Lexus GS450H, la berlina con mejor valor añadido

El Lexus GS es una berlina muy lujosa y confortable, con un completo equipamiento de serie que resulta una muy buena alternativa a los modelos alemanes de Audi, BMW o Mercedes. Es un rival del A6, de la serie 5 y del Clase E respectivamente.

A su favor, el modelo de Lexus ofrece el ser un vehículo menos visto, con personalidad y proporcionar por ello un cierto aire diferenciador. Y también un buen comportamiento en carretera que combina de una forma bastante razonable el confort de marcha con la estabilidad en carretera.

Hasta aquí el Lexus GS normal, pero este 450H ofrece un valor añadido increíble en su aspecto de vehículo híbrido. Entonces, se convierte en la única berlina híbrida de este segmento del  mercado. Y eso le hace un vehículo muy interesante.

En el mercado español encontramos dos vehículos híbridos como el Toyota Prius y el Honda Insight, pero ninguno de los dos tienen nada que ver con este Lexus. Si aquellos son vehículos de dimensiones compactas pensados para una utilización urbana, en el caso del Lexus es una gran berlina con la “H” añadida.

Lo es porque incorpora un motor de gasolina de altas prestaciones, un V6 con 296 caballos. Con este dato ya queda claro que es distinto a los otros híbridos. Este motor transmite su potencia  a las ruedas traseras. Además, y eso es lo que le hace diferente, cuenta con un motor eléctrico de 200 caballos que también transmite su par a las ruedas posteriores.

Cuando funcionan los dos al mismo tiempo la potencia máxima se reduce a 345 caballos. Una cifra más que suficiente para mover con toda la soltura de un deportivo a una berlina que se muestra realmente ágil en su funcionamiento. Y da lo mismo que circulemos por una buena autopista o que lo hagamos por una carretera de montaña. Porque el GS450H lo aguanta todo.     

Lo que más llama la atención es su puesta en marcha muy silenciosa. De hecho, las primeras veces que uno se sienta al volante y trata de ponerlo en marcha se da cuenta que lo único que ocurre es que en el reloj de la izquierda del cuadro aparece el indicativo “ready”. A partir de entonces ya podemos empezar a movernos aunque el motor de gasolina no se haya puesto en marcha.   

Eso es muy llamativo pero uno se acostumbra y además ocurre igual que en el resto de vehículos híbridos cuando funcionan en modo sólo eléctrico. La diferencia la encontramos cuando empezamos a rodar por una carretera y a tratar de exprimir al máximo la mecánica. Entonces, sorprende y mucho que una berlina lujosa como ésta, que además cuenta con la etiqueta de vehículo ecológico, sea capaz de acelerar como lo hace este vehículo.

Su velocidad máxima está autolimitada en 250 km/h, un  registro habitual entre sus rivales más directos con motores de 300 caballos. Donde no hay tanto parecido es en su capacidad de aceleración.  Hace el 0 a 100 km/h en menos de seis segundos, un valor de un deportivo.

Y sorprende, además, cómo consigue esa cifra porque cuando ya está funcionando con el motor térmico a buen ritmo y presionamos aún más el acelerador, se nota cómo añade la potencia del motor eléctrico. Es entonces cuando se empieza a disfrutar también de las prestaciones del híbrido y no sólo del hecho de llevar un coche de alguna forma comprometido con la protección medioambiental. No es fácil expresar en pocas palabras esa sensación que transmite al conductor esa combinación de los dos motores.

Hay un dato que no quiero dejar de darles, el de su consumo. Según las cifras homologadas, consume 7,2 litros en carretera y 9,2 en ciudad mientras que en el ciclo mixto la cifra es de 7,9 litros. A modo de ejemplo, un BMW 540 con 306 caballos tiene un consumo en ciclo mixto de 10,5 litros, mientras que su aceleración de 0 a 100 km/h es de 6,1. Y lo mismo ocurre con los rivales de Audi y Mercedes.

La verdad es que si hacemos una conducción tranquila, algo a lo que se adpata perfectamente este coche, podemos estar en cifras entre 8 y 9 litros por carretera, pero si tratamos de forzar la máquina la cifra puede llegar hasta los 12 litros si empezamos a jugar con el acelerador.    

Este Lexus me ha gustado mucho y le gustaría a todo el que se sentara a sus mandos. Un coche cómodo, muy seguro y que pese a tener un motor de gasolina de seis cilindros consume como uno potente de cuatro cilindros mientras que su funcionamiento y sus prestaciones, gracias al valor añadido del  motor eléctrico y del sistema híbrido, corresponde a un V8.

El GS450H tiene sus pegas, como es lógico, pero son muy razonables. La primera es su maletero, bastante reducido como consecuencia de la situación de todo el sistema de baterías en la zona posterior. Con ello, pese a ser una berlina bastante grande, de 4,83 metros, su maletero sólo ofrece 280 litros, demasiado justo. 

La otra pega que le he encontrado al coche es su precio, caro pero muy razonable. Es caro porque la que hemos probado era la versión más equipada, la President, que cuesta 73.100 euros. Pero a cambio tiene absolutamente todo lo que se le puede poner a un coche y de hecho no ofrece ningún extra. Todo tipo de ayudas a la conducción incluido el control de crucero adaptativo que ajusta la velocidad a la del resto de los vehículos. Este, además, funciona con bastante precisión. Y también de confort, ya que  ofrece hasta un equipo de sonido con 14 altavoces y 350 watios.

Este Lexus GS450H es una interesante berlina con el valor añadido del sistema híbrido que le hace único en este mercado.