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¡Cuidado con las procesionarias! Por qué son peligrosas y qué riesgo corre tu perro si le pican
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LO PRIMERO ES LAVAR CON AGUA

¡Cuidado con las procesionarias! Por qué son peligrosas y qué riesgo corre tu perro si le pican

El calor de la primavera despierta a las orugas procesionarias, que bajan de los árboles. Ante una picadura, no es recomendable frotar a nuestro perro, ya que implica este riesgo

Foto: ¡Cuidado con las procesionarias! Por qué son peligrosas y qué riesgo corre tu perro si le pican (Foto: EFE/Juan Carlos Hidalgo)
¡Cuidado con las procesionarias! Por qué son peligrosas y qué riesgo corre tu perro si le pican (Foto: EFE/Juan Carlos Hidalgo)

Con la llegada del buen tiempo, las orugas procesionarias empiezan a bajar de los árboles formando hileras y campan a sus anchas por diferentes terrenos de parques, jardines y bosques. El término de procesionaria se debe principalmente a que una desfila detrás de otra a modo de procesión.

Este animal es el enemigo de los pinares españoles. Según van creciendo, los daños se van haciendo más grandes hasta el punto de que los pinos se secan completamente y terminan cayendo.

En los seres humanos, una picadura de una oruga procesionaria puede provocar dermatitis, lesiones oculares, reacciones alérgicas o urticarias. Pero en el caso de los animales y niños son mucho más peligrosas.

¿Qué hacer en caso de picadura o intoxicación?

La mejor prevención es evitar acercarse a ellas, ya que al intentar aplastarlas podemos poner en peligro a nuestro perro, pues los pelos que recubren su cuerpo pueden generar un cuadro de intoxicación si están en contacto con él. Lo mismo ocurre si las pisa, las olisquea o las muerde.

Foto: La oruga procesionaria puede convertirse en un peligro (EFE)

En este caso, lo primero que hay que hacer es lavar la zona de contacto con agua, mucho mejor si está caliente y no intentar quitar los pelos ni frotar a nuestro perro, pues lo podemos perjudicar y agravar su intoxicación. El siguiente paso será llevarlo al veterinario para que lo examine y le dé el tratamiento que estime oportuno.

La oruga procesionaria cada vez es más común en pinares, parques y jardines. Su proliferación se debe principalmente a los inviernos suaves, lo que aumenta que haya más riesgos, especialmente en animales, pues incluso puede provocarles la muerte si no se trata de inmediato.

Con la llegada del buen tiempo, las orugas procesionarias empiezan a bajar de los árboles formando hileras y campan a sus anchas por diferentes terrenos de parques, jardines y bosques. El término de procesionaria se debe principalmente a que una desfila detrás de otra a modo de procesión.

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