La foto de la vergüenza: María, la madre que huía con sus hijos de los gases de Trump
Se ha convertido en símbolo del sufrimiento de los miles de inmigrantes que huyen de sus países para buscar un futuro mejor en Estados Unidos. A veces una imagen vale más que mil palabras
La crisis de la caravana de migrantes en la frontera de Estados Unidos con México está dejando muchas imágenes, pero una destaca sobre el resto. En ella aparece una madre cogiendo de la mano a dos de sus hijas huyendo despavoridas después de que varios agentes fronterizos de Estados Unidos lanzaran botes de gases lacrimógenos contra los inmigrantes que intentaba cruzar la frontera.
La fotografía fue tomada este domingo en Tijuana y en ella aparece María Meza, una hondureña de 35 años, con tres de sus cinco hijos. Su gesto y cómo agarra de la mano a sus hijas corriendo en dirección contaria al humo de los gases ha copado multitud de portadas y se ha convertido en símbolo del sufrimiento de los miles de inmigrantes que huyen de sus países para buscar un futuro mejor en Estados Unidos.
"Pensé que mis hijas iban a morir allí por el gas que respirábamos. Las cogí y corrí con ellas. Me sentía triste, con miedo...", ha relatado Mesa al diario 'Infobae'. En la imagen se ve cómo las pequeñas, las gemelas de tres años Saoira y Cheilli, corren agarradas de su madre. Una de ellas va descalza y otra pierde una de las chanclas en la huida. Junto a ellas, Jaimie, de 13 años.
El fotógrafo que inmortalizó el momento: "Las vi huyendo, gritando... jamás lo olvidaré"
María llegó a Tijuana la semana pasada en la primera caravana de migrantes. Ese domingo, ella y varios de sus compañeros de viaje decidieron acercarse a la frontera con Estados Unidos para solicitar asilo, pero fueron bloqueados por la policía mexicana. Tras protestar durante varios minutos, los ánimos se caldearon y fue entonces cuando un nutrido grupo de migrantes intentó cruzar la valla fronteriza, lo que activó los disparos de botes de gases lacrimógenos por parte de los militares estadounidenses.
Esto provocó una estampida de migrantes en la que decenas de ellos huían sin dirección, entre los que estaba María y carios de sus hijos. "Salimos corriendo y hasta nos caímos al suelo. Intenté subir una de las cuestas pero era imposible", asegura, remarcando que apenas podía por por el humo y la irritación de los ojos. "Alguien me cogió la mano y me ayudó a subir", continúa.
El fotógrafo que inmortalizó este momento, Kyung-Hoon, ha contado a NBC News que "jamás" olvidará esta imagen. "Las vi huyendo, gritando... no lo olvidaré", ha explicado.
La crisis de la caravana de migrantes en la frontera de Estados Unidos con México está dejando muchas imágenes, pero una destaca sobre el resto. En ella aparece una madre cogiendo de la mano a dos de sus hijas huyendo despavoridas después de que varios agentes fronterizos de Estados Unidos lanzaran botes de gases lacrimógenos contra los inmigrantes que intentaba cruzar la frontera.