EEUU aprueba el envío urgente de materiales para la fabricación de vacunas a India

La India sigue batiendo nuevos récords diarios de coronavirus. Solo en las últimas 24 añadió 352.991 nuevos contagios de coronavirus y 2.812 fallecimientos, las cifras más altas registradas desde el inicio de la pandemia y que alzan el cómputo total a los 17 millones de infecciones. La nueva ola ha tomado por asalto al sistema sanitario del país, en situación crítica por la falta de camas y ahogado por el desabastecimiento de oxígeno hospitalario.

En medio del clamor global por el país que se ha convertido en el nuevo epicentro de la pandemia de coronavirus, Estados Unidos ha anunciado el envío "inmediato" de recursos médicos y materias primas para fabricar vacunas a la India, para hacer frente de forma "urgente" a la grave crisis clínica que atraviesa el país asiático.

TE PUEDE INTERESAR

Indios en la UCI, británicos en las terrazas: así entramos en el mundo a dos velocidades

E. Andrés Pretel A. Alamillos

Críticas al 'proteccionismo' de EEUU con las vacunas

Entre crecientes críticas por el proteccionismo en cuanto a su estrategia de vacunación, que ha prohibido la exportación de vacunas fuera de Estados Unidos, la Casa Blanca ha movido ficha para ofrecer su ayuda a India, aunque todavía sin enviar el excedente de vacunas. "Estados Unidos está trabajando contra reloj para entregar recursos y suministros" a la India, ha afirmado una portavoz del asesor de seguridad nacional. En concreto, EEUU pondrá "inmediatamente a disposición de la India" materias primas que se requieren "urgentemente para fabricar la vacuna Covishield", producida por el Serum Institute de India con tecnología de Oxford y AstraZeneca.

India es una gigantesca potencia farmacéutica que produce el 20% de los medicamentos genéricos y hasta el 62% de las vacunas del mundo, pero, según ha denunciado el CEO del Serum Institute, Adar Poonawalla, mucho de las materias primas para hacer frente a la fabricación masiva de vacunas está bloqueado en EEUU, que ha cerrado sus exportaciones a este tipo de materiales, además de las vacunas ya producidas por otros grandes gigantes farmacéuticos estadounidenses. Hasta el momento, India ha distribuido más de 132 millones de vacunas a su población, pero la tasa relativa es todavía modesta, del 8% de la población.

TE PUEDE INTERESAR

La paradoja del gran país productor de vacunas que es la nueva erupción del covid

A. Alamillos

Pero, mientras llegan las vacunas, el sistema de salud indio se enfrenta a una crisis como nunca se había visto en la pandemia. Tras esquivar una primera ola con uno de los confinamientos más estrictos del mundo, que sacudió su economía hasta la extenuación, esta segunda ola está marcando récords diarios y agotando al sistema sanitario.

Sin camas, sin oxígeno

La India continúa siendo el país con los peores datos de contagios en el mundo, que representan más de un tercio del total global de infecciones confirmadas el domingo por la Organización Mundial de la Salud (OMS), 830.806 nuevos contagios de covid-19. La subida de contagios ha supuesto un aumento significativo en el número de hospitalizaciones, con más del 16% de casos activos del total de 17,3 millones registrados hasta el momento, lo que ha llevado a una situación crítica en los hospitales de las regiones más afectadas y la escasez de recursos para tratar la enfermedad.

Nueva Delhi, confinada desde hace una semana, es una de las regiones más afectadas, con serias limitaciones hospitalarias, sobre todo de oxígeno médico, lo que ha dejado en mínimos los niveles del suministro vital. Los hospitales de Delhi informan de un creciente desabastecimiento de oxígeno, y el Gobierno de Nadendra Modi ha admitido que se están enfrentando a problemas de suministro generalizados en las regiones del país.

Una corte judicial de Nueva Delhi ha ordenado al Gobierno que empiece a derivar oxígeno de uso industrial a los hospitales. "No se puede salvar a la gente de morir porque no hay oxígeno. Pedir, tomar prestado o robar, esto es una emergencia nacional", ha decretado el juzgado, en respuesta a una petición de un hospital de Nueva Delhi para que intervinieran, según recoge la agencia AP. No solo faltan el oxígeno y los medicamentos, sino también las camas. El caso más extremo ha sido el del Lok Nayak Jai Prakash Narayan (LNJP), una instalación diseñada para el tratamiento exclusivo del covid-19 con 1.500 camas, que ha denunciado que está teniendo que asignar un colchón por cada dos pacientes. En las 54 camas de UCI estarían destinando a 300 personas con coronavirus en estado crítico.