Ruth Ugalde
El arquitecto amenaza con ir a los tribunales para frenar la obra. Su argumento, velar por el legado de su padre. Su pecado, haber intentado una reforma mayor
El arquitecto amenaza con ir a los tribunales para frenar la obra. Su argumento, velar por el legado de su padre. Su pecado, haber intentado una reforma mayor
Al final no será un hotel de lujo, sino un flamante edificio de oficinas. La moratoria turística ha dado un giro de 180 grados a uno de los principales rascacielos de Barcelona