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Gimnasios 'llave en mano'
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LOS CENTROS 24 HORAS/365 DÍAS SE EXTIENDEN POR ESPAÑA

Gimnasios 'llave en mano'

Los gimnasios abiertos 24 horas/365 días al año se extienden por España. El cliente decide cuándo entrena, y entra con su llave... o con la huella dactilar

Foto: (Foto: Ininit Fitness)
(Foto: Ininit Fitness)

Neus Pallarés, administrativa de 46 años, coge la bolsa, se sube a su bici yacude al gimnasio, al lado de casa, en Sant Cugat. Hoy, a por una sesión de spinning. Hasta aquí, todo normal. No tanto si añadimos que esta escena puede darse un domingo por la tarde. Que Neus, a solas en las instalaciones, se conecta al ordenador y asiste a una 'clase virtual'. Que la ve en una pantalla. Y que podría estar dando esa misma clase a las 2 de la madrugada, cualquier día del año, a cualquier hora, porque entra al gimnasio con su propia llave. Una llave con la que, además, puede abrir la puerta de 3.000 gimnasios en todo el globo, desde Nueva York a Chicago, Londres o Singapur.

Su gimnasio no es uno cualquiera: es un centro abierto 24 horas, 365 días, una opción que ha desembarcado en España con buenas perspectivas.El de Neus pertenece a la cadenadefranquicias Anytime Fitness, que nació hace una década en Estados Unidos y hoy está presente en17 países. Con más de dos millones de socios y unos ingresos de 600 millones de dólares en todo el mundo, Anytime cuenta con cuatro centros abiertos en España (tres en Cataluña y uno en Cádiz), que próximamente sumarán ocho.Esta misma semana inaugura otro en Madrid. En total, suma unos 5.000 socios en España.

"Los españoles son líderes en el sector del fitness, con un 17% de usuarios respecto a la población total. Mucha gente dice que es un mercado demasiado saturado, pero nuestro objetivo es precisamente ese 83% restante, que aún no va. Nuestro modelo les atrae porque es pequeño [los centros son de unos 500 metros], no está masificado y sobre todo porque siempre está disponible", explica Rod Hill, director para España de la firma.

La tecnología es la que hace posible esa disponibilidad: la de las puertas electrónicas, la de los sistemas de seguridad y las redes de vigilancia que permiten que no haya nadie más en el club que un usuario, si es de noche, o que este se gestionesólo con el director, un subdirector y tres o cuatro entrenadores... Lo que no quita, según asegura Hill (y corrobora Neus)que el tratamiento sea personalizado: "Es fundamental que a cada persona la vea un entrenador, que tenga su plan de actividad y queel entrenamiento esté enfocado a ella". El precio para los socios depende del gimnasio, pero la base está en unos 39 euros al mes, y la inversión para quien quiere abrir una de las franquicias, según explica Hill, está entre los 150.000 y los 400.000 euros.

Marcos Baroja. (Foto: Infinit Fitness)Una filosofía similar inspiraInfinit Fitness, otra cadena de franquicias, esta con sello español, que se estrenó en 2012 y cuenta más de 2.000 socios y cinco centros en la capital (para otoño contará con otros tantos en Cataluña, Andalucía y Comunidad Valenciana): "Cómodo, cercano, asequible", resume Marcos Baroja, su creador, que identificó la necesidad de un gimnasio abierto todo el díaen sí mismo, por sus propios horarios, estudió la inversión en el sector del fitnessy llegó a la solución tecnológica: "La domótica, los sistemas biométricos, la videovigilancia y la seguridad remotahacen posible que el cliente entrene con total seguridad y que nosotros ganemos dinero". 80.000 euros de facturación el pasado mes, que espera que sumen un millón a final de año.

En el caso de Infinit, el acceso se hace con un sistema de huella dactilary la tarifa básica ronda un euro al día. "¿Qué gente acude? Intentas buscar un perfil, más allá de que la mayoría son hombres, y te vuelves loco", ríe Baroja. Pero da ejemplos: estudiantes, profesionales que trabajan con América, pilotos, gente a la que no le gusta que la vean entrenado... O, simplemente, como en el caso de Neus, que valoren la posibilidad de ir al gimnasio"todos los días de la semana, aunque sea domingo".

Neus Pallarés, administrativa de 46 años, coge la bolsa, se sube a su bici yacude al gimnasio, al lado de casa, en Sant Cugat. Hoy, a por una sesión de spinning. Hasta aquí, todo normal. No tanto si añadimos que esta escena puede darse un domingo por la tarde. Que Neus, a solas en las instalaciones, se conecta al ordenador y asiste a una 'clase virtual'. Que la ve en una pantalla. Y que podría estar dando esa misma clase a las 2 de la madrugada, cualquier día del año, a cualquier hora, porque entra al gimnasio con su propia llave. Una llave con la que, además, puede abrir la puerta de 3.000 gimnasios en todo el globo, desde Nueva York a Chicago, Londres o Singapur.

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