Los empresarios replican a 'Mafo': "La inflación no la producimos, nos la encontramos hecha"

Las críticas lanzadas a los empresarios por el gobernador del Banco del España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, no ha quedado sin respuesta. El presidente de la patronal de la pequeña y mediana empresa (Cepyme), Jesús Bárcenas, aseguró que, “aunque a veces se nos culpe, la inflación no la producimos nosotros, nos la encontramos hecha”. Fernández Ordóñez había puesto a los empresarios en el ojo del huracán al culpar de la elevada inflación –que se sitúa ya en el 5,1%- al aumento de los márgenes empresariales, una afirmación que causó un malestar nada oculto entre los empresarios.

Más teniendo en cuenta el inquietante diagnóstico efectuado por Bárcenas, también vicepresidente de CEOE, sobre la situación de las empresas durante la presentación del Observatorio de Situación Económica de la Pyme. Apenas habló siete minutos, tiempo suficiente para justificar el endurecimiento en el discurso de la patronal, que se puso de manifiesto en el comunicado hecho público tras la Junta Directiva celebrada el miércoles. Bárcenas dejó claro que las pymes afrontan en los próximos meses elevadas tasas de mortandad, y que necesitan soluciones urgentes que pasan por que “el Gobierno se moje”.

El presidente de Cepyme incidió en que el diálogo social, que por otra parte adelantó que no marcha a muy buen ritmo, no sirve para abordar problemas que corresponde acometer al Ejecutivo. “Tenemos contactos directos con el Gobierno, tienen la suficiente información puntual; por eso nos preocupa”, dijo. En este sentido, insistió en que las medidas no pueden dejarse para el año que viene, como mucho para la vuelta del verano, y pidió de forma urgente una línea de financiación para las pymes, que pudiera ser a través del ICO o “por cualquier otra vía”, si no se quiere afrontar un escenario “apocalíptico” al cierre del presente ejercicio.

Asfixia financiera

Y es que, según explicó, las pequeñas y medianas empresas viven actualmente una situación de “asfixia financiera”, a la que ha contribuido sin querer el boyante panorama vivido en los últimos años. “Es que antes pedíamos cinco y nos daban diez. Ahora cuesta hasta renovar los compromisos que ya había contraídos. Esto se está llevando por delante a muchas empresas”, precisó. Estos problemas de financiación estarían igualmente propiciando un mayor aplazamiento del pago, que está a su vez dando lugar a un incremento de la morosidad. “Está pasando de unas empresas a otras”, explicó Bárcenas.

Respecto al propio diálogo social, el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, se comprometió en primera persona, junto a empresarios y sindicatos, a tener lista una hoja de ruta antes del 31 de julio. Aunque Bárcenas reconoció que se han producido ya los primeros encuentros, estos simplemente han servido para fijar posiciones y “no hay mucho trabajo hecho”. Es más, recordó que el proceso que arrancó hace apenas dos semanas “ya llevaba retraso”.

El informe presentado por Cepyme y correspondiente al mes de junio no hace sino profundizar en todas estas debilidades, que confluyen en una reducción de la producción y las ventas por parte de las pequeñas y medianas empresas, que por otra parte constituyen el 99% del tejido empresarial español. “Las expectativas apuntan a la continuidad de este proceso en los próximos meses”, revela el documento. Este escenario deriva de que las pymes están sufriendo la debilidad de la demanda, que conduce a una disminución de la cartera de pedidos y a una acumulación de existencias.

En junio, el texto constata un repunte de los costes laborales procedentes del aumento de salarios, “lo que obstaculizará la capacidad competitiva de las pymes”. Un alza de los costes que, frente a lo apuntado por Fernández Ordóñez, “está incidiendo negativamente en la evolución de los márgenes empresariales y minorando la rentabilidad de las pymes”.