El 'Aquarius', obligado a dejar de operar en el mar: "Significa más muertes sin testigos"

Es el fin de la larga travesía del 'Aquarius': el barco fletado por las ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) y SOS Méditerránee, que ha asistido desde el inicio de sus operaciones a más de 30.000 personas, ya no podrá seguir rescatando en el Mediterráneo. Las dos organizaciones que están detrás de la embarcación que ha llevado a cabo cientos de operaciones de búsqueda en los últimos años han tenido que anunciar el fin de sus trabajos en este barco, que desde hace dos meses se encuentra atracado y bloqueado en el puerto de Marsella. El 'Aquarius' fue uno de los dolores de cabeza del recién llegado a la Moncloa Pedro Sánchez, quien anunció que acogería "por razones humanitarias" el barco después de haber asistido a 629 personas durante seis rescates a lo largo de una noche el pasado mes de junio; dos meses después, España decía que no era "el puerto más seguro" e impedía el desembarco de otros 141 inmigrantes rescatados frente a la costa de Libia.

El 'Aquarius' tuvo que hacer una escala obligada en el puerto francés en el que se encuentra actualmente, para obtener un nuevo pabellón que les permitiera renaudar los rescates en el Mediterráneo central. A Marsella llegaron tras un rescate de 58 personas, y deste entonces el 'Aquarius' no ha podido salvar a más. "Es un día triste", asegura la directora general de la ONG, Nelke Manders, que culpa directamente a Europa de no haber sido capaz "de proporcionar capacidad de búsqueda y rescate" y de haber saboteado y obstaculizado a estas "organizaciones que brindan asistencia a las personas en peligro".

"El fin del 'Aquarius' significa más muertes en el mar y más muertes innecesarias de las que nadie será testigo", ha añadido Manders. Este barco comenzó a funcionar como lo que ha sido hasta ahora en 2009, pero su vida en el mar nació mucho antes. Hasta entonces, había sido utilizado como buque de guardia en el Atlántico norte. Ya como barco de rescate, la tripulación del 'Aquarius' estaba conformada por 32 personas, entre personal náutico y técnico (11) y de rescate, tanto de MSF (8) como de SOS Méditerranée (13). Con 77 metros de eslora, el barco tiene una capacidad de recuperación de entre 550 y 750 presonas, aunque esta última cifra es la máxima en situaciones de emergencia.

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Efe

MSF ha explicado que en los últimos 18 meses los ataques de los estados de la Unión Europea a las operaciones de búsqueda y rescate se han basado en tácticas utilizadas por algunas de las naciones más represivas del mundo". Solo a lo largo de 2018, al 'Aquarius' "se le ha arrebatado en dos ocasiones el pabellón" e incluso se enfrenta a denuncias de actividad criminal, después de haber sido acusados en varias ocasiones de tráfico de inmigrantes. No son los únicos: también en 2018, a principios de año, la ONG española Proactiva Open Arms fue denunciada por el Gobierno italiano por "fomentar la inmigración ilegal". "Nos acusan de traficar con personas, cuando son ellos los que nos dicen dónde hay que trasladarlos", lamentaba Gerard Canals, director de la misión del Mediterráneo central de Open Arms.

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En medio de lo que MSF ha calificado de "campañas de desprestigio y maniobras para minar el derecho internacional", a muchas personas rescatadas en el mar se les ha negado el acceso a puertos seguros y se les ha rechazado la asistencia de otros barcos, dejándolas varadas en alta mar durante semanas. Ahora, con la salida del 'Aquarius' del Mediterráneo estas personas quedan a la deriva sin testigos que puedan ayudarlos.

Más de 2.000 muertos en 2018

Este fin de la travesía del 'Aquarius' llega, además, en un momento crítico en cuanto a cifras de víctimas: según MSF, este año habría muerto 2.133 personas en el Mediterráneo. Según el último informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), publicado a finales del mes pasado, a 25 de noviembre habían perdido la vida en el mar 2.119 personas, muchas menos que en el mismo periodo del año anterior, cuando fallecieron 3.079.

Junto a otros barcos de las organizaciones, como son el 'Bourbon Argos', el 'Dignity', 'Prudence' o 'Phoenix', MSF ha participado en el rescate o asistencia de más de 80.000 personas desde 2015 en el Mediterráneo. Y aun así, sostienen, a pesar de sus esfuerzos y de los de otras organizaciones, "hoy no hay un mecanismo europeo específico de rescate en el Mediterráneo central". "Mientras se sigan ahogando y haya personas atrapadas en Libia, MSF continuará buscando fórmulas para brindarles atención médica y humanitaria", asegura Karline Kleijer, la responsable de emergencias de la ONG, quien culpa a Europa de estar "apoyando directamente las devoluciones forzadas mientras se adjudica a sí misma una exitosa política de migración".

Reacción de la ONU

Después de conocese la noticia, Naciones Unidas ha lamentado la decisión de las ONG de dejar de operar con el 'Aquarius', y han pedido a los países involucrados que tomen medidas para garantizar estas labores de salvamento. "La capacidad de rescate debería reforzarse en lugar de disminuir", ha señalado la portavoz de la Agencia de Naciones Unida para los Refugiados (ACNUR), Shabia Mantoo. En rueda de prensa, Mantoo agregó que la ACNUR "urge" a los países a que ofrezcan soluciones "predecibles" para el desembarco de personas rescatadas en el Mediterráneo central.

"Salvar vidas debe ser la preocupación esencial", ha recalcado. "Los arreglos para dar asistencia a los migrantes no deben ser criminalizados y la reducción de las tarea de búsqueda y rescate por parte de organizaciones humanitarias está resultando en el aumento de su vulnerabilidad", lamentó una portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos.