El premio que puede tocarte aunque no hayas comprado ningún décimo

Lo más probable es que lleves desde primera hora escuchando cantar números sin parar. A estas alturas ya sabrás si los premios han sido madrugadores o no; las estadísticas tras el número ganador y la historia personal de los afortunados. También conocerás todos esos sitios hasta los que ha viajado cada décimo premiado y constatarás que, un año más, no vas a ser millonario. Seguramente, en ese momento, te salga esa coletilla tan socorrida de: “Bueno, al menos tenemos salud”.

Sin embargo, quizá no seamos del todo conscientes de lo que encierra esa frase. ¿Al menos tenemos salud? Aunque a nadie le amarga un dulce y estas recompensas económicas alegran a cualquiera, sin salud difícilmente se puede disfrutar de la vida.

Bajo esta premisa, Puleva lanza su campaña navideña este 22 de diciembre. La protagonista del anuncio, que simula al espíritu de la Navidad, recrea diversas escenas cotidianas de este día, en el entorno familiar, en la comunidad de vecinos o en el trabajo. Y en todas ellas hay un denominador común: al acabar el sorteo a ninguno le ha tocado la lotería. Por suerte, “al menos todos tienen salud”.

Desde la marca explican que “esta afirmación va más allá de cada persona, ya que engloba a la familia, las amistades, el entorno de trabajo… y cuando se puede decir, es porque realmente uno se puede sentir afortunado”. Por eso, su director de Marketing, Miguel García Cuesta, reconoce que “el anuncio es una llamada a la reflexión, pues en muchas ocasiones olvidamos lo que realmente importa”.

Con esta campaña recién estrenada tanto en TV como en medio digitales, el grupo lácteo, comprometido con el bienestar en todas las etapas de la vida, ha querido mostrar su faceta más emocional. “Trabajamos para ofrecer alimentos que aportan un extra de salud a los consumidores. Porque tener salud no sólo depende de la suerte, sino también de la forma en que cada persona se cuida cada día”, concluye García.