Los islamistas paralizan Pakistán en una huelga contra Musharraf
Una huelga convocada por la oposición paralizó este lunes Karachi y otras ciudades importantes de Pakistán, después de que casi 40 personas murieran y unas 150
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Una huelga convocada por la oposición paralizó este lunes Karachi y otras ciudades importantes de Pakistán, después de que casi 40 personas murieran y unas 150 resultaran heridas en la peor demostración de violencia política callejera en dos décadas.
Las autoridades prohibieron manifestaciones en Karachi y declararon fiesta en la provincia de Sindh, tras la violencia registrada el fin de semana en la ciudad, que comenzó cuando el suspendido presidente del Tribunal Supremo intentó reunirse con sus partidarios.
El jefe de policía de la ciudad, Azhar Faruqi, dijo que las fuerzas de seguridad habían reforzado las patrullas y que la situación estaba bajo control. El lunes no hubo enfrentamientos, aunque en la ciudad reinaba una tensa calma.
"La ciudad está totalmente paralizada. Las tiendas están cerradas y hay muy poco transporte público en las calles. La gente está asustada", declaró Faruqi a Reuters.
Karachi, una historia sangrienta
El Gobierno ha autorizado a las fuerzas paramilitares a disparar contra cualquiera involucrado en la violencia en Karachi, la mayor ciudad de Pakistán, que posee una historia de sangrientas disputas entre facciones étnicas.
El intento gubernamental de destituir el 9 de marzo al presidente de la Corte Suprema, Iftikhar Chaudhry, por acusaciones no especificadas de conducta impropia han enfurecido al poder judicial y la oposición.
La crisis judicial se ha convertido rápidamente en una campaña contra el presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, y en el escollo más importante para la autoridad del presidente, quien también es el jefe del Ejército, desde que llegó al poder por la vía militar en 1999.
La huelga de la oposición, convocada para protestar contra la violencia, dejó tiendas y mercados cerrados en todas las ciudades importantes del país incluyendo Karachi, Lahore, Peshawar, Rawalpindi y Quetta.
La oposición ha responsabilizado al Gobierno y al pro gubernamental Movimiento Muttahida Qaumi, que controla Karachi, por la violencia.
Una huelga convocada por la oposición paralizó este lunes Karachi y otras ciudades importantes de Pakistán, después de que casi 40 personas murieran y unas 150 resultaran heridas en la peor demostración de violencia política callejera en dos décadas.