"Algunos, por ser líderes, suben precios; en ZTE los ajustamos más"

El pasado mes de julio salió al mercado el primer smartphone del mundo con el sistema operativo abierto Firefox OS, que busca competir con Android e iOS. El primer fabricante en apostar por esta plataforma fue ZTE. Y no es casualidad.

La empresa china aspira a convertirse en una de las mayores compañías de telecomunicaciones en Europa y España. Para ello está incrementando su presencia en el mercado de los teléfonos móviles. Un ejemplo lo tenemos en su nueva gama Blade Q que se acaba de unir al Blade III, Blade III Pro, Blade V y Blade G, disponibles en 23 países de la región.

En Teknautas hemos hablado con Aiwu Peng, responsable de ZTE en España y Portugal, quien nos ha hablado de los planes de futuro a corto plazo de la compañía, su posición en nuestro país, los elevados precios de algunos modelos y las tendencias que nos esperan.

Xiaomi, Huawei, ZTE... Cada vez más terminales chinos están acaparando el mercado de la telefonía móvil en Europa. ¿A qué se debe?

Es cierto que han surgido en los últimos años muchas compañías asiáticas de telecomunicaciones principalmente debido a que vivimos en una era de apertura de las compañías al exterior, lo que favorece el desarrollo de negocios a nivel internacional. La tecnología en este momento es una herramienta universal, está en constante cambio y Asia es un mercado con una gran competitividad.

¿Qué posición ocupa actualmente ZTE en relación con sus rivales chinos?

ZTE es una compañía internacional que no solo ofrece teléfonos sino todo tipo de soluciones tecnológicas para usuarios y empresas. También creamos otros productos de consumo como módems o USB de conexión a Internet. Por ello podemos decir que somos la compañía china líder en la mayoría de los servicios que ofrece. Por ejemplo, ZTE presentó el año pasado 3.906 solicitudes de patentes (TCP), y se convirtió así en la primera empresa china en alcanzar la primera posición del ranking dos años consecutivos.

Antes se relacionaba a China con la mala calidad de sus smartphones. Ya no es así. Un ejemplo lo tenemos en Xiaomi, que se ha convertido en la marca de moda hasta el punto de que la llaman el Apple chino. ¿Qué diferencias hay entre ésta y ZTE?

Efectivamente, la percepción está cambiando y hay que seguir esforzándose para que sea así. Hay empresas que se han centrado más en la venta de smartphones y han surgido rápidamente con más o menos fortuna. ZTE por su parte, es una empresa con una base muy sólida que lleva trabajando durante tres décadas en constante evolución y desarrollo. Nuestra diferencia es que nosotros ofrecemos una variedad amplísima de productos en más de 150 países y ponemos un énfasis muy importante en el desarrollo constante de nuestros servicios.

La consultora Gartner sitúa a ZTE como uno de los mayores fabricantes mundiales de smartphones, por detrás de Samsung, Apple, LG y Huawei. ¿Cuál es vuestra estrategia en este sentido de cara a un futuro próximo?

En los últimos años hemos crecido considerablemente en telefonía móvil. La competencia es muy dura y hay mucha igualdad entre el tercer puesto del ranking y el séptimo, de ahí que dependiendo del cuatrimestre tus ventas te posicionan el cuarto, el quinto o sexto. ZTE espera dar un salto importante en los próximos años. El objetivo es posicionarnos en 2015 como la tercera del ranking gracias a nuestros desarrollos y la expansión a nuevos mercados.

¿Y en España?

En España es cierto que todavía no somos una marca consolidada completamente ni reconocida por todos los consumidores, pero esto cambiará próximamente. En los últimos años hemos estado desarrollando una buena base de negocio con empresas españolas para facilitar el crecimiento de la marca cuando llegue el momento. Creemos que éste se acerca y por eso en 2014 vamos a empezar a darnos a conocer haciendo un esfuerzo en aumentar nuestra visibilidad para que el usuario nos empiece a tener más en cuenta y nos relacione con una excelente calidad de los productos.

ZTE lanzó junto con Telefónica el Open, un teléfono basado en el sistema operativo Firefox OS. ¿Cuáles son sus expectativas? ¿Van a seguir apostando por esta plataforma?

Estamos encantados de haber sido la primera marca en apostar a nivel global por el lanzamiento de este nuevo sistema operativo. Seguiremos haciéndolo en 2014, año en el que llegarán nuevos teléfonos. Como uno de los líderes del sector, no podemos hacer otra cosa que abrir las puertas y seguir trabajando con todas las plataformas que podamos.

Una de las deficiencias de este terminal es que no tiene incorporado WhatsApp. ¿Piensan mejorar el ecosistema?

Eso es una cuestión de desarrollo y hay que darle tiempo, no depende solo de nosotros. Pero todo llega.

Móviles gigantes, cámara de fotos, baterías que se cargan de forma inalámbrica, pantallas curvas... ¿cuáles son los componentes en los que apostarán los fabricantes en un futuro?

Hay que ir adaptándose constantemente a las necesidades de los usuarios y no es fácil predecir su comportamiento. Las modas cambian. Hace unos años se llevaban los teléfonos pequeños, ahora por las funcionalidades y necesidades de los usuarios hace que se tienda hacia diferentes tamaños. Pantallas de mejor resolución, dispositivos más avanzados… pero en un futuro puede cambiar todo.

Una de las quejas más asiduas por parte de los consumidores de teléfonos móviles es la poca duración de sus baterías y su poca memoria. ¿Podríamos decir que quien solucione estos problemas se adelantará a sus rivales?

La cantidad elevada de funcionalidades de los terminales hace que la duración de sus baterías se resienta. ZTE, gracias a sus centros de I+D, está investigando nuevas soluciones que pueden ayudar a acatar el problema. Eso no significa que sea la palanca decisiva para el despegue de una compañía, hay que lograr un equilibrio con todo lo que rodea al producto.

¿Y quien logre ofertar un teléfono 'premium' a un precio realmente económico?

Al final todas las compañías quieren abarcar el mercado posicionándose como marca premium con un producto puntero. Las gamas existentes poco a poco se van unificando hacia productos cada vez más avanzados. Los teléfonos premium lógicamente tienen que ser económicos para el usuario, pero rentable para la compañía. Hay algunos de ellos a buen precio. Sin embargo, algunas marcas por ser las líderes lo suben, mientras que otras juegan menos con su valor de marca y lo ajustan más. Al final, el usuario es el que decide.

En los últimos tiempos estamos viendo cómo algunos 'gadgets' como las gafas o el reloj inteligente están ganando relevancia. ¿Sustituirán al 'smartphone' algún día?

Es una cuestión difícil de predecir. Cuando una cosa existe es porque hay una necesidad. En el mundo tecnológico la revolución es constante y posiblemente el terminal que conocemos como smartphone en el futuro se llame de otra manera y tenga otras características. El producto como elemento para comunicarse va a seguir existiendo, la forma y las funcionalidades están en constante evolución y se adaptará a sus necesidades.