La AN confirma una multa a Sabadell por "deficiencias" en la venta de bonos

La Audiencia Nacional ha confirmado una multa de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) a Banco Sabadell por "deficiencias" en la comercialización de productos. El supervisor consideró una infracción grave el proceso de evaluación de la conveniencia de los clientes para estos productos.

En un fallo al que ha tenido acceso este medio, la Audiencia Nacional rechaza los argumentos del banco catalán, con sede social en Alicante, y confirma la sanción. Sabadell había basado su recurso en vulneración del principio de inocencia, de la confianza legítima, de tipicidad, de vulneración del principio de culpabilidad por falta de dolo y de vulneración del principio de proporcionalidad.

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Ninguno de estos argumentos ha servido para que la Audiencia Nacional corrija a la CNMV, que impuso la multa por "infracción muy grave" el 3 de marzo de 2020, justo antes del confinamiento, por hechos producidos durante el ejercicio de 2017, por la comercialización a minoristas de emisiones propias de bonos sénior. Es decir, de deuda emitida por la entidad.

La CNMV encontró que el banco fue "muy activo" en esta comercialización, por lo que la Dirección General de Entidades revisó cuestiones relativas a la información usada por el banco para evaluar la conveniencia de sus clientes minoristas. Y constató que había un porcentaje "atípicamente" elevado de clientes que aseguraron conocer todos los riesgos, o todos salvo el apalancamiento; que había un porcentaje elevado de conocimiento general de los mercados financieros, porcentaje también superior al de la población con estudios de bachillerato o superiores, y un "número atípicamente elevado" de clientes que manifestaron tener elevados conocimientos financieros pese a no tener experiencia profesional ni formación académica de nivel medio o bajo.

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Ante ello, el supervisor pidió a la entidad un ejercicio de auditoría interna, que se realizó a través de una población de 339.276 clientes con una encuesta telefónica a 700 personas físicas. El análisis, al cruzar datos, no contentó a la CNMV, que dedujo que "la información que la entidad utilizaba para evaluar la conveniencia sobreestimaba, en un número relevante de casos, tanto el nivel de formación académica de los clientes como sus conocimientos financieros reales y, en consecuencia, permitía presumir la conveniencia inadecuadamente".