Nueva norma en Madrid: qué puedes hacer (y no) con bicis y patinetes compartidos

Madrid ha dado luz verde a la nueva ordenanza que pretende establecer las normas para moverse por la capital. Un texto que llevaba meses envuelto en una particular polémica. Y es que no han sido los coches lo que más ha dado que hablar. El punto central del debate eran los patinetes eléctricos, como el de Xiaomi, que se han múltiplicado en las últimas semanas debido a la aparición de empresas como Lime, de alquiler compartido de estos vehículos.

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Guillermo Cid

Aunque la propuesta de Ahora Madrid y de la responsable del departamente de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, era limitar mucho las zonas donde podían circular, un acuerdo de última hora con el PSOE ha conseguido que puedan moverse por todos los carriles bici y las llamadas calles 30.

El 85% de las calles

Esa, la de las calles 30, era una de las principales demandas de los usuarios de estos aparatos, que durante meses habían temido que las restricciones que planteaba el Ayuntamiento dejasen estos aparatos, con los que muchos de ellos se mueven día a día por la ciudad, como "meros juguetes". La inclusión de estas vías -las 'calles 30' son aquellas donde la velocidad máxima es de 30 kilómetros hora- no es baladí ya que con ello los patinetes eléctricos pueden circular por el 85% de las calles de Madrid. Además, una modificación de última hora ha ampliado el rango de los carriles bici por lo que podrán circular, al no limitarse únicamente a aquellos que contaban con una división física entre ese carril y el resto.

No podrán circular por las aceras. Donde si podrán hacerlo es en las pistas bici, por la calzada de calles integradas dentro de las zonas 30, los carriles bici, las zonas 20 y las llamadas 'calles 30'. También podrán circular por aquellas de 'plataforma única', es decir donde carretera y acera están a la misma altura. En todo caso, la prioridad será siempre el peatón, en aquellas zonas donde pueda surgir conflicto. Además,

Los patinetes eléctricos sí podrán circular así por todos los carriles bici, pistas bici, por la calzada de calles integradas dentro de las zonas 30 -que a partir de la aprobación de esta nueva ordenanza de movilidad sostenible serán todas que tengan un carril por sentido o un solo carril, lo que supone prácticamente el 85% por ciento de las vías madrileñas-, respetando la prioridad del peatón, y por las calles en que en todos sus carriles la velocidad máxima de circulación sea de 30 km/h, siempre que la anchura del vehículo lo permita en condiciones de seguridad. También podrán circular por las zonas 20, las de plataforma única donde acera y calzada están a la misma altura.

Por otra parte, cabe mencionar el caso de las bicis y los patinetes que no sean eléctricos. Podrán circular por la acera, siempre que lo hagan a la velocidad del peatón. El casco de seguridad queda como una recomendación en todos los casos y no como una obligación.

Medidas para servicios compartidos

El texto incluye unas medidas genéricas que serán aplicables tanto a flotas de bicis compartidas como de otros vehículos de movilidad urbana. El proyecto incluye una serie de requisitos de seguridad mantenimiento y homologaciones que deberán pasar. Estos "servicios deberán contar con seguros, asegurar la redistribución de los vehículos en las zonas donde estén autorizadas y retirar los que estén en mal estado".

Si no tienen un punto o varios puntos para depositarlo, deberán obtener una licencia urbana. Además no podrán ocupar más del 50% de los aparcamientos públicos para bicis y deberán compartir la geolocalización, esto último aplicable también a servicios de motos compartidas. Vistos los actuales modelos de negocio, Lime o Mobike deberán solicitar estos permisos sí o sí.