Así es el F18 estrellado hoy en Madrid: un caza mítico con una historia negra detrás

El F-18 Hornet siniestrado la mañana de este martes en la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid), formaba parte del escuadrón de más de 36 aviones de este tipo asignados en la base madrileña por el Ejército español. Un número bastante importante de unidades que demuestra la importancia que tiene esta aeronave en la Fuerza Aérea española. En concreto, nuestro país cuenta con 96 EF-18 (la E se pone por ser de propiedad española) de los cuales solo 86 están en servicio (se han perdido, con el de hoy, 9 por accidente y uno fue retirado por daños).

Estos aviones de origen estadounidense son fundamentales en el Ejército español, desde que se empezaron a utilizar en 1986, situándose como el cuarto país con más unidades en sus hangares, solo por detrás de EEUU, Canadá y Australia. Denominados como cazas polivalentes, las aeronaves, ideadas en 1970 por la empresa McDonnell Douglas, suelen destinarse a misiones de interceptación de otras aeronaves y ataque aire-mar, y, en algunos casos, aire-tierra, ofreciendo una gran polivalencia.

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T.F.

En concreto, los escuadrones españoles han jugado un papel importante en misiones como las de Kosovo, Bosnia y, más recientemente, Libia, hace apenas 6 años. Allí, 4 de estos EF-18 actuaron como apoyo a las fuerzas de la coalición internacional.

Aunque la mayoría de nuestros cazas fueron adquiridos entre 1985 y 2000, por lo que podría parecer que son modelos antiguos, la mejora y los cambios de normativa empujaron al ejército a modificarlos. Ahora, tras la remodelación, se han convertido en aeronaves de combate de última generación y cuentan con una vida útil que se extenderá al menos 12 años más.

Fuera de nuestras fronteras, este avión es uno de los más conocidos de la historia reciente. Parte fundamental de la Armada estadounidense por su polivalencia y por su facilidad para ser desplegado desde diferentes portaaviones, además de verse en todas las misiones llevadas a cabo por este país, también ha servido de gran reclamo para películas y series. El F-18 se ha convertido, para muchos, en la imagen icónica del caza moderno por excelencia.

El país norteamericano utiliza estos aviones bimotores con 17 metros de largo, 12 de envergadura, casi 5 de altura, y con un peso máximo al despegue de 23.400 kilos para todas sus misiones. En sus hangares tiene 1200 unidades e incluso la NASA tiene 4 F-18 propios que, tras ser retirados de la Armada, se traspasaron a la Agencia Aeroespacial para que se usasen en diferentes experimentos.

Nueve accidentes, solo en España

España ha perdido tras el accidente de hoy 9 EF-18 por diferentes accidentes. Un número bastante elevado que muestra la peligrosidad que entraña volar cada uno de estos aviones, existiendo casos como el de la base de Gando, en Gran Canaria, donde dos F-18 chocaron en pleno vuelo en 2009 con la suerte de que ambos pilotos pudieron saltar de las aeronaves. El accidente de este martes que ha acabado con la muerte del piloto, el teniente Fernando Pérez Serrano, de 26 años, que iba en su interior se suma a la historia trágica de este modelo.

Lejos de lo que se pueda pensar, el problema de los accidentes de los F18 no es exclusivamente español, sino que en otros países también han registrado varios sucesos de este tipo. Los accidentes más importantes de la historia de este modelo ocurrieron en Estados Unidos, en 2008. Uno se llevó la vida del piloto al chocar contra un F-5 en pleno vuelo y otro mató a 4 personas en San Diego al estrellarse el avión contra una urbanización de la zona.