Es noticia
Israel se asoma de nuevo al abismo del covid: "Hemos perdido el control de la pandemia"
  1. Mundo
Llega a los 1.000 contagios diarios

Israel se asoma de nuevo al abismo del covid: "Hemos perdido el control de la pandemia"

Con cientos de contagios diarios, Israel se enfrenta a un fuerte rebrote del coronavirus tras dos meses de normalidad y una desescalada "demasiado rápida"

Foto: Tel Aviv. (Reuters)
Tel Aviv. (Reuters)

Israel logró superar la primera oleada del coronavirus casi sin despeinarse (apenas 300 fallecidos), pero con mucha mano dura, cuarentenas tempranas, 'apps' y medidas drásticas. Sin embargo, la segunda oleada está ya tocando a la puerta, y con mayor fuerza que la de marzo-abril. Esta semana, Israel superó el récord de 1.000 nuevos casos diarios, en un país de algo menos de nueve millones de habitantes, y las autoridades sanitarias temen que el país esté al borde del desastre epidemiológico si no se logra controlar la expansión de la enfermedad.

"Israel ha perdido el control de la pandemia", ha afirmado el jefe científico del panel asesor que ayudó a elaborar la respuesta del Gobierno israelí a la primera oleada del coronavirus, Eli Waxman, en una entrevista con el Canal 12. "En la situación actual en la que nos encontramos, con 1.000 nuevos infectados diariamente, ya no somos capaces de cortar la cadena de infección", y advierte: "Nos enfrentamos a la mayor crisis civil de Israel".

Foto: Un operario desinfecta el Muro de las Lamentaciones, en Jerusalén. (Reuters)

En apenas unos días, Israel ha pasado de menos de un centenar de casos diarios que se registraban en mayo a alcanzar un récord de 1.138 nuevos contagios el pasado 2 de julio, una cifra a la que no se había llegado ni en lo peor del anterior pico de la pandemia. Tras la rápida expansión de la enfermedad, constante y siempre en torno a los 700-800 nuevos casos diarios desde la segunda quincena de junio, el país supera ya los 30.000 infectados. La mitad son contagios activos. Han fallecido 332 personas.

Reapertura demasiado rápida

Para Israel, esta segunda bofetada del virus es una vuelta a la pesadilla y un fuerte toque de atención, tras dos meses de relativa normalidad en los que el coronavirus parecía ya algo del pasado. A finales de febrero, cuando apenas empezaban a detectarse los primeros casos en el país, el Gobierno se apresuró a tomar medidas severas para controlar la propagación de la pandemia, desde cuarentenas obligatorias para turistas al cierre de escuelas y universidades. El 16 marzo, con apenas 277 contagios y ninguna muerte, Israel ya había cerrado bares, restaurantes, centros comerciales, hoteles y otros comercios no esenciales, y había limitado los encuentros públicos a un máximo de 10 personas. Las medidas fueron radicales y drásticas, pero parecieron funcionar: el 19 de abril, cuando el país registraba poco más de 13.000 infectados, Israel ya había dado por terminada la peor fase de la pandemia y se apresuraba a abrirse, una reapertura que ahora se admite demasiado aventurada.

"Abrimos demasiado rápido", ha reconocido este lunes el vicedirector del Ministerio de Sanidad, Itamar Grotto, en una entrevista con la radio del Ejército recogida por EFE. Y lo cierto es que la normalidad regresó rápidamente a las calles de Tel Aviv y otras ciudades de Israel. Las mascarillas empiezan a usarse cada vez menos, especialmente por el sofocante calor del verano israelí, y los bares y restaurantes han vuelto a su actividad habitual. En el Ejecutivo, la prioridad era cuadrar las alianzas políticas para formar por fin un nuevo Gobierno, tras tres visitas a las urnas (una de ellas en plena pandemia, el 2 de marzo) y avanzar en sus planes de la anexión de Cisjordania gracias al empuje del 'Acuerdo del Siglo' presentado por EEUU.

placeholder Miembros de las fuerzas de seguridad israelíes, en Jerusalén este 6 de julio. (Reuters)
Miembros de las fuerzas de seguridad israelíes, en Jerusalén este 6 de julio. (Reuters)

En un contexto de lucha contra la pandemia en el día a día, la mayoría de los países se están volcando especialmente en el rastreo de contactos, es decir, en la búsqueda de la cadena de infección del virus para lograr, mediante cuarentenas de las personas que han estado en contacto con infectados, cortar la cadena de transmisión e impedir su expansión sin control. Un punto que, sin embargo, parece ya lejos de las posibilidades prácticas de Israel, según lamenta Waxman. "En términos de la cantidad de infectados y el hecho de que están diseminados por todo el país, no conocemos los sitios de infección para la mayoría de los infectados, por lo que no somos capaces de controlar los brotes", apunta.

Vuelven las restricciones

"Dado que hemos perdido el control de la pandemia, no podemos pararla excepto a través de medidas de distancia social. Necesitamos inmediatamente órdenes de distanciamiento social para minimizar los mayores riesgos", sostiene el científico, líder del comité de expertos.

Y el Gobierno ya ha reaccionado. Este mismo lunes, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha endurecido aún más las restricciones por el rebrote de coronavirus y ordenó el cierre de bares, gimnasios, piscinas, discotecas y salas de eventos culturales.

Estas restricciones se unen a las ya ordenadas el jueves pasado (cuando el país rompió su récord de nuevos casos diarios de covid-19), cuando quedaron prohibidas reuniones de más de veinte personas en espacios cerrados, incluidos hogares y sinagogas. Las Fuerzas Armadas israelíes ya han anunciado que reasignarán recursos a la lucha contra el covid, incluidos unos 300 soldados de las IDF, que serán dedicados al rastreo de contactos, según ha anunciado un portavoz de las IDF, Hidai Zilberman. El Ministerio de Sanidad ha pedido a los centros hospitalarios que preparen la reapertura inmediata de los departamentos especializados en el virus.

"Si no actuamos ahora, tendremos cientos o quizás en torno a mil casos graves en las próximas semanas, lo que paralizará nuestro sistema [sanitario]", ha alertado este lunes el primer ministro, Benjamín Netanyahu. Las autoridades israelíes temen que regresar al confinamiento termine por sacudir aún más la ya muy afectada economía del país.

Israel logró superar la primera oleada del coronavirus casi sin despeinarse (apenas 300 fallecidos), pero con mucha mano dura, cuarentenas tempranas, 'apps' y medidas drásticas. Sin embargo, la segunda oleada está ya tocando a la puerta, y con mayor fuerza que la de marzo-abril. Esta semana, Israel superó el récord de 1.000 nuevos casos diarios, en un país de algo menos de nueve millones de habitantes, y las autoridades sanitarias temen que el país esté al borde del desastre epidemiológico si no se logra controlar la expansión de la enfermedad.

Israel
El redactor recomienda