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Un submarino chino llega al lugar más oscuro y profundo de la Tierra
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EN LAS FOSAS DE LAS MARIANAS

Un submarino chino llega al lugar más oscuro y profundo de la Tierra

Un sumergible tripulado, de nombre Fendouzhe, ha alcanzado los 10.909 metros en la Fosa de las Marianas, convirtiéndose en una de las escasas misiones que han logrado este hito

Foto: Ilustración del submarino chino Fendouzhe. (CC/YouTube)
Ilustración del submarino chino Fendouzhe. (CC/YouTube)

China continúa, semana tras semana, haciendo gala de su poderío tecnológico. El gigante asiático puede presumir de ser una de las grandes potencias en la era de las telecomunicaciones: no solo es una de las referencias en el mundo de la telefonía móvil sino que ordenadores, inteligencia artificial o robótica, entre otras muchas ramas, son de su absoluto dominio. Pero van mucho más allá: quieren dominar cielo y tierra, situación que se confirma con los pasos dados en las últimas fechas.

Hace escasas horas, China confirmaba la llegada de su misión Chang’e 5 a la Luna. Se trata de la primera misión lunar en los últimos cincuenta años, cuyo objetivo es conseguir tomar muestras de nuestro satélite y traerlos de vuelta para poder analizarlos minuciosamente. Pero, ahora, también acaban de finalizar una misión muy diferente: han alcanzado una de las mayores profundidades a la que nunca antes haya llegado el ser humano en la Tierra: casi 11 kilómetros de distancia.

Foto: La táctica de China para esconder sus submarinos de combate: cuevas submarinas secretas. (Reuters)

Según informa la agencia estatal 'Xinhua', una misión china acaba de conseguir este hito histórico. Ha sido el sumergible tripulado Fendouzhe el que ha logrado llegar a los 10.909 metros, en la Fosa de las Marianas, en el océano Pacífico. Así, la nave china ha conseguido llegar a la zona más profunda y oscura del planeta por primera vez en su historia. Durante varios meses, la expedición asiática ha realizado varias inmersiones, hasta conseguir alcanzar el punto más recóndito de la Tierra.

La misión comenzó el pasado 10 de octubre y, desde entonces y hasta la fecha, han realizado un total de 13 inmersiones en la Fosa de las Marianas. Según los datos ofrecidos por 'China Daily', ocho de esas inmersiones superaron la barrera de los 10.000 metros, para lograr su récord el 10 de noviembre: solo un mes después del inicio de su plande trabajo, el Fendouzhe conseguía llegar hasta la zona más profunda del planeta, logrando uno de los mejores registros de todos los tiempos.

Xi Jinping, presidente de China, se mostró "orgulloso" del logro conseguido, además de ofrecer su felicitación pública a toda la tripulación que ha hecho posible este hito. No en vano, es una de las inmersiones más profundas de todos los tiempos, superando a aquella mítica que hizo James Cameron en 2012, donde llegó a alcanzar los 10.908 metros. Sin embargo, se quedó a tres metros de la inmersión Suiza de 1960 (12.912 metros) y a 23 metros del récord mundial.

A día de hoy, ese récord continúa en propiedad del empresario norteamericano Victor Vescovo desde el 13 de mayo de 2019. En aquella fecha, el explorador consiguió alcanzar la profundidad de 10.927 metros, la mayor nunca antes alcanzada por el ser humano. Desde ese momento, China se planteó dar inicio a una misión para conseguir un nuevo récord: un año y medio más tarde, China casi lo ha igualado y su plan no es otro más que conseguir superarlo.

Los reyes de los mares 'profundos'

En las últimas décadas, China busca convertirse en una referencia en los océanos, especialmente en grandes profundidades. De hecho, son uno de los cuatro países del mundo que pueden presumir de contar con submarinos tripulados capaces de desplazarse a 3.500 metros por debajo del nivel del mar con absoluta normalidad. Este tipo de tecnología solo la poseen el país asiático, Estados Unidos, Francia, Rusia y Japón. E, incluso, cuenta con cuevas submarinas para esconder su tecnología.

De hecho, hace escasas semanas un satélite de Planet Labs fue capaz de captar el momento en el que un submarino chino se introducía en el interior de la tierra, lo que claramente confirma almacenes subterráneos donde se protege este tipo de naves de ojos ajenos. Hace unos años se descubrió que China ocultaba sus misiles balísticos intercontinentales bajo tierra, en unas instalaciones conocidas como la Gran Muralla China subterránea. China busca ser el rey de los mares... y del cielo.

China continúa, semana tras semana, haciendo gala de su poderío tecnológico. El gigante asiático puede presumir de ser una de las grandes potencias en la era de las telecomunicaciones: no solo es una de las referencias en el mundo de la telefonía móvil sino que ordenadores, inteligencia artificial o robótica, entre otras muchas ramas, son de su absoluto dominio. Pero van mucho más allá: quieren dominar cielo y tierra, situación que se confirma con los pasos dados en las últimas fechas.

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