El Mokka completa la gama de tres todocamino de Opel

C. Cancela

Pensado también para el campo.
Es un coche pensado para la ciudad por sus dimensiones, pero también se mueve bien por carretera y en zonas más rurales y camperas gracias a su tracción 4x4 opcional.

Muy bien terminado.
Es un coche con una buena calidad de terminación, sobre todo si es el tope de gama e incorpora tapicería de piel, como nuestra unidad de pruebas.

Pensado para la aventura diaria.
Básicamente es un coche para la aventura diaria del tráfico y los atascos, sobre todo con el cambio automático, pero también acepta alguna aventura más campera los fines de semana.

Cuadro de instrumentos completo y muy claro.
El cuadro de instrumentos destaca por su gran visibilidad, es muy sencillo de entender y ofrece suficiente informaciòn.

El primer todocamino nuevo de Opel.
Opel prepara una gama de tres todocamino que estará disponible desde principios del año 2018. Primero ha sido el Mokka X y en junio llega el Crossland X, pero para el Granland habrá que esperar.

Cambio automático diferente.
El cambio automático es de convertidor de par y ofrece seis marchas, pero no tiene levas en el volante y el manejo en modo seudo manual es un poco complicado.

Motores potentes.
Una de las señas de identidad en este modelo es que sus motores son muy potentes, con tres opciones, 140 y 152 en gasolina y 136 caballos en diesel.

Maletero razonable.
Con sus 356 litros de capacidad del maletero se mueve en la media del segmento, no destaca por su volumen pero sus formas son muy regulares y fáciles de aprovechar.

Plazas traseras algo justas.
Hay que tener en cuenta que solo mide 4,27 metros de longitud total y por ello el espacio para las piernas en las plazas traseras es algo justo, lògico para su tamaño.

Dimensiones contenidas.
Con sus pequeñas dimensiones y sus potentes motores, el Mokka X se mueve con una gra agilidad sea cual el terreno por el que circulemos.

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19/05/2017 05:00

Los vehículos todocamino tienen cada día más peso en el mercado europeo y español. En España, uno de cada tres coches vendidos es de este segmento, y por eso todos los fabricantes quieren tres modelos diferentes para ofrecer en su gama SUV.

Por un lado está el modelo pequeño, basado en un vehículo del segmento B, como es el caso del Opel Corsa y del Mokka X. Por encima, los fabricantes ofrecen un modelo basado en un compacto, como es el caso del Nissan Qashqai o del Peugeot 3008, que en el caso de Opel será el Grandland X. A ellos, algunos fabricantes apuestan por añadir uno aún más grande y con siete plazas, como el Nissan X-Trail o el Peugeot 5008. Pero Opel ha decidido apostar por uno un poco más pequeño y más personalizable, el Crossland X, también fabricado en España.

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