, y el Netflix Slam las de “Point Break”. En el caso del boxeo, la tercera temporada de “Untold” va sobre el ascenso de Jake Paul y las controversias de su carrera. Es decir, los eventos en directo que Netflix está retransmitiendo sirven de apoyo a sus documentales y series.

Gabe Spitzer, vicepresidente de deportes de no ficción de Netflix, ha dicho en entrevistas recientes que han hablado ya con todas las ligas y equipos para continuar con esta tendencia. Ese ahínco lo resumía el propio codirector de la plataforma, Ted Sarandos, de manera contundente al ser preguntado por si podían sobrevivir sin el contenido deportivo: "No somos anti-deportes. Somos pro-ganancias". Si el deporte da dinero, ahí estará Netflix. Y si está Netflix, tendrá que estar también Apple, claro.