Asesinado a tiros el embajador ruso en Turquía al grito de "venganza por Alepo"

Un policía turco asesinó este lunes al embajador de Rusia, Andrei Karlov, mientras pronunciaba un discurso en Ankara durante la inauguración de una exposición fotográfica dedicada a su país. Karlov, que iba sin escolta, murió poco después de ser trasladado a un hospital en estado grave tras recibir varios disparos por la espalda. Cuando el embajador yacía inmóvil en el suelo, el atacante gritó en turco: "No se olviden de Alepo. No se olviden de Siria. (...) Todos aquellos que compartan esta opresión y tortura, pagarán por ello". Más tarde, fue abatido por las fuerzas de seguridad en el interior del edificio.

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La muerte de Karlov, el primer embajador asesinado en la historia de Turquía, se produce en plena negociación sobre Siria y cuando Moscú y Ankara habían aumentado su cooperación en el último alto el fuego. Rusia, el mayor aliado militar del Gobierno de Bashar al Asad, acoge este martes en Moscú un encuentro con Turquía e Irán, otro actor clave en esta guerra. "El crimen es, sin lugar a dudas, una provocación destinada a abortar la normalización de las relaciones ruso-turcas y torpedear el proceso de paz en Siria", dijo Vladimir Putin tras el asesinato de Karlov. Su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, no tardó en responder: "Está cooperación va a continuar con determinación. El ataque no ha sido solo contra el embajador ruso, sino contra la nación turca".

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El atacante —identificado como Mevlut Mert Altintas, nacido en Söke en 1994 y graduado en la Academia de Policía de Esmirna— llevaba dos años y medio en las fuerzas antidisturbios. Accedió con una identificación de policía al Centro de Arte Contemporáneo donde se inauguraba la exposición 'Rusia, a través de los ojos turcos'. Iba vestido como un guardia de seguridad, con traje oscuro, camisa blanca y corbata negra. En los vídeos del ataque, puede verse que permaneció de pie y en calma detrás de Karlov antes de sacar una pistola y dispararle. Después dijo actuar en represalia por la campaña de bombardeos de la aviación rusa contra los barrios controlados por los rebeldes en la segunda ciudad de Siria durante los últimos meses.

Este martes, las fuerzas de seguridad turcas detuvieron a seis personas en relación con el asesinato, según informó la emisora 'NTV'. El padre, la madre y la hermana del supuesto asesino fueron detenidos en Soka. Mientras tanto, el periódico opositor 'Hürriyet' informó de que otra de las personas detenidas es el compañero de piso del asesino en Ankara. Según medios locales, la policía está investigando el vínculo entre el asesino y la organización del clérigo musulmán Fethullah Gülen, a quién Ankara acusa de estar detrás de la intentona golpista del pasado 15 de julio.

Moscú y Ankara han acordado una investigación conjunta sobre lo ocurrido. "Debemos saber quién está detrás del asesino", dijo Putin, quien añadió que "la respuesta [al ataque] será el reforzamiento de la lucha contra el terrorismo. Lo sentirán en sus propias carnes". Karlov había jugado un papel importante en las negociaciones de la semana pasada entre Rusia y Turquía para cerrar un acuerdo sobre la evacuación del este de Alepo. También ejerció como conducto central en la reconciliación entre Moscú y Ankara tras más de medio año de estancamiento en sus relaciones por el derribo de un cazabombardero ruso en la frontera con Siria.

Testigos del atentado coincidieron en señalar que el atacante actuaba solo. "Llevaba un traje negro con camisa blanca, y estaba solo. No creo que hubiera nadie más. Sí, lo hizo solo", dijo a la cadena CNNTürk una mujer que se hallaba en la sala de exposiciones. Un periodista del diario 'Hürriyet', Hasim Kiliç, que se encontraba cubriendo el evento, explicó que el atacante disparó al aire para provocar la estampida del público y después atacó directamente a Karlov. De acuerdo con ese diario, posteriormente gritó: "No tendréis seguridad hasta que nuestros pueblos estén a salvo. ¡No me sacaréis vivo de aquí!".

El Consejo de Seguridad de la ONU condenó el ataque, que definió como un "atentado terrorista". También lo hizo el presidente electo de EEUU, Donald Trump -que ofreció sus condolencias a la familia del "asesinado por un terrorista radical islámico"- .y el actual Gobierno. En un breve comentario en su cuenta de la red social Twitter, el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, se apresuró poco después del ataque a reprobar la acción de un hombre armado. "Condenamos este acto de violencia, independientemente de su origen. Nuestros pensamientos y rezos están con las víctimas y sus familiares", afirmó Kirby.

"Estamos dispuestos a ofrecer asistencia a Rusia y Turquía mientras investigan este despreciable ataque, que también fue un asalto al derecho de todos los diplomáticos a avanzar y representar con seguridad y seguridad a sus naciones en todo el mundo", agregó el secretario de Estado John Kerry en una breve nota.

También la Unión Europea, Naciones Unidas y Reino Unido condenaron el atentado. "Está claro que condenamos el ataque contra el embajador ruso en Turquía. No puede haber justificación a un ataque contra un diplomático", dijo Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon. Londres lo calificó de "cobarde" y "despreciable".